El a?o en que la econom¨ªa empa?¨® la mayor¨ªa absoluta
La inflaci¨®n y el freno del crecimiento deslucen los primeros 12 meses en los que el PP pudo prescindir de los nacionalistas
El Gobierno ha disfrutado en el ¨²ltimo a?o de una c¨®moda mayor¨ªa absoluta que le ha permitido gobernar sin necesidad de pactar sus reformas con nadie. A pesar de ello, y de los acuerdos en algunos asuntos a los que ha llegado con la oposici¨®n socialista, el Ejecutivo se ha enfrentado a m¨²ltiples problemas con suerte dispar. Aunque su presidente, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, tratar¨¢ de vender en el debate todos los logros de su Gobierno, el siguiente an¨¢lisis de algunos aspectos demuestra que no todo han sido luces.
ECONOM?A
El 'milagro' pierde gas y la inflaci¨®n se dispara
El balance econ¨®mico de estos 12 meses de legislatura presenta un perfil muy diferente al que cerr¨® los primeros cuatro a?os del Gobierno del PP. En aquellos momentos la econom¨ªa creci¨® a un ritmo superior al 4%, la inflaci¨®n registr¨® un m¨ªnimo hist¨®rico del 1,4% a finales de 1998 y se crearon casi 1,5 millones de empleos. El milagro se redujo a un acontecimiento (la incorporaci¨®n de Espa?a al euro y el descenso de los tipos de inter¨¦s que produjo el haberse enganchado a los pa¨ªses m¨¢s saneados de Europa) y a una decisi¨®n pol¨ªtica, la rebaja del IRPF y los 800.000 millones que inyect¨® en los bolsillos de los contribuyentes.
La desaz¨®n por la ofensiva terrorista se ha visto parcialmente compensada por la detenci¨®n de 115 personas vinculadas a ETA y la firma del pacto con el PSOE
Pero el pasado a?o lleg¨® la crisis del petr¨®leo y la econom¨ªa espa?ola empez¨® su derrapaje. Espa?a est¨¢ entre los pa¨ªses del euro que peor han asimilado la espectacular subida de los precios del crudo. La inflaci¨®n ha duplicado el objetivo oficial (2%) y se encuentra en el 4,2%, el nivel m¨¢s alto desde 1995; es decir, antes del primer Gobierno del PP.
El ritmo de crecimiento econ¨®mico se desacelera -aunque a¨²n mantiene un m¨¢s que aceptable 3,7%- y amenaza con formar la peor de las tenazas: un ritmo de actividad que languidece y una inflaci¨®n fuera de control. Las medidas liberalizadoras adoptadas en junio de 2000 se han demostrado excelentes en el papel pero con dificultades pr¨¢cticas considerables.
El ritmo de creaci¨®n de empleo tambi¨¦n se desinfla. Desde el 5,3% en que aumentaba el n¨²mero de puestos de trabajo creados durante el primer trimestre de 2000, hasta el 2,8% de los primeros meses de 2001. La tasa de paro apenas ha mejorado 1,6 puntos en ese periodo (del 15% hasta el 13,4% de la poblaci¨®n activa).
El Gobierno hace gala de una saneada gesti¨®n presupuestaria que piensa coronar este a?o con el equilibrio o d¨¦ficit cero. Los anteriores a?os de fuerte crecimiento del consumo, las subidas de las gasolinas y las elevadas importaciones han mantenido las arcas del Estado a rebosar. Si a eso se suma la contabilidad creativa en el gasto, se explica este otro milagro.
Ahora la tendencia de los ingresos ha cambiado por la desaceleraci¨®n econ¨®mica y los gastos crecen a mayor ritmo del previsto, pero a nadie le cabe duda de que el Gobierno har¨¢ todo lo posible para que este a?o le cuadren las cuentas. ?sta es la condici¨®n para una nueva rebaja de impuestos al final de la legislatura.-
LUCHA ANTITERRORISTA
Crece la ofensiva de ETA
ETA ha marcado indefectiblemente la agenda del Gobierno. Desde que el 21 de enero del a?o pasado la banda rompi¨® la tregua con el asesinato del teniente coronel Pedro Antonio Blanco en Madrid, los terroristas han mantenido un pulso constante con la sociedad espa?ola. ETA ha asesinado a 31 personas en los 71 atentados que ha perpetrado desde entonces, muchos de ellos afortunadamente fallidos. La desaz¨®n por la ofensiva terrorista, especialmente intensa durante el verano, se ha visto parcialmente compensada con la detenci¨®n de 115 miembros o colaboradores de ETA, el cerco a la llamada trama civil de la banda y con la firma del pacto antiterrorista con el PSOE.
