Juanpe L¨®pez, maglia rosa del Giro de Italia: ¡°Si no fuera por la voz ser¨ªa cantaor¡±
La carrera hasta el liderato del Giro del ciclista que se ha ganado el respeto del pelot¨®n y se emociona hablando de su paisano Juan Pe?a, ¡®Lebrijano¡¯
De Juanpe L¨®pez (Lebrija, 31 de julio de 1997) todos hablan maravillas y ¨¦l, cuando se lo dicen, se apresura a echar agua fr¨ªa a los elogios, no sea que ardan y le abrasen, y prefiere el temple que tambi¨¦n busca en el agua del Adri¨¢tico cuando, terminada su hora de bicicleta del d¨ªa de descanso del Giro, llega al mediod¨ªa sudoroso al hotel del equipo junto a la playa, se queda en ba?ador y se lanza al Adri¨¢tico a desacalorarse, y sale chorreando agua, y feliz, y, conversando luego, solo se emociona de verdad cuando le hablan de Juan Pe?a, Lebrijano, cantaor flamenco, y dice, ¡°s¨ª, s¨ª, s¨ª, s¨ª, hombre, hombre, hombre¡±, con su acento sevillano y su voz ronca, y contin¨²a, ¡°como decimos en Lebrija, cuando Lebrijano canta se moja el agua¡±, que es un elogio de Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez que el cantaor convirti¨® en flamenco. ¡°Es mi favorita, la m¨²sica flamenca... Todav¨ªa no, no estoy preparado para cantar. Si no fuera por la voz, ser¨ªa cantaor...¡±
Juanpe no es cantaor, y tiene duende, sino ciclista de rosa en el Giro por la voz y porque ya crecidito empez¨® a salir en bicicleta porque sal¨ªa su padre y porque ¨¦l estaba un ¡°poco gordito¡±. ¡°Pesaba 12 kilos m¨¢s que ahora. Yo era un chico que, como todos, jugaba al f¨²tbol¡±, dice, ¡°y un d¨ªa de verano me puse a hacer rodillo a las cinco de la tarde y me vio mi padre y me dijo, ¡®si quieres, ma?ana te puedes venir conmigo a dar una vuelta en bicicleta¡¡±
De Lebrija, tierra de escasa tradici¨®n ciclista, salt¨® al equipo juvenil de Alberto Contador ¡ª¡±y me cost¨® entrar porque fui al primer campus y no pas¨¦ la selecci¨®n, y tuve que volver al siguiente, y ya pas¨¦¡±, dice¡ª, y de ah¨ª salt¨® al Trek, uno de los mejores equipos del mundo. ¡°Vino porque ten¨ªamos un acuerdo con el equipo de formaci¨®n de Contador, era nuestro filial, y lo primero que me llam¨® la atenci¨®n fue su madurez, y a todos en el equipo, que me dec¨ªan, ¡®acaba de llegar y no tiene ni 21 a?os y parece que lleva toda la vida en esto, tiene mucha m¨¢s experiencia que edad¡±, dice Josu Larrazabal, preparador y director del Trek. ¡°Esa madurez, ese temple, ese saber estar, ese oficio, esa disciplina, todo lo ha vuelto a demostrar este Giro¡±.
Y cuenta Larrazabal que antes del Giro, en la concentraci¨®n del equipo en Sierra Nevada, se le acercaban a Juanpe los compa?eros m¨¢s famosos, y le dec¨ªan, admirados, que le ve¨ªan fort¨ªsimo. ¡°Ciccone, que es nuestro l¨ªder, un escalador que ha sido maillot amarillo en el Tour y ha ganado la etapa del Mortirolo un Giro, le dijo, ¡®no sabes lo que andas, Juanpe, vas a ser la sorpresa del Giro¡¯¡± revela el entrenador, que admite que llegaron con Juanpe como tapado del equipo, conscientes de su capacidad. ¡°Ha tenido la suerte de crecer a la sombra de otros j¨®venes, como Ayuso o Carlos Rodr¨ªguez que han llamado m¨¢s la atenci¨®n¡±.
¡°Pero esos j¨®venes van muy fuertes. Tienen otro punto porque han hecho las cosas mejor desde la escuela de ciclismo. Ciccone, s¨ª, me dijo que yo iba a ganar una etapa y le dijo a mi preparador que lo iba a hacer muy bien. Yo no me cre¨ªa lo que me dec¨ªa, pero a la vista est¨¢ que ha ido bien...¡±, dice Juanpe.
