Convocadas oficialmente las elecciones generales
Hoy entra en vigor el decreto de convocatoria de las elecciones legislativas, que fue publicado ayer por el Bolet¨ªn Oficial del Estado. La norma legal resuelve tres temas: la disoluci¨®n de las actuales Cortes, la convocatoria electoral para el Congreso y el Senado, y la especificaci¨®n de que el n¨²mero de esca?os a cubrir ser¨¢ el mismo que en los comicios del 15 de junio de 1977. A¨²n no han sido oficialmente convocadas las elecciones municipales, aunque el presidente Su¨¢rez haya adelantado la fecha (3 de abril).
Con la publicaci¨®n del decreto se pone en marcha un calendario preciso de plazos, que comienza el pr¨®ximo lunes, d¨ªa 9, con la fecha l¨ªmite para que presenten su dimisi¨®n las personas que ocupen cargos afectados por incompatibilidad, y termina el 1 de marzo (jueves), en que se celebrar¨¢ simult¨¢neamente la consulta para el Congreso y el Senado.De esta manera, Espa?a entra de lleno en un a?o electoral, o por lo menos en un primer cuatrimestre caracterizado por la concentraci¨®n de toda la actividad pol¨ªtica en la doble convocatoria electoral. C¨¢lculos oficiosos estiman ya en m¨¢s de 7.000 millones de pesetas el presupuesto necesario para hacer frente a ambas elecciones en el supuesto de presentaci¨®n en todas las circunscripciones, mientras la situaci¨®n econ¨®mica de casi todos los partidos en la actualidad no parece demasiado brillante.
Por otra parte, fuentes oficiosas aventuran un cambio del sentido de la campa?a electoral, dado su car¨¢cter de ?campa?a de invierno?: menos grandes m¨ªtines en lugares abiertos y m¨¢s actos en lugares cerrados, junto con la utilizaci¨®n masiva de los medios de comunicaci¨®n social y, desde luego, de la televisi¨®n, con probables planteamientos en el sentido de organizar grandes debates entre las principales figuras pol¨ªticas. No obstante, la orientaci¨®n de la campa?a est¨¢ a¨²n sin delinear en los principales partidos, y en concreto el PSOE comienza esta tarde ese trabajo, mientras UCD lo hace ma?ana.
Los comicios de este a?o se convocan con una Constituci¨®n ya promulgada, un sistema pol¨ªtico en v¨ªas de normalizaci¨®n y una transici¨®n pr¨¢cticamente hecha; tambi¨¦n se convocan en medio de las consecuencias de la crisis econ¨®mica y con un ej¨¦rcito de parados muy importante en cuanto a su amplitud.
Al mismo tiempo tienen derecho a voto los comprendidos entre los dieciocho y veinti¨²n a?os. Estas condiciones no se parecen a las de las anteriores elecciones generales, realizadas en medio de una situaci¨®n de provisionalidad, sin experiencia electoral alguna, con algunos partidos todav¨ªa ilegales -el PCE hab¨ªa alcanzado la legalidad s¨®lo unas semanas antes-; en cuanto a la crisis econ¨®mica y la situaci¨®n del Pa¨ªs Vasco, el estado de cosas no ha variado sustancialmente, aunque el desgaste en ambos casos sea un factor negativo para el sistema democr¨¢tico, que lleva a?o y medio soportando las circunstancias adversas de ambas situaciones.
Inc¨®gnitas a despejar
Las elecciones generales tienden, ante todo, a posibilitar la formaci¨®n de un Gobierno con mayor¨ªa parlamentaria estable. El electorado ha de decidir si refuerza lo suficiente al partido centrista para continuar en solitario al frente de la gobernaci¨®n del pa¨ªs; si la tarea debe ser confiada al centro-izquierda, en caso de que PSOE y UCD queden bastante igualados; y tampoco debe descartarse radicalmente un Gobierno de orientaci¨®n centro-derecha.
Importa tambi¨¦n conocer la relaci¨®n de fuerzas PSOE/PCE, de manera m¨¢s definitiva que el 15 de junio de 1977; y, en fin, est¨¢ por ver si la extrema derecha deja de ser extraparlamentaria, puesto que ya existen suficl entes indicios de que ese sector empieza a considerar que un esca?o bien vale la aceptaci¨®n de la legalidad democr¨¢tico-constitucional.
En cuanto a la tarea del futuro Gobierno, las decisiones del electorado decantar¨¢n una u otra opci¨®n y probablemente las campa?as har¨¢n hincapi¨¦ en que los cuatro a?os pr¨®ximos van a deparar, adem¨¢s de diferentes soluciones para resolver el problema vasco y la crisis econ¨®mica, una confrontaci¨®n en muchos temas importantes de pol¨ªtica concreta.
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