Auster y sus amigos
Veo ¡®Smoke¡¯ una vez al a?o. Y me conmuevo. Todo es amor en esa pel¨ªcula, una austeriana expresi¨®n del amor a la vida
Comenc¨¦ a leer a Paul Auster muy a principios de los a?os noventa porque era amigo de Lou Reed y cenaban juntos en Nueva York. Si era el escritor favorito de Lou Reed, hab¨ªa que leerlo sin excusa. A ambos les un¨ªa una b¨²squeda ¨ªntima y obsesiva de la resoluci¨®n de un enigma llamado Nueva York. Si Lou Reed edit¨® un disco titulado New York, Auster public¨® La trilog¨ªa de Nueva York. Las cosas que Paul Auster dijo a la muerte de Lou Reed se podr¨ªan decir ahora a la muerte del autor de El libro de las ilusiones. La principal: tanto Lou Reed como Auster ten¨ªan el ingrediente secreto de la modernidad, sus obras eran nuevas y distintas. Eran diferentes.
La escritora Ana Merino me present¨® a Paul Auster en la Feria del Libro de Miami de noviembre del a?o 2013 y tuve ocasi¨®n de decirle que fue Lou quien me llev¨® a sus novelas. Auster se rio y expres¨® la pena por la muerte de su amigo. En ese momento hac¨ªa un mes escaso de la muerte de Reed, en octubre del 13. Paul Auster ten¨ªa un rostro ic¨®nico y cinematogr¨¢fico. Auster era una variante literaria de los rostros simb¨®licos de Paul Newman y Robert Redford. Auster fue en Europa la cara m¨¢s vanguardista y m¨¢s moderna de la literatura de Estados Unidos. El cine y la m¨²sica formaron parte de su mundo creador.
Con su amigo el director de cine Wayne Wang rod¨® una pel¨ªcula excepcional y maravillosa. Estoy hablando de Smoke (1995). Luego, en solitario, rod¨® Lulu on the Bridge (1998). Pero es Smoke la que conduce la literatura de Auster a un estado cinematogr¨¢fico, porque su literatura estaba hermanada con el cine. Yo creo que en breve alguien llevar¨¢ a la pantalla su ¨²ltima y excelente novela Baumgartner, una novela visual en grado sumo. La grandiosa Smoke fue cine y literatura al cincuenta por ciento. Si amas el cine, y a¨²n no has visto Smoke, ya est¨¢s tardando.
El homenaje universal que uno pude hacer a Paul Auster hoy es volver a ver Smoke. Yo la veo una vez al a?o. Y me conmuevo. Todo es amor en esa pel¨ªcula, una austeriana expresi¨®n del amor a la vida. Auster no solo fue un escritor con el coraz¨®n lleno de cine. Tambi¨¦n lo llen¨® de m¨²sica. El final de la pel¨ªcula es una canci¨®n de Tom Waits, que canta mientras Harvey Keitel narra el cuento de Navidad m¨¢s hermoso del mundo. Auster era puro amor ir¨®nico a la vida. Y eso cund¨ªa no solo en sus novelas, que ten¨ªan una s¨®lida voluntad de desplazamiento hacia todas las artes contempor¨¢neas.
En la pel¨ªcula Blue in the Face, tambi¨¦n dirigida por Auster, aparece Lou Reed en la pantalla hablando de la televisi¨®n sueca que emite en directo operaciones de ojos con un realismo sofocante. Recuerdo que Suecia emiti¨® un comunicado censurando ese momento de la pel¨ªcula. Nueva York siempre fue una fiesta. Tom Waits, Harvey Keitel, Lou Reed, Stockard Channing, la tuerta m¨¢s atractiva del mundo, con su parche en el ojo izquierdo que lleva con el mismo estilo que nuestro Ray Loriga, y, por supuesto, William Hurt, alter ego de Auster en esta pel¨ªcula.
Debo decir que es muy conveniente recordar Smoke en la muerte de Paul Auster, porque all¨ª se nos dicen cosas que seguir¨¢n vivas muchas d¨¦cadas. Es una pel¨ªcula sobre la bondad natural de la gente. Y eso era Auster: bondad, belleza y magia.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.