Los Rams se llevan la gloria en una Super Bowl que deja el trofeo en Los ?ngeles
El equipo local doblega a los Bengals de Cincinnati (23-20) en un partido marcado por el poderoso espect¨¢culo del medio tiempo
Dwayne The Rock Johnson dio inicio a la Super Bowl LVI. La aparici¨®n sorpresa del exluchador y estrella cinematogr¨¢fica anticipaba una tarde digna de Hollywood. No estaba equivocado. Los Rams de Los ?ngeles han ganado en casa la final del f¨²tbol americano a los Bengals de Cincinnati (23-20) en una tarde llena de dramatismo, remontadas, lesiones, pasiones desbordadas y figuras inesperadas. Es el segundo a?o consecutivo en que un equipo gana en casa el anhelado trofeo Vince Lombardi de la NFL. Los Rams no ganaban un t¨ªtulo desde el 2000, pero entonces jugaban en Misuri. Despu¨¦s de volver del este en 2016, este domingo el equipo ha logrado reivindicarse tras su derrota en 2019 ante Tom Brady y sus Patriots. As¨ª, Los ?ngeles, la tierra de leyendas bien arraigadas como los Dodgers y Lakers, conoce por fin lo que es tener un equipo ganador de la NFL. La noche consigue otro hito. El rap se lleva parte de la gloria con un espect¨¢culo electrizante de gigantes del g¨¦nero que ha demostrado c¨®mo la NFL, una liga blanca y reacia a la transformaci¨®n, est¨¢ finalmente dispuesta a cambiar.
El 2022 ser¨¢ recordado para siempre como el a?o en que el hip hop tom¨® definitivamente el evento televisivo m¨¢s visto de Estados Unidos. Dr. Dre, Eminem, Snoop Dogg, Mary J. Blige y Kendrick Lamar se apoderaron del escenario durante 12 minutos para convertir la cancha del estadio SoFi, y frente a 70.000 espectadores, en un v¨ªdeoclip con lowriders y estrellas de finales de los 90, cuando The Chronic, All Eyez on Me y The Doggfather eran ¨¢lbumes de un movimiento marginal y hoy son cl¨¢sicos. El escenario fue un tributo a Compton, la ciudad que impuls¨® a Dre (Andr¨¦ Romelle Young), 56 a?os, desde los tiempos de N.W.A. Sobre la cancha se hicieron gui?os a un restaurante de hamburguesas y una tienda de donuts. Los bailes se inspiraron en coreograf¨ªas de los crips, la pandilla local y Lamar utiliz¨® un mapa a¨¦reo de su ciudad natal, ubicada al sureste de Los ?ngeles.
Fue una alineaci¨®n estelar ¡ªcon tres de los artistas nacidos en la ciudad¡ª que incluso pudo permitirse sorpresas. Anderson .Paak sali¨® tocando la bater¨ªa y 50 Cent, el rapero neoyorquino apareci¨® tambi¨¦n para cantar In da Club un ¨¦xito de los clubes de los tempranos 2000, producido por Dre. Fue el as bajo la manga que se guard¨® Jay Z, la estrella del rap convertido en empresario y quien ha convertido nuevamente los espect¨¢culos del medio tiempo en trending topics internacionales, como hizo con J. Lo y Shakira hace dos a?os, gracias a su empresa Roc Nation. El concierto pudo con las grandes expectativas que hab¨ªa despertado, algo que The Weekend no cumpli¨® en Tampa Bay el a?o pasado. Desde Inglewood, barrio donde se encuentra el SoFi, sali¨® una celebraci¨®n de la potente influencia negra que desde la costa oeste ha lanzado ondas culturales a todo Estados Unidos desde hace d¨¦cadas.
En 2004 el pez¨®n de Janet Jackson, quien cantaba con Justin Timberlake, provoc¨® un esc¨¢ndalo nacional. Esta noche ha sido una rodilla. Eminem, ¨ªdolo de Detroit, termin¨® hincado sobre el escenario tras cantar Lose Yourself, el tema que le hizo ganar un Oscar por la pel¨ªcula 8 Mile. Fue una referencia al gesto con el que Colin Kaepernik, quarterback de San Francisco, protestaba en 2016 contra el racismo durante el himno nacional. Se convirti¨® en un espinoso asunto para la liga durante la presidencia de Donald Trump. Un portavoz de la NFL dijo esta noche que la liga ha aprendido a vivir con ello y que hab¨ªan visto a Eminem hacerlo durante los ensayos. Dos jugadores defensivos de los Rams, Terrell Burgess y Nick Scott, tambi¨¦n se hincaron durante el himno, que enton¨® la primera gran estrella negra del country, Mickey Guyton. Lamar cant¨® Alright, que es considerado un himno al movimiento Black Lives Matter.
