La primavera de Xavi
El t¨¦cnico ha cambiado el humor del Bar?a y recuperado el juego del equipo con la vuelta a las esencias de Cruyff
Xavi lleg¨®, abri¨® la ventana y empez¨® a correr el aire fresco por la Ciudad Deportiva Joan Gamper. Los peque?os detalles ayudan a explicar los grandes cambios en las compa?¨ªas o instituciones dif¨ªciles de gestionar por su dimensi¨®n, a menudo faltas de cintura, como el Barcelona. Ventilar un vestuario tenso y constre?ido era imprescindible para un t¨¦cnico optimista al que se le asocia con una idea de juego y un liderazgo socializado despu¨¦s de un tiempo de egos muy marcados en el Camp Nou. La brisa sopla a favor del entrenador despu¨¦s de que la ¨²ltima tormenta se llevara a Koeman por delante ante la inclemencia de Joan Laporta.
El presidente se ha rendido a Xavi, la figura que encabezaba el organigrama deportivo de la candidatura de V¨ªctor Font en las elecciones de 2021, de la misma manera que en 2008 se entreg¨® a Guardiola, secretario t¨¦cnico que propon¨ªa Llu¨ªs Bassat en 2003. Laporta gan¨® los dos comicios y absorbi¨® a los dos entrenadores sin que nadie protestara porque al fin y al cabo ambos se declaran hijos de Cruyff y no hay nadie que se sienta y declare m¨¢s cruyffista que el presidente del Bar?a. La corriente no para y el ideario se propaga hasta alcanzar territorios emblem¨¢ticos como el Bernab¨¦u, el escenario de resultados indiscutibles: 0-5, 2-6, 0-3 y 0-4.
Los proyectos azulgrana precisan conquistar Madrid para tener la bendici¨®n del Camp Nou. Xavi dispone desde el domingo pasado del certificado de garant¨ªa despu¨¦s de que no necesitara ni siquiera presentarse a los jugadores, tan conocedor de la casa que sabe muy bien por d¨®nde entra el sol, alejado de la toxicidad, mediador en el conflicto, defensor de la convivencia en la selecci¨®n y en el Bar?a, amigo de Casillas y de Guardiola. Ha huido de las comparaciones, sabe orientarse y act¨²a como si no le preocuparan los poderes f¨¢cticos, consciente, por otra parte, de que la vida de un vestuario y por supuesto de un equipo es diferente con o sin Messi.
El protagonismo del 10 aument¨® en la medida que disminu¨ªa el del equipo, cada vez m¨¢s simplificado, como si la idea de la que hoy habla Xavi hubiera pasado entonces de la cabeza de Cruyff a la de Messi. Tal era su poder reverencial que el club presidido por Bartomeu se remit¨ªa al rosarino no solo para resolver el partido m¨¢s dif¨ªcil sino tambi¨¦n para abrir la ventana de la Ciudad Deportiva. As¨ª se explica que Xavi escolarizara futbol¨ªsticamente al equipo despu¨¦s de la salida de Messi. Hab¨ªa que empezar por el abecedario, con el juego de posici¨®n, posesi¨®n y presi¨®n, un regreso al pasado, al 1-2 del 2004 en el Bernab¨¦u con un gol de Xavi.
No extra?a que Ter Stegen, Piqu¨¦, Busquets y Alba se alinearan en el 0-4 de Madrid y formen parte de la primavera alcanzada con la sonrisa de Xavi. Habr¨ªa que a?adir tambi¨¦n a Alves. Los cinco salen en la fotograf¨ªa de Berl¨ªn 2015 que se utilizaba en cada derrota para denunciar el envejecimiento del equipo titular desde la conquista de la ¨²ltima Champions. Los veteranos mezclan bien hoy con los j¨®venes mientras encajan los fichajes de invierno logrados por una secretar¨ªa t¨¦cnica liderada por Mateu Alemany y a la que se ha incorporado un amigo de Xavi que sabe muy bien cu¨¢l es su idea de f¨²tbol: Jordi Cruyff.
