Aparicio urge a pactar la reforma de la negociaci¨®n colectiva antes de mayo

Aparicio defendi¨® ayer el decreto 'para la mejora del empleo y de su calidad'. Asegur¨® que beneficiar¨¢ a 800.000 trabajadores: 'A 225.000 mujeres desempleadas, a 100.000 parados mayores de 45 a?os, a 125.000 que llevan m¨¢s de seis meses desempleadas, a 215.000 con contratos temporales, a 35.000 que se acoger¨¢n a bonificaciones por baja de maternidad y a 70.000 que se beneficiar¨¢n de las bonificaciones llamadas de coste cero'.

'Si esto que usted dice fuera cierto', le respondi¨®, por ejemplo, Joan Saura, de IC, 'en este pa¨ªs hay gente que se ha vuelto loca'. Saura, como todos los portavoces de la izquierda parlamentaria, subray¨® que no hay tales beneficios.

Jordi Sevilla, portavoz de Econom¨ªa del PSOE, asegur¨® que el decreto 'ahonda en una estrategia de precarizaci¨®n del mercado laboral y apuesta por un modelo basado en el progresivo deterioro de los derechos colectivos de los trabajadores'. Desde cu¨¢ndo, se pregunt¨® Sevilla, 'para reducir la temporalidad se crean nuevos contratos temporales y precarios'. O para 'aumentar la participaci¨®n de la mujer en el mercado laboral s¨®lo se les ocurre que lo hagan en peores condiciones que los hombres, con un coste de despido m¨¢s barato'. Sevilla ironiz¨®: 'No dudo de que semejante discriminaci¨®n contra las mujeres ser¨¢ debidamente criticada y votada en contra por las diputadas de su grupo, que tanta sensibilidad feminista han mostrado en ocasiones recientes'.

Con esta broma, Sevilla recordaba el incidente de hace una semana cuando un comentario supuestamente machista caus¨® tal alboroto que 54 diputados del PP equivocaron su voto y devolvieron una ley al Gobierno. Ayer en el PP votaron correctamente, pero tres socialistas erraron al apretar el bot¨®n.

Aunque el decreto fue convalidado con los votos de PP, CiU y Coalici¨®n Canaria, tambi¨¦n los portavoces de estos dos grupos nacionalistas criticaron la ruptura del di¨¢logo social. Carles Campuzano (CiU) record¨® que el 'acuerdo de 1997 permiti¨® un buen clima social y un proceso de moderaci¨®n salarial que ha contribuido decisivamente al crecimiento'. Desde CC, Mar¨ªa del Mar Julios Reyes dijo que el crecimiento requiere 'estabilidad', y para lograrla 'son necesarios los pactos, los consensos, el di¨¢logo con los interlocutores sociales, las fuerzas pol¨ªticas y las comunidades aut¨®nomas'.

La defensa a ultranza del di¨¢logo y la acusaci¨®n al Gobierno de haber participado activamente en su ruptura no fue compartida ni por el diputado del PP Jos¨¦ Azpiroz ni por el ministro. Aparicio subray¨® que 'el di¨¢logo no es un fin en s¨ª mismo, sino una herramienta, y cuando hay una necesidad de actuar sobre el mercado laboral, el Gobierno tiene la obligaci¨®n de actuar, una vez cumplidos y respetados los plazos que los agentes sociales se han dado'. Con esta filosof¨ªa subray¨®, despu¨¦s del pleno, que el plazo para la 'ineludible modernizaci¨®n de la negociaci¨®n colectiva' concluye el 17 de mayo, e invit¨® a los agentes sociales a seguir negociando.

Aunque esta amenaza s¨®lo ha salido en la prensa, el coordinador de IU, Gaspar Llamazares, asegur¨® que ¨¦sa es la clave de esta reforma laboral: 'Es un mensaje a los sindicatos para que se atengan a las consecuencias; han dicho que en estos momentos la cuesti¨®n est¨¢ encima de la mesa, cuando no se ha iniciado siquiera la mesa de negociaci¨®n colectiva, que est¨¢ encima de la mesa la protecci¨®n al desempleo y que lo est¨¢ tambi¨¦n la cuesti¨®n de las pensiones'.