La edici¨®n europea deber¨¢ estar alerta ante nuevos mercados, seg¨²n un simposio internacional

El reto al que se enfrenta la edici¨®n en Europa es el de seguir creando, como ha ocurrido en su historia, y no dejarse invadir por "productos atl¨¢nticos", seg¨²n dijo ayer Bernard Lecherbonnier, directivo de la editorial Hachette, en una sesi¨®n dedicada a los grandes grupos editoriales, dentro del seminario Futuro de la Edici¨®n en Europa que se desarrolla en el Centro Conde Duque. En los pr¨®ximos a?os, seg¨²n impresi¨®n general, se van a vivir grandes cambios, y los europeos deber¨¢n estar alertas sobre mercados que van a crecer m¨¢s que el suyo. A¨²n es pronto para calibrar el ¨¦xito del crecimiento de los grandes grupos.

?Existe tal cosa como una industria editorial europea, o s¨®lo hay editores en Europa?, se pregunt¨® Peter Warwick, director ejecutivo del grupo brit¨¢nico Longman. Y ?existe tal cosa como un mercado editorial europeo, o hay mercados individuales? Existen algunos obst¨¢culos para la creaci¨®n de una industria editorial paneuropea, seg¨²n dijo, y entre ellos, que a esta regi¨®n la caracterice su diversidad cultural.En la ¨²ltima d¨¦cada se ha producido un crecimiento de los grandes grupos internacionales de edici¨®n, pero a¨²n es pronto para calibrar su ¨¦xito, seg¨²n Warwick, lo que s¨®lo ser¨¢ posible a mediados de esta d¨¦cada. Es seguro que aumentar¨¢ la actividad en los pa¨ªses ex comunistas, pero "no sin continuos problemas financieros, sociales, pol¨ªticos y de medio ambiente". Y s¨®lo obtendr¨¢n resultados, dijo, las compa?¨ªas con una visi¨®n a largo plazo o que publican libros de amplia demanda.

"Las compa?¨ªas editoras de m¨¢s ¨¦xito en los a?os 90 ser¨¢n probablemente aquellas que mantengan un ojo en las oportunidades de fuera de Europa, y al tiempo procuren mantener el crecimiento de su negocio en el continente". Por ejemplo, seg¨²n los expertos, en esta d¨¦cada la econom¨ªa de Latinoam¨¦rica crecer¨¢ m¨¢s r¨¢pidamente que la de Europa o Norteam¨¦rica, y en proporci¨®n mucho mayor que en los a?os ochenta.

"El a?o no ha sido tan catastr¨®fico, pero constituye una advertencia despu¨¦s de cuatro a?os de muy fuerte progresi¨®n", seg¨²n dijo Bernard Lecherbonnier, del grupo Hachette: en Francia, la media de venta por ejemplar ha descendido un 10%.

"Es necesario que los grandes grupos culturales tengan la misma fortaleza que los grupos industriales (autom¨®vil, por ejemplo), para de alguna manera garantizar la libertad, dijo Lecherbonnier. A su juicio, las nuevas tecnolog¨ªas van a provocar en breve una inmensa revoluci¨®n en la edici¨®n.