Buenos resultados de la banca en el primer semestre de 1981

Los avances sobre los resultados bancarios correspondientes al primer semestre del presente a?o, publicados por las propias entidades en algunas ocasiones, y otras fruto del rumor y de las comparaciones apresuradas de los boletines mensuales del Consejo Superior Bancario, arrojan dos conclusiones fundamentales: los m¨¢rgenes de beneficio se sit¨²an en magnitudes similares a los del mismo per¨ªodo de 1980, y para conseguirlos han sido necesarias complicadas obras de ingenier¨ªa financiera.

La importante ca¨ªda que experiment¨® la demanda de cr¨¦dito en los primeros meses del a?o ha obligado a estas entidades a volver la vista sobre activos distintos de la propia actividad crediticia tradicional. El incremento de las partidas de bonos del Tesoro en las carteras de inversi¨®n de algunas entidades est¨¢ siendo realmente notable, as¨ª como la actividad financiadora en los mercados internacionales, que se ha convertido paulatinamente en una de las principales partidas del activo de los bancos espa?oles.Esta ca¨ªda de la demanda de financiaci¨®n en el mercado interior se mantuvo hasta el pasado mes de abril, donde algunos indicadores comenzaron a detectar s¨ªntomas de recuperaci¨®n. A esas alturas del a?o, las empresas espa?olas estaban ya necesitadas de financiaci¨®n externa, y como la situaci¨®n en los mercados internacionales apuntaba por un progresivo encarecimiento de los recursos disponibles, a la vez que se anunciaba la ca¨ªda de la peseta frente al d¨®lar, sus demandas de financiaci¨®n se recanalizaron hacia el sector bancario nacional, que en este per¨ªodo de tiempo ya hab¨ªa desarrollado plenamente nuevas modalidades de pr¨¦stamo, como son los cr¨¦ditos sindicados en pesetas.

Mientras, el Banco de Espa?a impuso una pol¨ªtica monetaria neutral, que pretend¨ªa mantener los precios de los bonos del Tesoro en niveles similares a los tipos de las operaciones de pasivo de la banca, para que las entidades del sector pudieran, reinvertir sus dep¨®sitos en estos activos sin observar p¨¦rdidas, intentando como objetivo principal el evitar un par¨®n en la carrera de los bancos por incrementar sus captaciones de dep¨®sitos.

Pago de los primeros dividendos libres

Con todo, la gran novedad del presente a?o en el sector bancario nacional la constituy¨® el pago de los primeros dividendos libres en los ¨²ltimos cuarenta a?os. Estos primeros dividendos de la nueva etapa liberal est¨¢n a¨²n sometidos a ciertas tutelas por parte de la autoridad monetaria, y fueron fruto m¨¢s de una decisi¨®n de Leopoldo Calvo Sotelo, en su etapa de vicepresidente econ¨®mico, que del inter¨¦s que mostraron por ella los representantes de las mayores entidades, quienes se consideraban francamente c¨®modos con el tradicional sistema de reparto l¨ªmite del 6% sobre los recursos propios de las entidades. Sin embargo, ha saltado recientemente a la calle la posibilidad de que los dividendos bancarios sean nuevamente reglamentados por la v¨ªa administrativa. Aun cuando no est¨¢n todav¨ªa excesivamente claras estas intenciones, medios del sector manifestaron a EL PAIS la incongruencia de la posible medida, en unos momentos en los que el liberalismo econ¨®mico parece ser la profesi¨®n de fe de les representantes del sector y de m¨¢s de un alto cargo de la Administraci¨®n. Banca y BOE De llevarse a cabo esta medida, ser¨ªan, una vez m¨¢s, los m¨¢s recalcitrantes de entre los banqueros quienes se llevasen el gato al agua. Para ellos resulta fundamental evitar las carreras por ver qui¨¦n es el que mayores dividendos consigue llegar a repartir, ya que una situaci¨®n de este tipo acabar¨ªa transformando la estructura de los recursos propios de estas entidades, agravar¨ªa la situaci¨®n de los bancos en dificultades y complicar¨ªa la conveniente dotaci¨®n de los fondos para previsi¨®n de fallidos y casos similares.Frente a estas razones. las tesis que supuestamente estar¨ªa barajando la Administraci¨®n ser¨ªan las de evitar la imagen de opulencia en el sector en unos momentos como los actuales, en los que la econom¨ªa nacional atraviesa serias dificultades. En cualquier caso, si este proyecto saliese adelante, volver¨ªa a darse una curiosa coincidencia entre los intereses de algunos representantes de la banca y las disposiciones del BOE.