El l¨ªder del partido anti-Sacchi
Primera reacci¨®n: menos mal que ha terminado la borrasca. Segunda reacci¨®n: ?pero de verdad ha terminado?No, en cada gol marcado por Vialli, aunque sea con la nuca, el portero ser¨¢ siempre Sacchi. Y, de hecho, casi como Fantozzi con el acorazado Potemkin, Vialli se ha convertido en el l¨ªder indiscutido del partido antisacchiano. Sigan con nosotros despu¨¦s de la publicidad, el espect¨¢culo contin¨²a.
Yo no estoy triste, porque s¨¦ que la selecci¨®n sobrevivir¨¢ sin Vialli y Vialli sin la selecci¨®n. Se han cometido muchos errores, en el pasado y recientemente. Sigo con la idea de que las cosas o se dicen todas o se callan. Y, de hecho, en los ¨²ltimos meses he dicho que no comprend¨ªa: ni los verdaderos motivos de la renuncia a Vialli (?¨¦ticos, su comportamiento? Si es as¨ª, ?cu¨¢les? Nunca los han dicho), ni los de abrir los brazos a Vialli (?buen entendimiento de Sacchi con el Juventus y Lippi? ?Jugada pol¨ªtica de Matarrese? Nunca los han explicado).
Ejemplo: Sacchi no estaba obligado a hablar del parecer negativo del grupo de seleccionados antes del partido con Estonia, parecer que despu¨¦s cambi¨® de signo. Y eso le encendi¨® a Vialli, que fue m¨¢s all¨¢ en sus cr¨ªticas. Precisamente ¨¦l tendr¨ªa que saber que en el Sampdoria hab¨ªa un grupo Cucciolo, Pisolo, etc¨¦tera, que no se reun¨ªa solamente para comer pizza, sino que tomaba decisiones importantes sobre el juego y los jugadores. En el f¨²tbol, el grupo siempre ha tenido importancia. Por lo dem¨¢s, me gustar¨ªa mucho saber qui¨¦nes forman parte del grupo permanente anti-Vialli, dado que, entre llegadas y salidas, en los ¨²ltimos tiempos la selecci¨®n parece el vest¨ªbulo de la estaci¨®n T¨¦rmini de Roma. ?Paolo Maldini? ?Gigi Riva? ?De verdad hay un grupo sin dial¨¦ctica interna? ?Qui¨¦n tiene raz¨®n? Nadie. De Rijkaard a Laudrup, de Gullit a Pecci, no faltan ejemplos de jugadores que han dicho no a su selecci¨®n nacional. Entonces, adelante, aqu¨ª no hay muertos, salvo el sentido com¨²n, que generalmente dice que no a convertir en espect¨¢culo todo, en especial esto.
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