Inter¨¦s com¨²n y agrado mutuo

Trascendi¨® la reuni¨®n que mantuvieron un grupo numeroso de tenistas liderado por Novak Djokovic, actual Presidente del Consejo de Jugadores de la ATP, en los d¨ªas previos al inicio del Open de Australia. Y, sobre todo, trascendi¨® y abri¨® la caja de los truenos el desacuerdo de los jugadores por percibir un 7% del dinero que se genera en los torneos del Grand Slam.

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Ya s¨¦ que hablar de dinero despierta resentimientos y muy poca empat¨ªa hacia los que ya ganan mucho. Yo creo que estamos hablando de una justa redistribuci¨®n monetaria en un ¨¢mbito concreto. La sensibilidad hacia las desigualdades del mundo y lo mucho que nos ata?e a todos los doy por supuestos.

He le¨ªdo que el serbio se est¨¢ llevando todos los varapalos y ha sido acusado de avaricioso por querer mejorar la dotaci¨®n de los tenistas. Por lo que le conozco, le tengo por m¨¢s generoso y comprometido que por avaricioso. Y, adem¨¢s, me extra?a que a nadie se le ocurra cuestionar, en todo caso, a los Grand Slams mismos por destinar a los jugadores un porcentaje de sus ingresos mucho m¨¢s bajo que en otros deportes.

Yo entiendo que la necesidad de reajustar situaciones pasa en muchos ¨¢mbitos y por causas muy diversas. Querer ver una guerra entre ellos, pienso que se aleja bastante de la realidad. Es m¨¢s, pienso que hay un agrado rec¨ªproco y un inter¨¦s com¨²n. Los tenistas y los Grand Slams se necesitan mutuamente y el inter¨¦s por entenderse y por mejorar las cosas me consta que es la nota dominante.

Los cuatro grandes torneos del a?o son, indiscutiblemente, garantes del prestigio de este deporte. Son unos eventos magn¨ªficamente organizados y competir en ellos es la m¨¢xima aspiraci¨®n de cualquier jugador. Pero tambi¨¦n hay que entender que estos conforman la otra cara de esta moneda. Sin el juego de los grandes tenistas, que apasiona y mueve a tantos aficionados alrededor del mundo, nada de todo esto ser¨ªa posible.

Ojal¨¢ se destinara tambi¨¦n una bolsa econ¨®mica a abaratar los costes de las j¨®venes promesas

No debe ser tan dif¨ªcil de entender, pues, que intenten corregir una parte del trato que no les parece justo, ni tampoco valorar que los que tienen m¨¢s peso pongan voz a los que, de levantar la suya, ser¨ªan escasamente escuchados.

Si se me permitiera mi opini¨®n en el foro adecuado, yo ir¨ªa incluso m¨¢s all¨¢ en cuanto a la gesti¨®n de los recursos que originan estos cuatro grandes torneos. El tenis es un deporte car¨ªsimo para el joven que intenta hacerse un hueco en el circuito profesional. Es un dispendio que s¨®lo puede ser sufragado por unos padres ricos o por unas Federaciones potentes. Y de estas ¨²ltimas hay cuatro, justamente: la de Australia, la de Estados Unidos, la del Reino Unido y la de Francia.

Ojal¨¢ con estos nuevos acuerdos se destinara tambi¨¦n una bolsa econ¨®mica al abaratamiento de costes de las j¨®venes promesas a nivel mundial. Si no se hace algo al respecto, mucho me temo que las oportunidades quedar¨¢n acotadas a los padres con solvencia econ¨®mica o a las canteras de las Federaciones que poseen un Grand Slam.