Las mujeres ganan peso en el Dakar, aunque siguen siendo minor¨ªa: ¡°Parece que apoyar el deporte femenino es una moda¡±

El Rally Dakar siempre ha presumido de ser uno de los deportes m¨¢s inclusivos, aunque las mujeres hayan sido a lo largo de su historia clara minor¨ªa. Tan solo en tres ediciones no ha habido ninguna mujer entre los participantes (1995, 2003 y 2004), y ya en 1979, cuando arranc¨® la leyenda del Par¨ªs-Dakar, siete mujeres tomaron la salida, todas en moto. 45 a?os m¨¢s tarde, han sido 46 pilotos y copilotos las que han participado en esta edici¨®n en Arabia Saud¨ª, confirmando una tendencia al alza con un ¨²nico pero: nueve de cada 10 miembros del vivac siguen siendo hombres. Y con una novedad: ahora hay mujeres piloto de nacionalidad saudita, algo impensable poco antes de acoger la prueba. Son dos: Danial Akeel y Maha Hamali, que compiten en coche. Hasta 2018, ten¨ªan prohibido conducir en el circuito y en la calle. ¡°Estamos abriendo camino a las chicas en Arabia Saud¨ª¡±, asegura Laia Sanz.

¡°Ha habido una evoluci¨®n positiva. Cuando yo empec¨¦ aqu¨ª era el bicho raro, y todo ello a pesar de que antes hubo otras mujeres que lo hab¨ªan hecho bien, pero entonces ¨¦ramos la excepci¨®n¡±, apunta Sanz, que participa en su 14? Dakar con el equipo Astara. ¡°Ahora se vive con mayor naturalidad y normalidad. Recuerdo que ¨¦ramos siete cuando empezaba, y ahora casi 50. Y no solo pilotos. Ves dentro de los equipos a muchas mujeres, antes eran todos t¨ªos¡±, destaca la 20 veces campeona del mundo en trial y enduro, uno de los grandes referentes femeninos de la carrera. Despu¨¦s de lograr un noveno puesto hist¨®rico en motos en 2015, en 2022 se pas¨® a las cuatro ruedas y sigue sin encontrar hueco en uno de los equipos competitivos.

¡°Mi sue?o no es ganar el Dakar, es tener las herramientas para poder luchar por hacerlo en igualdad de condiciones¡±, explica la campeona del mundo. Para las mujeres participantes en la carrera, cu¨¢ntas sean no es lo m¨¢s importante. ¡°Lo que realmente es crucial es que nos den m¨¢s oportunidades o que las posibilidades de estar en la m¨¢xima categor¨ªa sean mayores¡±, dice la piloto Cristina Guti¨¦rrez. En 2025 se convertir¨¢ en la segunda mujer que logra un volante en la categor¨ªa reina de la mano de Dacia. La primera fue Jutta Kleinschmidt, la ¨²nica en ganar la prueba en toda la historia, en 2001 con Mitsubishi. ¡°Si soy la segunda es porque faltan mujeres. Hemos roto varios techos de cristal, pero para m¨ª quiere decir que simplemente faltaban¡±, reivindica Guti¨¦rrez.

Falta de ayudas y de igualdad de oportunidades. Especialmente por parte de los patrocinadores y las marcas. Estos son dos de los motivos principales por los que no hay m¨¢s mujeres compitiendo en el Rally Dakar. ¡°Es lo que nos da de comer y es lo que m¨¢s falta¡±, dice la piloto de motos Sandra G¨®mez, pionera en hard enduro -la competici¨®n m¨¢s extrema del off road- y con dos participaciones en el Dakar (2022 y 2023). ¡°Nos faltan ayudas que si fu¨¦semos un hombre con el resultado equivalente las hubi¨¦semos tenido. Quedan a?os para que llegue a otros deportes el cambio que ha llegado al f¨²tbol con el femenino¡±, a?ade. Sin ella, este a?o no hay ni una sola espa?ola compitiendo en la categor¨ªa de motos (con solo dos participantes este 2024), algo que no pasaba desde 2010. ¡°Las mujeres tienen m¨¢s dificultades, es cierto, pero el hecho de que vaya a haber muchos coches punteros libres en un futuro no muy lejano abrir¨¢ m¨¢s oportunidades¡±, augura Carlos Sainz sobre la situaci¨®n en las cuatro ruedas. Aun as¨ª, Laia Sanz siente que ¡°a veces parece que apoyar el deporte femenino es una moda y se hace por querer tener buena imagen¡±.

