La pesca, tema prioritario en las negociaciones con la CEE

El litigio pesquero entre Espa?a y el Mercado Com¨²n tiene prioridad absoluta, en el contexto de relaciones hispano-comunitarias, seg¨²n Raimundo Bassols, embajador de Espa?a ante las Comunidades Europeas. Sin embargo, adem¨¢s de la pesca, se esperan problemas serios para el sector sider¨²rgico y, naturalmente, para la larga y compleja adaptaci¨®n del acuerdo.

La Administraci¨®n espa?ola descubre ahora -o admite, m¨¢s bien- el factor pol¨ªtico de las relaciones con Europa. Reconoce que la b¨²squeda de soluciones hay que combinarla con la demanda de adhesi¨®n. Para lograrla, hay que ser pa¨ªs europeo y contar con instituciones democr¨¢ticas. Somos los primeros, desde siempre, pero nos falta todav¨ªa lo segundo.As¨ª pues, a la espera del milagro democr¨¢tico que permita ir al fondo del asunto, la adhesi¨®n, Bassols tiene ¨®rdenes del Gobierno de Adolfo Su¨¢rez de capear el temporal, en lo pesquero, y evitar mayores males en lo sider¨²rgico y la adaptaci¨®n del acuerdo comercial preferente de 1970.

A su vuelta de Madrid, el embajador Bassols ha multiplicado sus contactos en medios comunitarios. Estos han tomado nota de las l¨®gicas preocupaciones espa?olas, seg¨²n fuentes comunitarias.

Pesca: Madrid no ve claro el reglamento

Madrid quiere precisiones sobre tres puntos concretos del nuevo reglamento pesquero, impuesto por la CEE como consecuencia de la extensi¨®n de sus aguas de pesca a doscientas millas:

?Las licencias para 124 barcos espa?oles son o no rotativas? Si pueden aplicarse simult¨¢neamente, el n¨²mero podr¨ªa multiplicarse por un coeficiente de dos o tres, obteniendo derechos para unos trescientos barcos a la vez.

?Cu¨¢les son los criterios exactos de tonelaje y potencias de los barcos? La CEE habla de barcos de mil toneladas, cuando Espa?a pesca en aguas comunitarias con barcos de cien, doscientas o trescientas toneladas, como m¨¢ximo.

?Las licencias son para pesca de altura o pesca de bajura? Si son s¨®lo para pesca de altura, podr¨ªan dejar mayor margen para barcos peque?os.

Los comunitarios prometen dar una r¨¢pida respuesta a las dudas espa?olas sobre el contenido exacto del reglamento de pesca. Existe la impresi¨®n de que nadie quiere romper la baraja.

Se tiene en cuenta, en Bruselas, la inquietud justa de los pesqueros brit¨¢nicos. S¨¦ hacen eco de la carta del ministro espa?ol de Asuntos Exteriores a sus colegas de la CEE.

No ocultan, por otra parte, que los pesqueros espa?oles no cumplieron los cupos previstos por la CEE, durante el primer trimestre, lo que aceler¨® la necesidad de licencias obligatorias, dicen en la Comisi¨®n Europea. Sensibilidad, pues, ante los pesqueros espa?oles, en tanto que futuros socios pero sin olvidar las necesidades inmediatas de los pescadores del actual club de los nueve de la CEE.

Adaptaci¨®n del acuerdo: silencio sobre la contraoferta

Siempre en el calendario de negociaciones, se espera que el 5 ¨® 6 de mayo comunitarios y espa?oles hablen de la propuesta CEE de adaptar el acuerdo de 1970 a la realidad actual de la Comunidad de los nueve. Espa?a despu¨¦s de muchas piruetas diplom¨¢ticas, dice ahora que la oferta en dos etapas no es base suficiente de negociaci¨®n. Espa?a presentar¨¢ contrapartidas.

?No puedo adelantar nada sobre la contraoferta espa?ola?, declar¨® el embajador Bassols. ?La opini¨®n p¨²blica espa?ola sigue siendo menor de edad en materia de relaciones con la CEE?

Al parecer, Madrid quiere ganar tiempo. L¨®gico y natural. Quiere quemar la etapa electoral (?qui¨¦n dec¨ªa que el asunto Espa?a/CEE no era un tema pol¨ªtico?) y formular toda su t¨¢ctica ofensiva ante la CEE, bajo la ¨®ptica de la adhesi¨®n.

Acero: ?contingentes o licencias?

Se?alemos, por ¨²ltimo, que Raimundo Bassols se entrevist¨® con Etienne Davignon, miembro de la Comisi¨®n Europea responsable del plan sider¨²rgico que debe remediar la crisis del sector en el interior de la CEE. Se avecinan nuevas negociaciones para insistir en la autolimitaci¨®n (para no hablar todav¨ªa de cupos o licencias) de las ventas de acero espa?ol a la CEE.

El punto clave en lo sider¨²rgico ser¨ªa m¨¢s de precios que de cantidades, opinan expertos comunitarios.

En lo sider¨²rgico, como en lo pesquero, los espa?oles tampoco podemos esperar que nuestros padrinos franceses nos echen una mano. Sobre todo si Raymond Barre se ve obligado a aplicar restricciones ala importaci¨®n, para salvar la crisis francesa que amenaza a 30.000 trabajadores.

Ahora que incluso la Administraci¨®n parece ver el final del t¨²nel hispano-comunitario con el despeje de la inc¨®gnita pol¨ªtica, Raimundo Bassols se esfuerza en Bruselas en limitar los da?os, a la espera de tiempos mejores. Trabajo no le falta.