La organizaci¨®n terrorista, desde el momento en que rompi¨® la tregua que rein¨® durante 1999, demostr¨® que su intenci¨®n era forzar al m¨¢ximo su m¨¢quina de matar con la filosof¨ªa de cuanto peor, mejor y el objetivo de romper la pol¨ªtica de firmeza del Ejecutivo, que ha apostado claramente por la v¨ªa policial como ¨²nico m¨¦todo para acabar con la violencia.
ETA, adem¨¢s, apost¨® por abrir el abanico de sus objetivos, por lo que llama socializar el sufrimiento, para que nadie se considerase a salvo: militares, miembros de las Fuerzas de Seguridad del Estado, empresarios, pol¨ªticos socialistas y del PP, periodistas, fiscales, magistrados, funcionarios de prisiones y a todo aqu¨¦l que, de una forma u otra, hubiera apostado por las v¨ªas de di¨¢logo para acabar con el conflicto vasco, como se demostr¨® con los asesinatos de Jos¨¦ Luis L¨®pez de Lacalle, Juan Mar¨ªa J¨¢uregui o Ernest Lluch.
Ni siquiera la derrota electoral sufrida por Euskal Herritarrok en las ¨²ltimas elecciones vascas ha llevado a ETA a un m¨ªnimo de reflexi¨®n ni a su entorno pol¨ªtico a replantearse su silencio c¨®mplice con los atentados. Simplemente se agarran a que los nacionalistas han ganado a los constitucionalistas.-
JUSTICIA
El a?o del pacto
El flamante Pacto por la Justicia dise?ado se vio enturbiado por el indulto 'milenarista' al ex juez prevaricador Javier G¨®mez de Lia?o. El ministro de Justicia ?ngel Acebes ha hecho una cuesti¨®n de honor de la reincorporaci¨®n de Lia?o a la carrera judicial, plantado cara a la Sala Penal del Tribunal Supremo y llevando el caso hasta un tribunal especial de conflictos, que ha dictaminado que el ex juez podr¨¢ reingresar, pero s¨®lo cuando cancele sus antecedentes penales, en 2005.
El Pacto contiene un extenso cat¨¢logo de buenas intenciones, deja casi inalterado el statuto quo en las cuestiones m¨¢s controvertidas -el nombramiento del Consejo del Poder Judicial sigue siendo controlado por el Parlamento y no se prev¨¦n cambios en el sistema de jurado ni en los turnos de acceso de juristas a la carrera sin oposici¨®n- pero abre un grifo de 250.000 millones de pesetas adicionales que han sido acogidos de forma entusiasta por todos los estamentos implicados. Las prisas por dar lustre al Pacto nombrando el nuevo Consejo en poco m¨¢s de un mes est¨¢ provocando una ca¨®tica designaci¨®n de candidatos por parte de las asociaciones de jueces y la pr¨¢ctica imposibilidad de presentarse por parte de los que no est¨¢n asociados.-
INMIGRACI?N
Una pol¨ªtica con freno y marcha atr¨¢s
Durante la campa?a electoral, Aznar present¨® la reforma de la Ley de Extranjer¨ªa como un conjuro contra el 'efecto llamada' que, seg¨²n ¨¦l, ejerc¨ªa la norma vigente. Su planteamiento le rindi¨® una importante plusval¨ªa de votos y ha marcado la labor del Ejecutivo, que durante los ¨²ltimos seis meses se ha visto obligado a rectificar casi todas sus medidas al poco de adoptarlas.
El Gobierno renunci¨® al consenso para sacar adelante una Ley que niega a los inmigrantes los derechos de asociaci¨®n, reuni¨®n, manifestaci¨®n, sindicaci¨®n y huelga, y que fue recurrida de inmediato ante el Tribunal Constitucional. La realidad demostr¨® pronto que era de dif¨ªcil aplicaci¨®n: los sin papeles se manifestaron y encerraron por toda Espa?a ante la impotencia de la Administraci¨®n, que adem¨¢s carec¨ªa de medios para llevar adelante la deportaci¨®n de miles de irregulares. Para justificar esta situaci¨®n, el Ejecutivo ha argumentado que ¨¦ste es un 'un per¨ªodo transitorio' hasta la entrada en vigor del Reglamento que desarrolla la Ley, cuya aprobaci¨®n debe producirse antes del 23 de julio.
