¡°Parece que Djokovic sea Darth Vader, no merece un trato as¨ª¡±

Chasco este mi¨¦rcoles en Wimbledon, donde hab¨ªa mucha expectaci¨®n por comprobar por d¨®nde pod¨ªa salir Novak Djokovic en el segundo turno de la central, por d¨®nde ir¨ªan los tiros tras el episodio vivido hace dos d¨ªas, cuando serbio, de 37 a?os, reproch¨® a la grada su comportamiento durante el partido contra el dan¨¦s Holger Rune; el ya hist¨®rico Gooooooood night! (buenas noches) que repiti¨® hasta en tres ocasiones. Sin embargo, habr¨¢ que esperar hasta el viernes, fecha de la semifinal masculina, para conocer la reacci¨®n, dado que el rival con el que iba a medirse en los cuartos, el australiano Alex de Mi?aur, no podr¨¢ saltar a la pista debido a un problema de cadera.

¡°Not¨¦ un crack durante los tres ¨²ltimos puntos del partido contra Fils, y las pruebas me han confirmado que puede ser peor si juego¡±, precis¨® el oce¨¢nico. Djokovic, pues, ya ha conseguido llegar muy lejos en un torneo que parec¨ªa extremadamente complicado que pudiera jugar. El 5 de junio, el balc¨¢nico fue intervenido de un desgarro en el menisco de la rodilla derecha que se produjo durante su participaci¨®n en Roland Garros ¡ªtuvo que renunciar a competir en los cuartos de final¡ª y, a partir de ah¨ª, inici¨® una contrarreloj que le condujo hacia el grande brit¨¢nico contra todo pron¨®stico. Pisa ahora las semifinales, las decimoterceras en Londres, de modo que iguala el r¨¦cord del suizo Roger Federer.

En cualquier caso, su relaci¨®n con el p¨²blico local no pasa por el mejor momento. Muy particular el v¨ªnculo. Con siete t¨ªtulos, est¨¢ a solo una de las ocho sinfon¨ªas que compuso el de Basilea, pero algo no termina de encajar, de cuadrar. Idas y venidas, tensiones. ?Amor? S¨ª pero no. Tiene grabado a fuego el tenista en la memoria el episodio de 2019, cuando los aficionados de La Catedral animaron sin cesar a Federer en la final, que el de Belgrado finalmente conquist¨® tras salvar dos bolas de partido. Todo lo ha hecho Nole: ingerir hebras de c¨¦sped, gritar a los cuatro vientos su predilecci¨®n por el blanco y el verde, por la historia y la tradici¨®n. ¡°Si me hice tenista es por Wimbledon¡±, dice. Sin embargo, contin¨²a el tira y afloja.

Y no termina de comprenderlo uno de los personajes m¨¢s ic¨®nicos de este deporte. John McEnroe, protagonista de sonados episodios como el c¨¦lebre ¡°You cannot be serious!¡± dirigido al ¨¢rbitro Edward James en la edici¨®n de 1981, considera que el trato dispensado a Djokovic no es justo. ¡°?Qu¨¦ ha hecho que sea tan malo? ?Es por lo que quiere? ?Por el hecho de que haya competido m¨¢s duro de lo que lo haya hecho nadie nunca? ?Por el aspecto que tiene o por el hecho de venir de d¨®nde viene?¡±, se pregunta el estadounidense (65 a?os) en unas declaraciones recogidas por la BBC. Y ante la reacci¨®n del jugador el lunes, lo tiene claro: ¡°Bien hecho, bien hecho¡±.

La alternativa de Henman: el silencio

Djokovic es el tenista masculino m¨¢s laureado de todos los tiempos, con 24 grandes, y posee pr¨¢cticamente todas las plusmarcas de su deporte. Nadie ha sido el n¨²mero durante m¨¢s tiempo, 428 semanas. Y tiene el cara a cara con Federer (27-23) y Rafael Nadal (30-29) a su favor. No obstante, su relaci¨®n afectiva con los grader¨ªos siempre ha dado mucho de s¨ª y Londres, la distinguida La Catedral de la raqueta, no es una excepci¨®n. Por una u otra raz¨®n, tambi¨¦n hay chispazos de vez en cuando, por m¨¢s que los ingleses, buen paladar ten¨ªstico ellos, reconozcan la trascendencia del serbio. McEnroe, en cualquier caso, no termina de entender el desafecto y le viene a la cabeza uno de los personajes de La Guerra de las Galaxias. Tira de iron¨ªa.

¡°Parece que sea Darth Vader, en comparaci¨®n con dos de los tenistas con m¨¢s clase que hemos visto, Nadal y Federer. ?Qui¨¦n puede compararse con ellos en cuanto a lo que han aportado? Nadie. Y luego llega este Djokovic nos estropea la fiesta¡­¡±, afirma. ¡°As¨ª que, ?qu¨¦ tal si le respetamos despu¨¦s de todo esto? Es con diferencia el tipo que peor lo ha pasado y por eso dir¨ªa que es el m¨¢s grande que ha jugado nunca. Debemos respetar su grandeza, lleva 20 a?os dej¨¢ndose la piel por el tenis, pero tuvo el descaro de irrumpir en la fiesta de Rafa y Roger. Estamos hablando de un tipo que pas¨® por el quir¨®fano hace un mes y que ha hecho un milagro para competir aqu¨ª. No merece este trato. Admiro su coraje por haber denunciado la situaci¨®n¡±, prolonga el norteamericano.

El brit¨¢nico Tin Henman, analista de la BBC, se une al elogio y plantea una alternativa a sus paisanos. ¡°Me encantan esa pasi¨®n, ese hambre y esas ganas que tiene todav¨ªa de ganar, a los 37 a?os y despu¨¦s de todo lo que ha conseguido¡±, apunta antes de matizar. ¡°Le encanta la confrontaci¨®n, ese tipo de energ¨ªa. As¨ª juega mejor. Destruy¨® a Rune. Creo que si quieres alterar su rendimiento, lo mejor que puedes hacer es quedarte callado¡±, se extiende el ingl¨¦s, cuatro veces semifinalista en el major londinense y en su d¨ªa (2002) cuarto mejor jugador del mundo. ¡°Federer es el que m¨¢s ha triunfado aqu¨ª, pero deber¨ªan tener m¨¢s respeto por un campe¨®n como ¨¦l¡±, considera el alem¨¢n Boris Becker, que le dirigi¨® entre 2014 y 2016.

Entretanto, Djokovic ya ha desembarcado en la pen¨²ltima ronda del torneo, a la que llegar¨¢ fresco al no tener que medirse con De Mi?aur. El n¨²mero dos, verdugo de Kopriva, Fearnley, Popyrin y Rune en las estaciones previas, se topar¨¢ con el italiano Lorenzo Musetti (3-6, 7-6(5), 6-2, 3-6 y 6-1 a Taylor Fritz) y todo el mundo estar¨¢ pendiente de c¨®mo puede reaccionar ¨¦l, as¨ª como del trato que le dispensar¨¢ la central tras lo acontecido al cierre del lunes. En todo caso, Nole, el mismo que apareci¨® en la pista de Par¨ªs-Bercy en 2012 cubierto por una m¨¢scara de Darth Vader, vuelve a la recta final del torneo y The Independent advierte a la masa inglesa: ¡°Wimbledon, cuidado: acabas de enfadar a Novak Djokovic con tus c¨¢nticos a Holger Rune¡±. Londres y ¨¦l, una extra?a relaci¨®n.

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