La OIT denuncia que el tr¨¢fico de mujeres y menores para trabajos forzosos aumenta en todo el mundo

La Organizaci¨®n Internacional del Trabajo (OIT) denunci¨® ayer, en un informe titulado Alto al trabajo forzoso la esclavitud de mujeres y ni?os. El documento, ser¨¢ discutido en la reuni¨®n de la OIT del pr¨®ximo mes, alerta de que aumenta el 'tr¨¢fico de seres humanos para destinarlos a trabajos forzosos'.

El crecimiento de ese fen¨®meno es 'profundamente inquietante', dice el director general de la OIT, Juan Somav¨ªa. 'El cuadro que resulta muestra que la esclavitud, la opresi¨®n y la explotaci¨®n de los miembros m¨¢s vulnerables de la sociedad, especialmente las mujeres y los ni?os, no son en absoluto cosa del pasado'.

El organismo internacional se?ala como 'una de las peores formas de trabajo infantil' la captura de ni?os para utilizarlos como combatientes, una pr¨¢ctica que 'no es algo fuera de lo com¨²n' en pa¨ªses como Liberia, Sierra Leona o Sud¨¢n.

El informe indica, en alusi¨®n al tr¨¢fico de menores y mujeres en barcos en la costa occidental de ?frica, que 'muchos trabajadores son presas de pr¨¢cticas coercitivas de reclutamiento en zonas rurales, para trabajar en plantaciones agr¨ªcolas'. En cuanto a las mujeres, en muchos casos menores de edad, se las recluta para el servicio dom¨¦stico.

En el sureste asi¨¢tico, 'la coerci¨®n, el enga?o y la venta de menores son el resultado inmediato de su reclutamiento directo en las aldeas', con el prop¨®sito de abastecer gran parte de las actividades de la prostituci¨®n.

Pero el estudio detecta tambi¨¦n pr¨¢cticas de explotaci¨®n en Europa y EE UU. La pobreza, el paro, la represi¨®n pol¨ªtica y la discriminaci¨®n racial o sexual 'contribuyen a crear un ambiente propicio a la explotaci¨®n de las personas vulnerables por parte de los traficantes'. En Europa, ese tr¨¢fico se ha agravado 'desde la ruptura de la Uni¨®n Sovi¨¦tica'.

El informe revela que EE UU podr¨ªa ser cada a?o el destino de 50.000 ni?os y mujeres objeto de tr¨¢fico ilegal, destinados al sector del sexo, al servicio dom¨¦stico y a las labores de limpieza. Los principales puntos de entrada en el pa¨ªs son Nueva York y California.

Somav¨ªa concluye: 'No cabe excusa para el trabajo forzoso en el siglo XXI. El mundo entero tiene que hacer examen de conciencia y abolir el trabajo forzoso y las a menudo terribles condiciones de vida que lo acompa?an'.