La ministra sueca de Exteriores se entrevistar¨¢ con la Oposici¨®n
La ministra sueca de Asuntos Exteriores, Karin Soder, que visitar¨¢ Espa?a los pr¨®ximos d¨ªas 24 y 25, ha declarado que su viaje oficial no ser¨¢ al Gobierno ni al partido de Adolfo Su¨¢rez, sino al pa¨ªs, cuyo actual proceso de democratizaci¨®n es apoyado por el pueblo sueco. Contestando a una pregunta de EL PAIS sobre la posible capitalizaci¨®n por parte del partido gubernamental de la primera visita oficial a Espa?a de un miembro del Gobierno sueco desde hace casi cincuenta a?os, la se?ora Soder anunci¨® que durante su estancia en Espa?a tiene el prop¨®sito de entrevistarse -adem¨¢s de con su colega de Asuntos Exteriores, con el presidente del Gobierno y con el Rey- con los principales l¨ªderes de la Oposici¨®n parlamentaria.Pocas horas despu¨¦s de producirse esta declaraci¨®n, que sal¨ªa al paso de las supuestas cr¨ªticas de los socialistas y comunistas espa?oles al viaje de la se?ora Soder, recogidas por el prestigioso matutino liberal Dagens Nyheter, el jefe de la Oposici¨®n y l¨ªder del Partido Socialdem¨®crata sueco, Olof Palme, nos aseguraba, por su parte, que en los planes iniciales de la visita de la ministra no figuraba el encuentro con los l¨ªderes de la Oposici¨®n. Precisamente, el peri¨®dico citado anunci¨® ayer que la ministra sueca invitar¨¢ oficialmente al Rey para que visite Suecia.
Durante la entrevista concedida al enviado especial de EL PAIS y a los otros tres periodistas espa?oles invitados a Estocolmo por el Gobierno sueco, la se?ora Soder asegur¨® que el contacto con l¨ªderes de la Oposici¨®n parlamentaria espa?ola figuraba en la propuesta sueca para la confecci¨®n del programa de su visita, que todav¨ªa no hab¨ªa sido ultimado en Madrid, si bien pod¨ªan darse por seguras sus entrevistas con el ministro de Asuntos Exteriores, Marcelino Oreja; con el presidente del Gobierno, Adolfo Su¨¢rez, y con el rey don Juan Carlos, as¨ª como con los l¨ªderes m¨¢s importantes de los partidos parlamentarios de la Oposici¨®n, especialmente el socialista Felipe Gonz¨¢lez y el comunista Santiago Carrillo. La se?ora Soder mostr¨® su sorpresa por lo publicado en el Dagens Nygeter, que, seg¨²n las informaciones en poder de la ministra, carec¨ªa de base real y contradec¨ªa la actitud de los socialdem¨®cratas, que no han criticado oficialmente, en ning¨²n momento, su viaje a Espa?a.
Sobre la oportunidad de su visita, antes de que haya sido aprobada la Constituci¨®n democr¨¢tica espa?ola, la ministra sueca de Asuntos Exteriores afirm¨® que la democratizaci¨®n de un pa¨ªs ?nunca est¨¢ terminada? y que incluso Suecia ?a¨²n se encuentra en proceso de democratizaci¨®n ?. A?adi¨® que todos los pa¨ªses representados en el Consejo de Europa han votado favorablemente el ingreso de Espa?a en el mismo, por lo que puede considerarse que nuestro pa¨ªs ha entrado ya en el ?c¨ªrculo de la democracia?.
Olof Palme, "fascinado" por Espa?a
En la conversaci¨®n mantenida poco despu¨¦s con Olof Palme, el l¨ªder de la Oposici¨®n sueca -quien se mostr¨® optimista cara a las elecciones de 1979, que pueden convertirle de nuevo en primer ministro- se?al¨® que la ministra de Asuntos Exteriores suele hacer en cada discurso alusi¨®n a su prop¨®sito de continuar desde el Gobierno burgu¨¦s la pol¨ªtica socialdem¨®crata. ?Si ella lo dice, hay que creerla?, coment¨® el se?or Palme.Olof Palme eludi¨® comprometerse en una opini¨®n sobre la actitud del PSOE, contraria a la forma mon¨¢rquica de Gobierno que figura en el proyecto de Constituci¨®n, y tendi¨® a quitar hierro al tema, recordando que en el programa de su partido tambi¨¦n se defiende la forma republicana. ?En Suecia hemos logrado reducir mucho el poder personal del rey, pero algunos -dijo- quieren ir m¨¢s all¨¢. La verdad es que resulta muy duro que un cargo sea heredado. Pero hay problemas m¨¢s importantes.?
El se?or Palme calific¨® el proceso democr¨¢tico espa?ol como fascinante, y lo defini¨® como ?la desintegraci¨®n pac¨ªfica de una dictadura ?. Expres¨® su confianza en el proceso democratizador iniciado en Espa?a, pero record¨® que todav¨ªa se trata de una democracia fr¨¢gil, debido a que parte de las estructuras de la situaci¨®n anterior se mantienen, as¨ª como a los problemas econ¨®micos, ?muy dif¨ªciles?, con que se enfrenta nuestro pa¨ªs. Ante la hip¨®tesis que le fue planteada de si un Gobierno socialdem¨®crata enviar¨ªa en estos momentos a Espa?a a su ministro de Asuntos Exteriores, el se?or Palme contest¨®, sonriente: ?Lo discutir¨ªa con Felipe.?
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