Mart¨ªn Landaluce, un socio para Alcaraz

Mart¨ªn Landaluce (Madrid, 16 a?os) irrumpe en una terraza exterior de la Arthur Ashe e impresiona con su f¨ªsico. No hay trampa ni cart¨®n, dice que le viene de serie. Su coronilla establece el 1,91 de estatura y por su aspecto se podr¨ªa decir que es socio de Casper Ruud o alguno de los vikingos n¨®rdicos que se desempe?an de manera discreta en el circuito, pero no es as¨ª. Ojos azules, pero revuelto y dorado, como las cejas; delgado, brazos y piernas largu¨ªsimas, y tres cadenas al cuello.

¡°Mis padres son espa?oles y el resto de mi familia tambi¨¦n, as¨ª que no s¨¦ de d¨®nde viene esto¡­ El destino, o algo as¨ª¡±, dice la tarde previa a la conquista del US Open en categor¨ªa j¨²nior, despu¨¦s de imponerse en la final (7-6(3), 5-7 y 6-2, en 2h 13m) al belga Gilles Arnaud Bailly, segundo cabeza de serie del torneo y al que ya hab¨ªa derrotado en los octavos de Wimbledon hace un par de meses. ¡°Soy de Tres Olivos, que est¨¢ cerca de Montecarmelo, al lado de la Federaci¨®n, que es donde me entreno. Me queda poco por crecer. Creo que me he estancado, pero estoy bien as¨ª. Es una buena altura¡±, agradece.

El chico departe con mucho desparpajo, despu¨¦s de haberse desenvuelto perfectamente con los periodistas que le interrogaban antes en ingl¨¦s. Cuenta que empez¨® a jugar al tenis ¡°a los tres a?itos¡± porque su familia le inculc¨® la pasi¨®n por la raqueta y que empez¨® a las ¨®rdenes de su padre Alejandro, cuando ensayaba en el Club de Tenis Chamart¨ªn e ingres¨® en la Federaci¨®n. ¡°Empec¨¦ a ir a torneos con 10 a?os y fui cogiendo nivel y haci¨¦ndolo medianamente bien, as¨ª que poco a poco hasta aqu¨ª. Aqu¨ª estoy¡±, se?ala antes de mencionar que hace dos a?os empez¨® a trabajar con el gallego ?scar Burrieza y que est¨¢ acompa?ado en Nueva York por Esteban Carril.

Adem¨¢s de su envergadura f¨ªsica, a Landaluce se le se?ala como el mejor jugador de su generaci¨®n, la de 2006. Los informes sobre el madrile?o ya circulaban entre los bastidores del tenis espa?ol desde que era un cr¨ªo, atentos los t¨¦cnicos y los especialistas a un talento de patr¨®n moderno, diestro y de poderoso rev¨¦s; tambi¨¦n, seguro de s¨ª mismo y con personalidad. ¡°S¨ª, la verdad es que tengo mucha confianza y me gustan los retos. Me gusta enfrentarme a cosas dif¨ªciles¡±, precisa antes de proceder a radiografiarse.

Zverev, sacrificio y la nueva p¨¢gina

¡°Mi estilo es bastante agresivo. Me gusta estar sobre la l¨ªnea y ser yo el que manda y el que dirige el juego. Me gusta jugar r¨¢pido y hacer da?o, resolver en pocos tiros. Desde hace a?os he seguido bastante a Zverev, porque creo que tenemos un molde bastante parecido, y desde que Alcaraz est¨¢ rompi¨¦ndola en todos lados, he estado fij¨¢ndome en ¨¦l; adem¨¢s, es muy buena persona tambi¨¦n, as¨ª que ambos son buenos referentes¡±, se?ala el madrile?o, convertido ya en el tercer espa?ol que gana el j¨²nior en Flushing Meadows tras Javier S¨¢nchez Vicario (1986) y Daniel Rinc¨®n (19), triunfador el curso pasado.

Independientemente del ¨¦xito, Landaluce asoma como un buen compa?ero de viaje para Alcaraz, con el que comparte representaci¨®n ¨Cambos tutelados por la multinacional IMG¨C y con el que ya ha hecho buenas migas. Pese a ser solo tres a?os menor, a?ada de 2003 en el caso del murciano, el madrile?o se inspira en su amigo ¨C¡°hace cosas incre¨ªbles, ojal¨¢ est¨¦ yo tambi¨¦n ah¨ª dentro de cuatro a?os¡±¨C y adelanta que est¨¢ listo para dar un nuevo paso: ¡°Creo que este va a ser de mis ¨²ltimos torneos j¨²nior y ahora voy a meterme un poco en lo pro [profesional], en los futures [la categor¨ªa inicial]. Ir¨¦ jugando y viendo qu¨¦ tal va, y a los 18 decidir¨¦: ser profesional o bien ir a la universidad¡±.

Landaluce tiene dos hermanos, un chico y una chica, que tambi¨¦n juegan al tenis y est¨¢n becados en Estados Unidos: ¡°?l en Georgia y ella en Texas, San Antonio¡±. En lo personal, el chico se describe como ¡°un t¨ªo que disfruta de las peque?as cosas¡± y que acaba de empezar el bachillerato, que piensa terminar en dos a?os v¨ªa telem¨¢tica. Escucha rock, reguet¨®n, tecno, ¡°un poco de todo¡±, y dice ser muy consciente de qu¨¦ supone dedicarse a la raqueta y el peaje que conlleva: ¡°Llevo a?os sacrificando algunas quedadas y cumplea?os. Tengo claro c¨®mo va el tenis y estoy dispuesto a sacrificarme por ello¡±.

Invierte dos o tres horas diarias en la pista, y hora y media en el f¨ªsico, llamativamente desarrollado para un joven de 16. Descansa uno o dos d¨ªas a la semana, ¡°en funci¨®n de c¨®mo tenga el cuerpo¡±, y empieza a dejar rastro con el destello en Corona Park. Este a?o, su ficha revela cinco trofeos en el mundial juvenil sub-18: Valencia, Cap d¡¯Ail (Francia) y Plovdiv (Bulgaria), Roehampton y Nottingham (Inglaterra).

Ahora que el tenis espa?ol pasa definitivamente de p¨¢gina, con el adi¨®s progresivo de varios s¨ªmbolos (Ferrer, Almagro, Robredo¡­) y otros en la rampa de salida (Feliciano, Verdasco¡­), Alcaraz recoge el testigo e invita al madrile?o ¨Cque ha llegado a enlazar 23 triunfos consecutivos esta campa?a¨C a subirse al tren de la ¨¦lite. ¡°A Mart¨ªn lo sigo de cerca, es un chico genial y muy trabajador. He podido entrenar varias veces con ¨¦l y me parece muy bueno. Me alegra saber que soy un ejemplo y que le puedo ayudar de cara a su carrera¡±, comenta el flamante finalista, que le reserva un hueco a Landaluce.

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