Real Madrid-Chelsea: dos rebeldes por la Champions
El equipo blanco y el londinense, con un plan de juego com¨²n que prioriza no encajar, disputan la ida de las semifinales con el ruido pol¨ªtico de fondo tras el fracaso de la Superliga que ambos impulsaron
Sobre los restos del joven cad¨¢ver de la Superliga, Real Madrid y Chelsea, dos de sus fundadores, se citan en la vieja Champions, el modelo que pretend¨ªan derrocar. Son unas semifinales del gran t¨ªtulo europeo, el santo grial de los blancos, pero en la ¨²ltima semana la pol¨ªtica se impuso al juego. Se habl¨® m¨¢s desde los despachos que sobre el c¨¦sped, y los vestuarios no fueron ajenos a ello en la previa del duelo de Valdebebas (21.00, Movistar Liga de Campeones). ¡°Es absurdo pensar que no podemos estar el siguiente a?o¡±, dijo Zinedine Zidane sobre una hipot¨¦tica sanci¨®n en un intento de escapar del monotema. ¡°Si estamos en lo que se dice, nos va a perjudicar y la liamos¡±, alert¨® el franc¨¦s antes del choque de este martes. Su colega blue, Thomas Tuchel, tuvo menos reparos en comentar el futuro formato del torneo de la UEFA: ¡°Solo veo m¨¢s partidos, no me entusiasma¡±.
De momento, lo inmediato es la b¨²squeda de una final para la que ninguno de los dos equipos son¨® a principios de curso. Los locales se sent¨ªan lejos de la ¨¦lite tras sus costalazos en las dos campa?as precedentes (eliminados en octavos), idea que se agudiz¨® despu¨¦s de su apurada clasificaci¨®n en la fase de grupos. Los londinenses, mientras, pese a ser los que m¨¢s invirtieron el pasado verano de pandemia en el continente (247 millones en Havertz, Werner o Ziyech), empezaron la temporada tan torcidos que en enero echaron del banquillo a uno de sus iconos, Frank Lampard, y trajeron a Tuchel, reci¨¦n despedido del PSG. Por suerte para ambos, el final del invierno y la primavera les sent¨® bien.
M¨¢s all¨¢ de matices, Madrid y Chelsea comparten una virtud innegociable en sus aspiraciones: defender bien. Con el alem¨¢n al frente, los ingleses han progresado dejando la porter¨ªa a cero en 15 de los 20 partidos. Bien lo sufri¨® el Atl¨¦tico en octavos. Los blancos, por su parte, solo pudieron corregirse cuando recuperaron el cerrojazo del postconfinamiento para paliar sus cacareadas dificultades ofensivas. Sus ¨²ltimos cuatro compromisos retratan su a?o: sin encajar un gol, pero metiendo solo en uno de ellos, cuando Benzema se hizo presente en C¨¢diz.
Sin Mendy y con Kroos
Si este tipo de cruces se decide a favor de quien menos errores comete, las caracter¨ªsticas de las dos escuadras invitan a pensar especialmente en un duelo as¨ª, disputado en el desfiladero m¨¢s que a campo abierto. En este paisaje, el Madrid recurre a su experiencia (nueve semifinales de las ¨²ltimas 11) para salir victorioso del trance. La fatiga y las lesiones acosan a los blancos, que ya anunciaron tras derrotar al Barcelona hace dos semanas que se encontraban al l¨ªmite f¨ªsico, pero, llegados a este punto, no existe un vestuario en Europa con tanto conocimiento para operar en estos escenarios tan opresivos. Es su gran arma. M¨¢s de medio once tipo actual estuvo presente en las tres Champions seguidas (Ronaldo al margen, claro).
Desde Liverpool y con el dep¨®sito en la reserva, la vida del Madrid ha sido una espera hasta el Chelsea, aguardando lesionados y dosificando lo que hab¨ªa, consciente de que no iba a poder abarcar todo con los mismos. Ramos, Mendy, Valverde y Lucas V¨¢zquez no llegaron a tiempo. S¨ª Kroos y Hazard, que despu¨¦s de dos a?os de desdichas en Espa?a volver¨¢ a medirse al club con el que fue feliz. En lo t¨¢ctico, la gran duda es si el t¨¦cnico dispondr¨¢ defensa de cuatro o con tres centrales, si Marcelo s¨ª o no.
El Real Madrid-Chelsea no apaga el runr¨²n pol¨ªtico, pero, al menos, el f¨²tbol virgen recupera su lugar central en el Di St¨¦fano entre dos equipos que nunca se han enfrentado en la Champions. En el ¨²ltimo medio siglo, solo se vieron en la final de la Recopa de 1971 y en la Supercopa de Europa de 1998. Las dos para los blue.
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