Se dice que las personas crecen, maduran, afrontando desaf¨ªos y super¨¢ndolos. Los hay a los que les llegan sin buscarlos, los hay quienes salen a buscarlos, como quiz¨¢s Juanpe toda su carrera ciclista, dos Vueltas de fugas casi cotidianas y un 13? puesto en la segunda, el verano pasado, y su primer Giro ahora, y ya el cuarto d¨ªa, la primera monta?a, el volc¨¢n Etna, sale a forjarse su destino, lo que ¨¦l, modestamente, llama, ¡°crecer a?o a a?o dando pasitos¡±. ¡°No ten¨ªa en la cabeza la etapa del Etna, pero el equipo me meti¨® la confianza de que pod¨ªa llegar la fuga. Me met¨ª en ella y sali¨® la jugada casi redonda...¡± No gan¨® la etapa, que qued¨® segundo, pero alcanz¨® la maglia rosa, una prenda que, dice, no le cambiar¨¢ la vida. ¡°Claro que no. Tengo que disfrutar de c¨®mo soy, disfrutar de lo que hago. Tengo la suerte de que me gusta la bici, de que me gusta el ciclismo, me gusta correr carreras, pero el d¨ªa que me cueste ponerme un culotte y un maillot ser¨¢ el d¨ªa que lo deje¡±, dice. ¡°Soy el mismo que hace un a?o, que hace un mes, que cuando estaba en Sierra Nevada preparando el Giro. Soy un corredor joven que intento crecer cada a?o y, bueno, esto es algo diferente para m¨ª, pero no me voy a venir arriba. Cuando termine el Giro voy a seguir corriendo carreras igual, con la misma mentalidad que ten¨ªa el a?o pasado, que este a?o, que el a?o que viene, soy ciclista para ganar y todas las carreras son un desaf¨ªo¡±.
Obstinado, como todos los campeones, Juanpe sigue buscando desaf¨ªos en el Giro de su debut similares al del Etna, similares al de defender su maglia rosa el domingo en el Blockhaus despu¨¦s de que su amigo Sam Oomen, el mismo que le invit¨® en Sierra Nevada a una paella con bogavante, le echara de la carretera. Juanpe perdi¨® la rueda de los mejores, lo que dio a su lucha por la maglia una componente ¨¦pica, un hombre solo, maglia abierta, pecho al frente, luchando. ¡°??pica? Al final fue m¨¢s dif¨ªcil para m¨ª porque perd¨ª unos metros en una situaci¨®n dif¨ªcil de carrera, y pegaba mucho aire... Intent¨¦ defenderme manteniendo la cabeza bien fuerte...¡±, desde?a Juanpe el valor de su pelea que, cuenta Larrazabal, le sirvi¨®, sobre todo, para ganarse el respeto del pelot¨®n, porque el de sus compa?eros ya lo tiene, para demostrar que su rosa no es una casualidad. ¡°??pica? No podemos elegir. Cada d¨ªa puede ser una aventura. Una etapa llana puede ser una locura, una etapa de monta?a puede ser tranquila, hay que saber bajar... cuenta todo. Hay que estar a lo que venga¡±.
In¨²til preguntarle a un joven con los pies tan agarrados a la tierra hasta d¨®nde puede llegar, quiere llegar. Juanpe, para quien cada d¨ªa de rosa es un sue?o hecho realidad, se encierra en su carpe diem y no sale, en su disfrutar de cada d¨ªa como disfruta del ba?o en el Adri¨¢tico despu¨¦s de su entrenamiento y su caf¨¦. ¡°Llegar¨¦ hasta donde llegue¡±, resume. ¡°Pero este Giro no s¨¦ si acabar¨¦ entre los tres primeros, entre los cinco primeros, entre los 10 primeros, pero quiero ganar una etapa¡±.
¡±Es un corredor que sigue creciendo. Es pronto para saber hasta d¨®nde puede llegar¡±, dice Larrazabal. ¡°Es un escalador muy competitivo, con cambio de ritmo, que puede ganar grandes etapas de monta?a. Tambi¨¦n recupera muy bien., pero para pensar en la general de las grandes tiene que mejorar en las contrarreloj. Antropom¨¦tricamente [1,70m, 60 kilos] tiene l¨ªmites. No puede tener la potencia absoluta necesaria para ser un gran contrarrelojista¡±.
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