¡°En Marruecos no quer¨ªan a la mayor¨ªa de los jugadores de la selecci¨®n¡±

En el f¨²tbol marroqu¨ª, avisa el entrenador Juan Pedro Benali, el Facebook manda mucho. ¡°Si tienes la mala suerte de que tu presidente le hace caso, lo llevas mal¡±, sentencia este buen conocedor de c¨®mo se cuecen las cosas al otro lado del Estrecho. Su vinculaci¨®n con el pa¨ªs norteafricano viene desde la cuna. Naci¨® en el S¨¢hara hace 53 a?os (su padre era militar espa?ol), se crio en Cartagena y en el ¨²ltimo cuarto de siglo ha acumulado una decena de experiencias en esa liga. ¡°Esto ha cambiado mucho, sobre todo, desde hace seis o siete a?os. Han puesto el VAR, todos los campos ya son de hierba natural, la federaci¨®n est¨¢ invirtiendo mucho en academias y han convertido todas las entidades en sociedades an¨®nimas para intentar controlar el problema de las deudas¡±, valora Benali sobre un pa¨ªs que de un d¨ªa para otro se convirti¨® en objeto de estudio para tratar de averiguar c¨®mo, perteneciendo todav¨ªa a la segunda o tercera divisi¨®n, se hab¨ªa colado en las semifinales de un Mundial. Esta semana, el Mundial de Clubes que disputa el Madrid ha vuelto a situar en el mapa dos ciudades, T¨¢nger y Rabat, donde en sus medinas, cada dos pasos, las camisetas de los En-Nesyri, Ziyech o Achraf compiten con las de Ronaldo, Messi y Mbapp¨¦.

Lo que no ha variado, seg¨²n este t¨¦cnico con bagaje tambi¨¦n en Qatar, Emiratos ?rabes, T¨²nez y Jap¨®n, es la enorme cr¨ªtica interna. ¡°Vas al estadio del Raja o Wydad, salvo la grada principal la gente no atiende al partido. Son fan¨¢ticos que saltan y cantan, y luego te machacan. Los entrenadores duran poco. Yo cog¨ª dos veces al Ittihad T¨¢nger, lo salv¨¦ y me dijeron que quer¨ªan traer a otro m¨¢s famoso. Ahora est¨¢n ¨²ltimos y desde julio ya han pasado otros tres¡±, indica Benali.

Una censura de la que no se libraron ni los h¨¦roes de Doha. ¡°Hace cuatro a?os, hubo un debate muy grande porque a los jugadores que no hab¨ªan nacido en Marruecos o se hab¨ªan formado en Europa no se les consideraba marroqu¨ªes. Un sector importante quer¨ªa solo a futbolistas de la Liga. Herv¨¦ Renard y Vahid Halilhodzic [los seleccionadores anteriores a Walid Regragui] tuvieron muchos problemas con esto. En cuanto perd¨ªan un partido, les reclamaban a los de casa. A algunos, incluso, los han seguido criticando mucho durante el Mundial. Pero es que la diferencia es abismal. Tambi¨¦n cargaron contra Walid tras la semifinal. Lo acusaron de cambiar el sistema contra Francia¡±, desvela con sorpresa Juan Pedro Benali.

Pese a la acidez de la afici¨®n con los suyos, los datos dejaron pocas dudas sobre las claves del ¨¦xito catar¨ª: solo tres de los 26 convocados se desempe?aban en la competici¨®n dom¨¦stica y 14 hab¨ªan nacido fuera de Marruecos. Una red de reclutadores distribuida en el viejo continente -especialmente en las grandes plazas de Espa?a, Francia, Pa¨ªses Bajos, B¨¦lgica, Alemania o Italia- e impulsada por Nasser Larguet lleva a?os peinando cada rinc¨®n para tener fichado a cualquier joven con or¨ªgenes marroqu¨ªes susceptible de jugar en la selecci¨®n.

Sergio Piernas (Barcelona, 46 a?os), entrenador de la sub-17 entre enero 2020 y abril 2021, hizo acopio de esos listados. ¡°En mi base de datos hab¨ªa m¨¢s de 200 futbolistas de esa edad que estaban en Europa, a los que llevamos a nuestras instalaciones para verlos en directo. Tambi¨¦n habl¨¢bamos con los clubes. Algunos pon¨ªan barreras porque hac¨ªan ver a los chavales que irse con Marruecos y no con la selecci¨®n de ese pa¨ªs les pod¨ªa perjudicar¡±, comenta el hoy t¨¦cnico asistente en la selecci¨®n ol¨ªmpica de Arabia Saud¨ª. ¡°Y luego estaban los que ya hab¨ªan debutado con otras selecciones. Eran 21. Los llam¨¦ uno por uno y a la mitad los visit¨¦ personalmente para contarles el proyecto porque la idea era que subieran a la absoluta. De hecho, uno de ellos, Bilal El Khannous [del Genk belga], fue al Mundial y jug¨® el tercer y cuarto puesto¡±, ampl¨ªa Piernas, que asegura que lleg¨® a encontrarse jugadores con hasta cuatro nacionalidades.

La red de reclutadores

El semillero europeo les ha dado el gran salto gracias a esa tela de ara?a de scouting, pero en sus fronteras el impulso de las academias de f¨²tbol base tambi¨¦n ha representado un avance. En la m¨¢s importante, la Mohamed VI, controlada directamente por el rey, se cocinaron los mundialistas En-Nesyri, Aguerd, Ounahi y Tagnaouti. Los tres primeros, claves en los planes de Regragui. All¨ª trabaj¨® Xavi Bernal (Wuppertal, Alemania; 55 a?os) como responsable de la formaci¨®n y post formaci¨®n de este centro que acuna a casi 100 j¨®venes.

¡°El centro recluta a los mejores del pa¨ªs y otros clubes fuertes han debido espabilar para ser competitivos ante la academia. De todas formas, los que salen todav¨ªa necesitan dos o tres a?os m¨¢s para continuar su evoluci¨®n porque el contexto de Marruecos no les da para el alto nivel. El f¨²tbol es muy r¨¢pido en Europa y ellos no tienen esa velocidad¡±, argumenta Bernal, que pone como ejemplo a Ounahi, del que Luis Enrique mostr¨® p¨²blicamente su sorpresa. ¡°Cuando acab¨® en la academia, lo metimos en el Estrasburgo y a los dos a?os lo descartaron porque no les gustaba. As¨ª que regres¨® y no sab¨ªamos qu¨¦ hacer con ¨¦l hasta que le conseguimos un equipo de la Nacional de Francia [tercera categor¨ªa], el Avranches. Ah¨ª jug¨® bien y el Angers [de la Ligue 1] se fij¨® en ¨¦l¡±, detalla el t¨¦cnico, hoy en Senegal. ¡°Europa tiene m¨¢s culpa de lo que hizo Marruecos en el Mundial que Marruecos¡±, sentencia Bernal.

Un f¨²tbol con dos mundos muy marcados: una Liga con signos de mejora pero que atrae m¨¢s a jugadores africanos que europeos y donde los mayores presupuestos solo rondan los 10-12 millones de euros; frente a una selecci¨®n que dio el gran golpe en el Mundial. ¡°La gente hac¨ªa el viaje de ida y vuelta en el d¨ªa solo para el partido. El billete costaba 500 euros y la federaci¨®n regal¨® muchas entradas. Se montaron unos follones en el aeropuerto tremendos¡±, cierra Juan Pedro Benali. De regreso a casa, en su torneo dom¨¦stico, la historia es otra.

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