El gesto de hoy, aunque haya salido del rapero blanco m¨¢s importante, estaba cargado de simbolismo. D¨ªas antes de la esperada gran final, Brian Flores, el entrenador general de los Dolphins de Miami, quien fue despedido pese a tener un r¨¦cord ganador, decidi¨® demandar a la liga por pr¨¢cticas discriminatorias. Fue un esc¨¢ndalo en una liga repleta de jugadores afroamericanos, pero que solo tiene dos entrenadores negros en 32 equipos.
La zona defensiva de los Rams ha sido la gran estrella de la noche. Sus jugadores fueron clave y estuvieron a la altura para poder compensar los giros de guion no contemplados en la gran final. Principalmente, la lesi¨®n de Odell Beckham Jr. el receptor estrella del equipo local. Beckham, toda una celebridad en la liga, hizo la primera anotaci¨®n del juego. Todo pintaba para que este fuera por fin su gran noche, pero una lesi¨®n de rodilla en el segundo cuarto evit¨® que se convirtiera en el jugador de la final. Su ausencia fue un golpe an¨ªmico para el equipo durante la primera mitad y gran parte de la segunda, algo que fue bien aprovechado por Joe Burrow y la ofensiva de los Bengals.
Burrow, un chaval de 25 a?os que ha llegado a la Super Bowl en su segunda temporada como profesional, pudo mostrar por qu¨¦ es una de las futuras promesas de la liga. Brill¨® m¨¢s que Matthew Stafford, el quarterback de los Rams, quien regal¨® dos intercepciones en la final (en la temporada regular lanz¨® 41 anotaciones y 17 intercepciones), lo que ayud¨® a su equipo a dilapidar una temprana ventaja de 13-3. Los Bengals anotaron 17 puntos consecutivos. El primer touchdown del equipo de Ohio no fue lanzado por Burrow, sino por Joe Mixon, un receptor, tras una exitosa jugada de enga?o. Esto lo ha convertido en el tercer corredor que lanza un pase de anotaci¨®n en una Super Bowl en 56 a?os de historia.
Von Miller y Aaron Donald, dos grandes defensivos de los Rams, lideraron la vuelta de los locales. El equipo captur¨® siete veces a Burrow, haciendo perder a los Bengals 43 yardas. En uno de esos encontronazos, Burrow sali¨® cojeando del campo. Miller y Donald atraparon, cada uno por separado, al joven mariscal de campo. ¡°Hab¨ªa so?ado esto, Es surreal, simplemente incre¨ªble¡±, dijo Donald en l¨¢grimas a la televisi¨®n estadounidense tras el partido. Antes del arranque, Donald dej¨® caer que si lograban el trofeo este podr¨ªa ser su ¨²ltimo partido antes del retiro. Este muro fren¨® el avance y prepar¨® el terreno para la vuelta de una de las grandes conexiones de la ofensiva de los angelinos: Stafford y el receptor Cooper Kupp, quien marc¨® dos veces.
Con menos de dos minutos por jugar, la experiencia de Stafford, quien lleg¨® a Los ?ngeles desde Detroit este a?o en un enroque de mariscales, pudo aportar frialdad a una compleja ofensiva en la zona de anotaci¨®n que puso a prueba la estrategia del entrenador de los Rams, Sean McVay. Stafford hall¨® finalmente a Kupp, quien ha dado la esperada victoria al equipo local en la primera final que se juega en la ciudad californiana en casi 30 a?os. Kupp, de 28 a?os, ha sido nombrado el jugador m¨¢s valioso del partido. Es el octavo receptor abierto que recibe la distinci¨®n en la historia y el primero desde 2019, cuando la obtuvo Julian Edelman en la victoria de Nueva Inglaterra sobre los Rams. El jugador corona esta noche una grandiosa temporada en la que lider¨® en recepciones, con 143, y recepciones de anotaci¨®n con 16. Tambi¨¦n bati¨® marcas en los juegos rumbo a la final, con 33 recepciones. ¡°No siento que merezca esto¡±, dijo con humildad. Esto debe ser la normalidad en una liga en la que ya no juega Tom Brady.
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