Lo que Messi tapaba
Los jugadores m¨¢s emblem¨¢ticos no siempre funcionan como entrenadores en sus clubes de origen, sobre todo cuando coinciden con excompa?eros en el vestuario y se demandan medidas terap¨¦uticas, como se ha visto con Pirlo en la Juve o Lampard en el Chelsea. ¡°Nos va a costar m¨¢s de lo esperado, el trabajo es superior al que pensaba¡±, confes¨® Xavi a empleados del club azulgrana a los pocos d¨ªas de su llegada al Camp Nou procedente de Qatar. ¡°Toca sufrir y mostrar car¨¢cter¡±, a?adi¨®, sorprendido porque el modelo de juego azulgrana se hab¨ªa perdido y las miserias se hab¨ªan tapado con la grandeza de Messi.
El t¨¦cnico, sin embargo, nunca perdi¨® el optimismo, ni siquiera con los contratiempos, algunos serios como la lesi¨®n de Ansu, la no renovaci¨®n de Demb¨¦l¨¦ y la eliminaci¨®n de la Champions en M¨²nich despu¨¦s de empatar a cero con el Benfica. Xavi responde a la adversidad con un semblante jovial, sin dramatismos, rodeado de personas de su confianza, algunos familiares, devotos del Bar?a.
Al entrenador le gusta practicar en los entrenamientos, corregir a los jugadores en sesiones de v¨ªdeo individualizadas, intervenir en los partidos hasta el extremo de abroncar por una p¨¦rdida de bal¨®n a Busquets. Aprovech¨® el par¨®n de enero para montar una pretemporada y mecanizar algunos movimientos; aprender a situarse, organizarse, y a tomar decisiones; imponer ritmo, intensidad y mejorar la circulaci¨®n de pelota; insistir en que para ser eficaz hay que estar concentrado, m¨¢s satisfecho desde que encontr¨® el punto de inflexi¨®n en el partido contra el Atl¨¦tico (4-2), igual que ya le pas¨® a Luis Enrique en 2015 (3-1).
A partir de la cultura del esfuerzo y la buena gesti¨®n de la plantilla, manifiesta con la presencia de Demb¨¦l¨¦, sin reparar en el compromiso de Jutgl¨¤ y Abde ¡ªahora en el filial¡ª, Xavi ha ganado autoridad en el camerino, credibilidad en el banquillo y estima por parte de la hinchada, cada vez m¨¢s militante en el Camp Nou. Incluso los periodistas se sienten bien tratados en la sala de prensa por la pedagog¨ªa de un entrenador que vive el barcelonismo con la intensidad de Laporta. Hoy se viaja en una sola direcci¨®n despu¨¦s de que el equipo haya ganado confianza y seguridad y tambi¨¦n el respeto de los rivales como se vio en Madrid.
Han aumentado los recursos del Barcelona, menos previsible y m¨¢s vertical, obsesionado con encontrar situaciones de superioridad en cada zona del campo para dominar el partido, muy pendiente de atacar bien para defender mejor, un plan que depende de sus centrocampistas, los jugadores que mejor comprenden y procesan el juego, pocos tan l¨²cidos como Pedri. Los medios, capitales en la edad de oro del Barcelona, vuelven a ser decisivos para marcar la identidad del equipo de Xavi. La consigna es ser ambiciosos y ganar cuantos partidos mejor para escalar posiciones en la Liga y disputar la Liga Europa.
Un equipo en construcci¨®n est¨¢ expuesto a los accidentes y por tanto a la derrota, raz¨®n de m¨¢s para que no se hable de t¨ªtulos en el Camp Nou. Aunque su personalidad est¨¢ cada d¨ªa m¨¢s definida, el Bar?a es un equipo imperfecto, a mitad de camino del regreso so?ado, alejado de la Champions. La recuperaci¨®n, sin embargo, se da por conseguida en un tiempo r¨¦cord si se atiende al entusiasmo que se vive en el vestuario donde se cambia el equipo de Xavi. El t¨¦cnico abri¨® la ventana y a los jugadores se les ve felices sin excepci¨®n, ambiciosos, divertidos y part¨ªcipes de un ambiente sano y exigente para alivio del hincha de Camp Nou.
Las zonas comunes vuelven a ser respirables desde que cambi¨® el humor del Bar?a. Xavi tiene una idea y un plan desde la sencillez y el m¨¦todo y la gent blaugrana le sigue, nadie le lleva la contraria, porque saben que los entrenadores son los que marcan tendencia en el Camp Nou. Hoy corre el aire y la primavera florece en el Bar?a.
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