Clinton estrena su mandato con el ataque a un radar iraqu¨ª
Un nuevo incidente militar rompi¨® ayer la tregua en los combates en Irak, el mismo d¨ªa en que Bill Clinton cumpl¨ªa su primera jornada como presidente de Estados Unidos. Aunque se trat¨® de un incidente aislado -aviones norteamericanos dispararon sus misiles contra un radar iraqu¨ª y contra una bater¨ªa antia¨¦rea-, supone el bautismo de fuego del nuevo presidente y una prueba de su disposici¨®n a continuar, si es preciso, la pol¨ªtica de su antecesor, George Bush.
Un portavoz del Ministerio de Exteriores iraqu¨ª declar¨® que el nuevo ataque, en el que no parece que mediara una provocaci¨®n previa (aunque el radar iraqu¨ª, supuestamente, ilumin¨® a un avi¨®n franc¨¦s), no pondr¨¢ en peligro el alto el fuego anunciado por Sadam Husein para abrir el camino a un entendimiento con la nueva Administraci¨®n estadounidense. "Irak est¨¢ comprometido con el alto el fuego que ha declarado", dijo el portavoz.El nuevo presidente estadounidense insisti¨® ayer en que mantendr¨¢ hacia Irak la misma l¨ªnea que su predecesor. "Vamos a mantener nuestra pol¨ªtica. Se trata de una pol¨ªtica americana", declar¨® Clinton, reafirmando la determinaci¨®n de la Administraci¨®n dem¨®crata en el Golfo.
El nuevo secretario de Estado, Warren Christopher, explic¨® que el objetivo de la intervenci¨®n de ayer era proteger a los pilotos de la coalici¨®n internacional que patrullan el Golfo. "Estados Unidos intenta proteger a sus pilotos en la zona de exclusi¨®n a¨¦rea", afirm¨® Christopher en su primer d¨ªa al frente de la pol¨ªtica exterior de EE UU. El Pent¨¢gono inform¨® del ataque a las cinco de la tarde (hora peninsular espa?ola), aunque se produjo siete horas antes.
El presidente, finalmente, recibi¨® ayer en la Casa Blanca a 2.500 ciudadanos a los que se hab¨ªa permitido el acceso para saludar al nuevo inquilino.
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Aviones norteamericanos disparan a un radar iraqu¨ª que 'iIumin¨®' a un aparato franc¨¦s
Viene de la primera p¨¢ginaSeg¨²n la informaci¨®n del Pent¨¢gono, aviones F-4G dispararon un misil contra un puesto de radares en la zona de exclusi¨®n a¨¦rea del norte iraqu¨ª despu¨¦s de que un rayo de ese mismo radar apuntara hacia un avi¨®n Mirage franc¨¦s que patrullaba esa zona y hacia otro aparato norteamericano que le escoltaba. Otro misil fue lanzado contra una bater¨ªa antia¨¦rea iraqu¨ª que, aparentemente, proteg¨ªa el puesto de radar. Al parecer, el ataque se hizo sin advertencia previa y sin que la posici¨®n iraqu¨ª hubiera hecho algo m¨¢s que iluminar con su radar a la patrulla aliada, que consider¨® que eso constitu¨ªa una amenaza para su seguridad.
Estos incidentes responden a la pol¨ªtica de la anterior Administraci¨®n de utilizar la fuerza contra cualquier violaci¨®n por parte de Irak de las resoluciones de las Naciones Unidas y de las zonas de exclusi¨®n a¨¦rea establecidas por Estados Unidos y sus aliados en el norte y el sur del pa¨ªs, para proteger a kurdos y shi¨ªes, respectivamente.
Aunque Bill Clinton hab¨ªa declarado antes de asumir la presidencia que continuar¨ªa la misma pol¨ªtica de George Bush hacia Irak y Sadam Husein, los episodios militares de ayer causaron cierta sorpresa porque tuvieron lugar mientras que portavoces del nuevo Gobierno hablaban de la voluntad del presidente de concentrarse prioritariamente en los asuntos econ¨®micos.
El ataque contra el radar y contra los misiles que lo proteg¨ªan es una prueba de que Bill Clinton. se siente, en cierta medida, v¨ªctima de una pol¨ªtica de hechos consumados que le obliga a sumarse a una l¨ªnea de actuaci¨®n en Irak impuesta por el Gobierno de Bush.
Criticado durante toda su campa?a electoral por sus viejas actividades pacifistas y su supuesta debilidad en el empleo de la fuerza militar, Bill Clinton se ha podido sentir tambi¨¦n en la necesidad de ense?ar, desde el primer momento, sus cartas a Sadam Husein, quien quer¨ªa jugar la baza de que el conflicto entre Estados Unidos e Irak era un obsesi¨®n personal de George Bush. Durante el discurso pronunciado el mi¨¦rcoles tras su toma de posesi¨®n, Bill Clinton advirti¨® que no dudar¨ªa en recurrir al uso de la fuerza, si fuera necesario, para defender los intereses de Estados Unidos.
Quinto incidente b¨¦lico
Se trata del quinto incidente b¨¦lico en Irak desde que el pasado d¨ªa 13 aviones norteamericanos, franceses y brit¨¢nicos atacaron diversas posiciones de misiles en la zona de exclusi¨®n a¨¦rea al sur del paralelo 32.
Esta nueva operaci¨®n militar se produce poco despu¨¦s de que algunos miembros de la coalici¨®n que hab¨ªan respaldado la pol¨ªtica norteamericana en el Golfo, especialmente Rusia y Francia, pusieran reparos a las actuaciones de la ¨²ltima semana. Al mismo tiempo, esto sucede el d¨ªa en que los observadores de Naciones Unidas pod¨ªan volar, por fin, a Bagdad.
La continuaci¨®n de las actividades militares en el Golfo interrumpen bruscamente la luna de miel de la inauguraci¨®n presidencial y enrarece, objetivamente, el clima en el que empiezan a contar los primeros cien d¨ªas del Gobierno de Clinton.
Poco antes de que se conociese el ataque de ayer, el jefe de Gabinete de la Casa Blanca, Thomas McLarty, hab¨ªa declarado a la cadena de televisi¨®n CBS que la principal preocupaci¨®n de Bill Clinton en estos momentos es "cumplir con su promesa de trabajar como un rayo l¨¢ser en la mejora de las condiciones econ¨®micas".
The New York Times informaba ayer de que otra de las medidas que se tomar¨¢n estos d¨ªas ser¨¢ la de levantar la prohibici¨®n de que los homosexuales puedan servir en las Fuerzas Armadas. Clinton tiene previsto enviar a principios de la pr¨®xima semana una instrucci¨®n a su secretario de Defensa, Les Aspin, para que se ponga fin inmediatamente a las investigaciones sobre actividades sexuales de los aspirantes a soldados y se acabe con la persecuci¨®n a los homosexuales ya identificados en el Ej¨¦rcito.
Posteriormente, el Departamento de Defensa presentar¨¢ una ley para abolir definitivamente la discriminaci¨®n sexual, medida muy pol¨¦mica que ha sido comparada a la revolucionaria apertura de las fuerzas armadas a los negros.
Otra medida que se espera inmediatamente es la abolici¨®n de una ley que proh¨ªbe a las cl¨ªnicas respaldadas con presupuesto p¨²blico aconsejar o dar instrucciones sobre el aborto a embarazadas.
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