No es ¨¦ste el ¨²nico punto en el que el Gobierno se ha visto obligado a dar marcha atr¨¢s. Tras negarse a financiar el Programa Global de Regulaci¨®n y Coordinaci¨®n de la Extranjer¨ªa y la Inmigraci¨®n en Espa?a, conocido como Plan Greco, tuvo que recurrir al Consejo de Ministros para dotarlo con 37.000 millones de pesetas. Despu¨¦s de dar por cerrado 'el ¨²ltimo' proceso de regularizaci¨®n de extranjeros ha tenido que abrir nuevas v¨ªas para documentar a los que hab¨ªa rechazado. Luego de embarcar a 25.000 ecuatorianos en un periplo de ida y vuelta a Quito si quer¨ªan obtener papeles, deshizo la operaci¨®n cuando s¨®lo hab¨ªan viajado 4.000 y el Estado hab¨ªa gastado 400 millones.
La firma de convenios con Ecuador, Colombia, Polonia y Nigeria y la apertura de otro proceso de regularizaci¨®n impulsado por el nuevo ministro del Interior, Mariano Rajoy, para todos los extranjeros que se hallen en Espa?a desde antes del 23 de enero de este a?o son las ¨²ltimas medidas emprendidas por el Ejecutivo. Entre tanto, contin¨²a creciendo la llegada de inmigrantes: s¨®lo las entradas en patera aumentaron un 10% en los ¨²ltimos cinco meses.-
ASUNTOS EXTERIORES
Mayor presencia, m¨¢s conflictos con los vecinos
El primer a?o de esta segunda legislatura del PP ha sido un a?o de claro avance de Espa?a en la escena internacional pero tambi¨¦n de crecientes conflictos con los pa¨ªses de su entorno m¨¢s inmediato, especialmente de Europa. Concluye, adem¨¢s, por razones ajenas al gui¨®n, con un ministro de Asuntos Exteriores lastrado de problemas judiciales cuando Espa?a est¨¢ a punto de asumir la presidencia de la Uni¨®n Europea, el pr¨®ximo 1 de enero.
La confirmaci¨®n del inicio de una relaci¨®n preferente con EE UU, que George Bush ha querido subrayar eligiendo Madrid como primera etapa de su primera gira europea, y la consolidaci¨®n del papel del Gobierno espa?ol como interlocutor importante en Oriente Pr¨®ximo, reflejado en el continuo ir y venir a Espa?a de los protagonistas del conflicto, son los principales elementos de activo que puede exhibir Aznar. Pero el pasivo de su pol¨ªtica exterior es tambi¨¦n voluminoso: deterioro de las relaciones con Francia y Alemania; vuelta a la cara de perro con el Reino Unido por el problema de Gibraltar; desencuentro con Portugal, cuyo primer ministro, Antonio Guterres, lleg¨® a evocar en la cumbre de Niza el fantasma de un hegemonismo ib¨¦rico espa?ol; tensi¨®n abierta con Marruecos por la inmigraci¨®n y el fracaso de las negociaciones pesqueras... Aunque muchas de estos roces han sido consecuencia directa de decisiones y declaraciones suyas, que el canciller, Josep Piqu¨¦, ha tenido que matizar luego, Aznar no admite que est¨¦ aislado y atribuye a maniobras interesadas esta visi¨®n de las cosas.-
SANIDAD
Crecen las listas de espera
La ministra de Sanidad y Consumo, Celia Villalobos, empez¨® su mandato enfrent¨¢ndose al problema de las listas de espera en cirug¨ªa cardiaca, que result¨® ser s¨®lo la punta del iceberg. Pese al plan de choque organizado, en mayo tuvo que reconocer, ante la insistencia de la diputada socialista Matilde Valent¨ªn, que han aumentado un 72% los pacientes que esperan m¨¢s de seis meses una operaci¨®n en el Insalud.
