Un informe revela que la desastrosa investigaci¨®n del FBI permiti¨® a Larry Nassar abusar de m¨¢s atletas

Un muy esperado informe publicado este mi¨¦rcoles ha dado un duro golpe a la reputaci¨®n del Bur¨® Federal de Investigaciones, el FBI. La oficina del inspector general del Departamento de Justicia (OIG) ha se?alado las muchas deficiencias que los agentes cometieron en la investigaci¨®n de los abusos sexuales cometidos por Larry Nassar, el m¨¦dico del equipo de gimnasia de Estados Unidos. Aunque Nassar se encuentra hoy en prisi¨®n cumpliendo una cadena perpetua, los autores del informe consideran que las graves fallas de los agentes adscritos a la oficina de Indian¨¢polis (Indiana) permitieron que el depredador de m¨¢s de 330 mujeres siguiera actuando. ¡°El FBI no condujo ninguna actividad en la investigaci¨®n por m¨¢s de ocho meses siguiendo una entrevista en septiembre de 2015 [a una de las atletas que denunciaron]. Durante ese periodo, como se ha afirmado a detalle en muchas demandas civiles, los abusos sexuales de Nassar continuaron¡±, se?ala el documento en una de sus demoledoras conclusiones.

¡°La OIG hall¨® que, a pesar de la extraordinaria seriedad de las acusaciones y la posibilidad de que la conducta de Nassar continuara, agentes del FBI en Indian¨¢polis fracasaron en responder a las acusaciones con la seriedad y urgencia que estas merec¨ªan y necesitaban¡±, indica la revisi¨®n a la actividad policial, que subraya que la conducta viol¨® varias pol¨ªticas internas del Bur¨®. La oficina del investigador general habl¨® en m¨¢s de una ocasi¨®n con 60 testigos, entre ellos varias v¨ªctimas y agentes del FBI, para elaborar este documento.

Alrededor de 70 mujeres fueron abusadas por Nassar desde que el FBI conoci¨® por primera vez las acusaciones contra el m¨¦dico, en julio de 2015, y su arresto, en noviembre de 2016, acusado de varios cargos de violaci¨®n. El reporte realizado por el departamento de Justicia encuentra en la oficina del FBI en Indian¨¢polis el origen del problema. Los agentes de esa jurisdicci¨®n, bajo las ¨®rdenes de Jay Abbott, fueron los primeros que oyeron de Steve Penny, el presidente de la Federaci¨®n de Gimnasia, los se?alamientos en contra de Nassar. Era julio de 2015. Penny dijo a los investigadores que hab¨ªa tres atletas dispuestas a hablar con ellos para relatar las vejaciones. Tambi¨¦n les dio a los agentes un USB con fotos y v¨ªdeos de supuestos tratamientos que el m¨¦dico realizaba a sus pacientes, la mayor¨ªa de ellas menores de edad.

Los agentes, sin embargo, no se interesaron en el caso, se?ala el informe. A lo largo de las seis semanas posteriores el esfuerzo para investigar estos se?alamientos fue m¨ªnimo: solo una entrevista telef¨®nica con una de las v¨ªctimas, hecha el dos de septiembre; la revisi¨®n del USB y una discusi¨®n del caso con la Fiscal¨ªa local y con colegas de la oficina de Detroit (Michigan), el Estado donde Nassar trabajaba para un club de gimnasia y para una secundaria. El poco inter¨¦s de los agentes se notaba en la escasa documentaci¨®n que hab¨ªan hecho. Solo cinco p¨¢ginas escritas a mano tras la charla con Penny, otras tres hojas de la entrevista a la atleta y unos 45 correos intercambiados con fiscales y agentes.

Los investigadores y fiscales no entend¨ªan por qu¨¦ el caso deb¨ªa originarse en Indiana. Ning¨²n dato de la entrevista hecha en septiembre ataba los delitos a este Estado. Los agentes no hablaron nunca con las otras dos atletas que estaban dispuestas a testificar. ¡°Ambas oficinas [el FBI y la Fiscal¨ªa] ten¨ªan serias dudas de que las acusaciones contra Nassar fueran suficientes para soportar una acusaci¨®n federal¡±, se?ala el documento. El caso de Nassar, quien fue detenido a petici¨®n de la Fiscal¨ªa de Michigan, se convirti¨® en el del mayor depredador sexual en la historia de Estados Unidos. Los fiscales incluso recomendaron pasar el caso a agentes del FBI en Detroit.

La investigaci¨®n estuvo ocho meses en punto muerto. La revivi¨® cuando, de nueva cuenta, empleados de la Federaci¨®n de atletismo contactaron a la oficina del FBI en Los ?ngeles para hacer nuevos se?alamientos. Era mayo de 2016. En esa reuni¨®n, los agentes escucharon acusaciones que se hab¨ªan hecho en julio de 2015 al otro lado del pa¨ªs. El tel¨¦fono son¨® entonces en la oficina de Indian¨¢polis. Los angelinos preguntaron a sus colegas qu¨¦ hab¨ªan hecho con la informaci¨®n que les hab¨ªan dado las v¨ªctimas. La respuesta fue que hab¨ªan creado una petici¨®n formal para transferir el caso. Ment¨ªan. ¡°La oficina de Los ?ngeles y otros empleados del FBI se?alaron que buscaron esa forma FD-71 en los sistemas del FBI, pero no la hallaron¡±, se?ala la oficina del inspector general, quien tambi¨¦n busc¨® por sus propios medios el documento sin encontrarlo.

Jay Abbott, el jefe de la oficina del FBI en Indian¨¢polis, se retir¨® en enero de 2018 sin sanci¨®n alguna. Su salida coincidi¨® con la primera sentencia de Nassar, de 40 a 175 a?os de c¨¢rcel. Los investigadores de la OIG hallaron en algunos correos que el agente Abbott intent¨® convertirse en dirigente de la Federaci¨®n de Gimnasia, un cargo que qued¨® vacante cuando Penny, a qui¨¦n hab¨ªa entrevistado varias veces y actualmente enfrenta un juicio por destruir pruebas, renunci¨® presionado por el caso Nassar. Abbott neg¨® esto cuando el Departamento de Justicia se lo pregunt¨®. ¡°No lo recuerdo¡±, dijo. ¡°El comportamiento descrito en el reporte no representa al FBI ni a nuestras decenas de miles de agentes en retiro y activos¡±, ha se?alado el Bur¨® en una respuesta oficial al informe.

Los agentes de Los ?ngeles comenzaron la investigaci¨®n. Fue en ese momento que el caso comenz¨® a construirse. Despu¨¦s, en agosto de 2016, The Indianapolis Star public¨® una investigaci¨®n en la que varias atletas narraban sus experiencias. La polic¨ªa de la Universidad de Michigan, que hab¨ªa empleado a Nassar, tambi¨¦n hab¨ªa recibido denuncias de una mujer que fue v¨ªctima del m¨¦dico a los 16 a?os. Despu¨¦s de un c¨²mulo de acusaciones, el FBI de Detroit descubri¨® 30.000 im¨¢genes de pornograf¨ªa infantil en computadoras incautadas en la residencia de Nassar. Las ruedas de la justicia comenzaban a moverse finalmente. Pero pudieron haberlo hecho mucho antes.

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