La ¡®reina¡¯ Shelly Ann Fraser Pryce logra su cuarto oro en los 100m
La jamaicana, de 32 a?os, gan¨® con 10,71s en su regreso a la gran escena tras dos a?os parada
Olviden a Bolt, piden, pero el esp¨ªritu de Bolt es omnipresente e inevitable en la sudorosa Doha, donde hay unos Mundiales de atletismo. Si Tajay Gayle, un jamaicano de 23 a?os gana en longitud con una marca (8,69m) que le permite pensar que puede acabar compartiendo mesa con los cuatro grandes de la especialidad (Powell, Beamon, Lewis y Pedroso), la prensa de su pa¨ªs cuenta su triunfo con el mismo ¨¦nfasis con el que subraya, despu¨¦s de la final de 100m (Blake, quinto) que por primera vez desde 2005 ning¨²n jamaicano sub¨ªa al podio de la distancia que en tiempos de Bolt se consideraba su propiedad privada.
Y tampoco se puede contar bien que Shelly Ann Fraser-Pryce gan¨® el oro en los 100m (10,71s, la segunda mejor marca de su vida) sin recordar que fue ella, la jovencita de Kingston entonces, la reina de la velocidad femenina, la consorte de Bolt en un reinado que comenz¨® conjuntamente en los Juegos de Pek¨ªn, hace 11 a?os. En su primer t¨¦rmino gan¨® cuatro oros mundiales en los 100m (2009, 2013 y 2015) y dos ol¨ªmpicos (2008 y 2012)
Fue una de las finales m¨¢s disputadas y de mejor nivel que se recuerdan (cuatro atletas bajaron de los 11s), en la que Fraser-Pryce sali¨® disparada desde los tacos de salida y no desaceler¨® hasta la l¨ªnea de meta. Sus 10,71s en la segunda marca m¨¢s r¨¢pida en una final, tras los 10,70s de Marion Jones en Sevilla 99. La segunda, la brit¨¢nica Dina Asher Smith (10,83s) bati¨® el r¨¦cord de su pa¨ªs; la tercera fue Marie Josee Ta Lou (10,90s), de Costa de Marfil.
Fraser-Pryce, que lleg¨® a Doha con la cuarta mejor marca mundial de la historia (10,70s), no estuvo en el Mundial de Londres de 2017 en el que Bolt se despidi¨® del atletismo. Ella estaba en casa, a punto de dar a luz a su primer hijo. La maternidad la hab¨ªa decidido despu¨¦s de que en los Juegos de R¨ªo de 2016, donde fue tercera medio lesionada, no pudiera repetir los oros de Pek¨ªn y Londres 2012.
Pocos daban un duro por el regreso a la pista de la velocista, bajita y con una velocidad de zancada terrible, pero despu¨¦s de un 2018 a media tinta, la pupila de Stephen Francis (el t¨¦cnico tambi¨¦n de Asafa Powell, el que abri¨® el camino a Bolt, y el saltador Gayle), regres¨® a su plenitud, madre y tremendamente r¨¢pida de nuevo a los 32 a?os. Parad¨®jicamente, el d¨ªa que consigui¨® su mejor marca del a?o, 9,73s, a tres cent¨¦simas de su mejor marca de siempre, sufri¨® quiz¨¢s la derrota que m¨¢s le doli¨®, pues perdi¨®, por cuesti¨®n de mil¨¦simas, con su compa?era con Francis, en Kingston, Elaine Thompson, justamente la misma que en R¨ªo hab¨ªa roto su racha ol¨ªmpica. En Doha, Thompson corri¨®, como ella, con una gran peluca de color y cola de caballo, pero no corri¨® tan r¨¢pido. Fue cuarta (10,93s).
La p¨¦rtiga rota
Esto es una atleta tocada por la gracia de la adrenalina en Doha, Angelica Bengtsson, sueca de 26 a?os. Su p¨¦rtiga se quiebra cuando la clava en el cajet¨ªn y empieza a doblarla en su tercer intento sobre 4,80m y se cae de espaldas, cabeza bajo para aterrizar en el mismo cajet¨ªn. Un susto de muerte del que sale sonriente y haciendo gestos de que no ha pasado nada. No tiene m¨¢s p¨¦rtigas de esa longitud y dureza, pero la socorre una rival ya eliminada, la francesa Guillon-Romarin, que le presta una. Inmediatamente vuelve la sueca al pasillo de carrera y se lanza decidida. Sin temblar, sin miedo, sin pensar en ello, supera por primera vez en su vida al aire libre una altura que se le resist¨ªa. Cuando el susto se seren¨®, no volvi¨® a saltar bien. Con sus 4,80m termin¨® sexta de una final ganada por la rusa Sidorova (4,95m) por delante de la norteamericana Sandi Morris (4,90m) y la griega, y defensora del t¨ªtulo, Katerina Stefanidi (4m85).
El chaval del pelo gris
¡°Me he te?ido, me he te?ido¡±, advierte Noah Lyles por Twitter, casi voceando, para que todo el mundo se entere, como si sus fans que le han visto correr con el pelo s¨²bitamente gris las series de 200m, la prueba en la que es actualmente el mejor del mundo y el cuarto de la historia (19,50s), pudieran pensar que a los 22 a?os hab¨ªa sufrido un ataque de ancianidad. As¨ª es Lyles, extrovertido, ruidoso y vocinglero, y le gusta llamar la atenci¨®n, como a Bolt. As¨ª no es Coleman, el antiBolt, que se hab¨ªa apuntado tambi¨¦n a los 200m pero que decidi¨® borrarse al d¨ªa siguiente de sentarse en el trono de hombre m¨¢s r¨¢pido del mundo. En las semifinales del lunes y en la final del martes el personaje Lyle se ir¨¢ asentado. Hasta ahora se conforma con no correr demasiado y vivir relajado.
?
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.