El incremento del gasto farmac¨¦utico, que a finales de a?o, reci¨¦n implantado el decreto de precios de referencia, baj¨® del 10% por primera vez en la ¨²ltima d¨¦cada, gracias a la rebaja en el precio de los medicamentos recetados y la introducci¨®n de los gen¨¦ricos, se mantuvo durante el primer trimestre del a?o, llegando al 5% en marzo, seg¨²n anunci¨® Villalobos en el Senado. Pero fuentes de la industria indican que la tendencia se ha invertido, y que el crecimiento de la factura en medicamentos vuelve a superar el 10% anual. Adem¨¢s, los fabricantes se?alan que el uso de gen¨¦ricos, lejos del objetivo del 5% del Gobierno, est¨¢ descendiendo, y en mayo apenas super¨® el 3% del total. El Plan Integral de Estabilidad del Sistema Nacional de Salud que debe fijar el marco que permita luchar contra el incremento creciente de este gasto, que se lleva el 25% del presupuesto total de Sanidad, se ha retrasado hasta despu¨¦s del verano.-
MEDIO AMBIENTE
Pas¨® el Plan Hidrol¨®gico
El Gobierno de Aznar se dedic¨® los cuatro a?os de su primera legislatura a preparar un Plan Hidrol¨®gico que luego guard¨® en un caj¨®n. De ah¨ª lo sac¨®, ya con mayor¨ªa absoluta, para hacerle recorrer los tr¨¢mites parlamentarios como un meteoro. Se present¨® en septiembre de 2000 y se ha aprobado antes de acabar junio, justo a tiempo para que el presidente pueda incluirlo en el paquete de 'objetivos cumplidos' esta semana ante el Parlamento. Los obst¨¢culos que parec¨ªan insalvables estaban en Tarragona y Arag¨®n, cuyos habitantes siempre han estado en contra de travasar agua del r¨ªo Ebro. Los vecinos del Delta porque temen que se agrave la salinizaci¨®n del r¨ªo si pierde caudal y los aragoneses porque arrastran d¨¦cadas de promesas incumplidas para el aprovechamiento del agua en su propia regi¨®n y observan c¨®mo el Estado prodiga inversiones en territorios m¨¢s ricos.
En ninguna de estas regiones gobierna el PP, de manera que el plan, como dijo el ministro de Agricultura, Miguel Arias Ca?ete, se aprobar¨ªa como 'un paseo militar' y 'por cojones'. As¨ª ha sido. Los socialistas propusieron un plan alternativo y buscaron el acuerdo, pero el PP no se avino a razones. El Gobierno ha salvado la cara de CiU, su socio, con promesas para paliar la salinizaci¨®n del Delta y no cerrar la puerta a un futuro trasvase del R¨®dano. Adem¨¢s, se labr¨® el apoyo de las comunidades socialistas de Extremadura y Castilla-La Mancha. Seg¨²n Juan Jos¨¦ Laborda, portavoz del PSOE en el Senado, esto se logr¨® mediante el chantaje: 'Aceptas lo que te ofrezco porque sino no podr¨ªa darte lo que te corresponde'. Arag¨®n, los ecologistas y las comarcas del Delta del Ebro han prometido luchar para que el trasvase de 1.050 hect¨®metros c¨²bicos del Ebro hacia Barcelona y la costa mediterr¨¢nea hasta Almer¨ªa nunca se haga.-
EDUCACI?N
Propuestas y pol¨¦micas
La ministra de Educaci¨®n, Pilar del Castillo, estren¨® la legislatura con una lluvia de propuestas de reforma, acogida con recelo por la oposici¨®n y los sindicatos y con asombro por los nacionalistas. En los ¨²ltimos meses de 2000, promovi¨® a toda prisa la modificaci¨®n de la parte de los contenidos de la educaci¨®n secundaria y del bachillerato que marca el Estado. Se trataba de poner en marcha la iniciativa encargada por Aznar de homogeneizar y concretar los temarios que estudian los alumnos en los institutos de toda Espa?a e impulsar el aprendizaje de las humanidades. Los cambios salieron adelante con un apoyo de los socialistas y las cr¨ªticas de buena parte de la comunidad educativa.
Aquellas protestas de los ¨²ltimos meses de 2000 se han repetido a lo largo de este a?o desde que el Ministerio de Educaci¨®n ha empezado a trabajar en dos leyes: la de FP y la universitaria. Con esta ¨²ltima, la ministra se ha dado de bruces con la oposici¨®n de los rectores, que a d¨ªa de hoy, con el anteproyecto de la ley ya sobre la mesa, no est¨¢n conformes con los cambios introducidos. Del Castillo ya ha anunciado a bombo y platillo el fin de la prueba de selectividad, recibida con una mezcla de escepticismo y alegr¨ªa por una parte de los estudiantes y cr¨ªticas, por otra parte, al nuevo modelo que planea la ministra: un examen por universidades y una rev¨¢lida al final del bachillerato. Una reforma, a¨²n en ciernes, que promete un segundo a?o de legislatura a¨²n m¨¢s pol¨¦mico. -
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