¡°El Dakar es una gran competici¨®n para que el talento femenino brille, porque es la m¨¢s vista del mundo. Pero por mucho que corras, si no te dan visibilidad, es como si no lo hicieses¡±, reivindica G¨®mez. La falta de visibilidad es otro de los h¨¢ndicaps de la mujer en el mundo del motor. Un proceso que quiso acelerar Merc¨¨ Mart¨ª, que en 2022 lider¨® el primer equipo ¨ªntegramente femenino de la historia del Dakar. ¡°Tuvimos que hacer algo innovador para conseguir m¨¢s financiaci¨®n. Adem¨¢s, hicimos que otras chicas viesen que si alguna de nosotras lo hab¨ªa hecho, ellas tambi¨¦n pod¨ªan¡±, cuenta la barcelonesa, que compet¨ªa con un SSV de Yamaha X Raid.

La carrera del desierto es una de las competiciones m¨¢s inclusivas, sin distinciones de g¨¦nero en clasificaciones, veh¨ªculos o recorridos. Pese a ello, Rosa Romero, copiloto de Pedro Pe?ate en SSV a?ade otra barrera para las mujeres, en concreto las navegantes. ¡°La mayor¨ªa de pilotos quieren un perfil masculino, mec¨¢nico, con fuerza, para que cuando haya un problema se baje a reparar m¨¢s all¨¢ de las meras tareas de navegaci¨®n. Yo tengo suerte con Pedro, que valora mucho mi perfil y cuando pinchamos, bajamos los dos. Cuando rompemos, bajamos los dos. Su papel no es el de piloto que le endosa los problemas al copiloto. Todo lo compartimos, y esto es bonito y me hace sentir muy valorada¡±, cuenta.

¡°Siempre se puede empujar algo m¨¢s y categor¨ªas como los veh¨ªculos ligeros son muy buena opci¨®n de entrada a este mundillo¡±, asegura el director del Dakar, David Castera. Pese a ello, las pilotos sienten que deben demostrar constantemente su val¨ªa. ¡°Siempre tenemos que demostrar m¨¢s, pero en el mundo de las motos es todav¨ªa m¨¢s evidente. Yo he tenido la sensaci¨®n de entrar en un equipo y que los t¨¦cnicos te miraran un poco extra?o. Siento que me he tenido que ganar ese respeto, que quiz¨¢ un hombre lo tiene directamente¡±, dice Sanz, la l¨ªder del Astara.

Laia Sanz, Sandra G¨®mez, Cristina Guti¨¦rrez, Rosa Romero o Merc¨¨ Mart¨ª, entre muchas otras, han tenido que ser m¨¢s que pilotos. Ir mucho m¨¢s all¨¢ que dar gas y competir. Como pasa en otros deportes, las mujeres se han visto obligadas a asumir papeles en la lucha por la igualdad. En el caso de Sanz, la catalana ha cargado ¨Cy lo hace todav¨ªa¨C con el peso de ser el referente de todas las mujeres que quieren dedicarse al motociclismo y, ahora, al automovilismo. ¡°S¨ª, me siento as¨ª, pero estoy muy orgullosa de todo lo que he conseguido yo, porque ahora lo tienen un poco m¨¢s f¨¢cil mis compa?eras que vienen detr¨¢s. Muchas cosas por las que yo pas¨¦, ahora ya no las tienen que pasar¡±, reconoce la de Corbera de Llobregat.

¡°Se trata de que las chicas que decidan acceder al deporte de motor no encuentren barreras y no sientan miedo al hacerlo¡±, dice Guti¨¦rrez. ¡°Cuando yo quise entrar al mundo del karting con nueve a?os, no es que nadie me dijera si pod¨ªa hacerlo o no, es que al no haber otras chicas, referentes fuertes, nadie me incitaba a seguir para adelante¡±, a?ade la burgalesa recordando sus inicios.

Consciente de su papel en la lucha por los derechos de la mujer, Guti¨¦rrez asegura que ¡°es muy dif¨ªcil luchar contra generaciones y generaciones de machismo¡±. ¡°Es importante corregirlo, pero sobre todo focalizar el esfuerzo en la educaci¨®n. En unos a?os dejar¨¢ de ser noticia que una mujer est¨¦ ganando o compitiendo¡±, a?ade la piloto de la categor¨ªa Challenger T3. Ella pone el foco en la educaci¨®n como clave para el avance. ¡°Es un tema social, cultural, pero conf¨ªo en que vamos bien. Entre las nuevas generaciones cada vez hay m¨¢s chicas. Ahora, cuando voy a ver una carrera de ni?os de trial o de enduro, cada vez hay m¨¢s ni?as peque?as¡±, cuenta Sanz. Avanzar. Con buena letra, aunque sea poco a poco y con mucho camino por recorrer. La creciente presencia femenina en el Rally Dakar es un buen ejemplo de ello.

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