Los Quince mantienen sus discrepancias sobre la euroorden

Los embajadores de los Quince no lograron ayer en Bruselas grandes avances sobre la orden europea de detenci¨®n y entrega. Pese a que mantuvieron una reuni¨®n desde la ma?ana hasta altas horas de la noche, optaron por pasar la patata caliente a los ministros de Justicia e Interior, que se ver¨¢n hoy y ma?ana en la capital comunitaria. Italia pone las mayores objeciones porque no quiere que la euroorden se aplique a los delitos de corrupci¨®n y fraude ni que tenga car¨¢cter retroactivo.

A media tarde, la presidencia belga de la UE puso sobre la mesa una f¨®rmula de compromiso que hoy tendr¨¢ que ser analizada por los ministros. En el documento se indica que la euroorden, por la cual una decisi¨®n judicial en cualquier Estado ser¨¢ v¨¢lida en toda la UE y supondr¨¢ extradiciones casi autom¨¢ticas, ser¨¢ aplicable a un listado de 30 delitos, que van desde el terrorismo a la trata de seres humanos, pasando por la estafa, la corrupci¨®n o el fraude.

Italia quiere que, como m¨¢ximo, se aplique s¨®lo a seis delitos, entre los que no figura ni el fraude ni la corrupci¨®n porque, de lo contrario, podr¨ªa afectar te¨®ricamente a miembros de su Gobierno, empezando por el propio Silvio Berlusconi. Ning¨²n pa¨ªs apoya expl¨ªcitamente a Italia en este terreno.

Relacionado con esa misma cuesti¨®n, la presidencia belga propone que la euroorden sea retroactiva y pueda aplicarse a delitos cometidos desde 1993, a?o del Tratado de Maastricht que sent¨® las bases para una colaboraci¨®n judicial de los Quince. Consciente de que Roma se opone a¨²n con m¨¢s ¨¦nfasis a este punto, B¨¦lgica se?ala que se puede hacer una excepci¨®n con Italia, a cuyos ciudadanos s¨®lo se les aplicar¨ªa la euroorden a partir de la fecha de su entrada en vigor, en enero de 2003. Nadie acepta semejante f¨®rmula e incluso los italianos no la ven con buenos ojos.

El tercer punto de discrepancia tambi¨¦n se refiere a los l¨ªmites m¨ªnimos de penas sobre los que aplicar la euroorden. La Comisi¨®n propuso, y as¨ª lo apoyaron Francia y Espa?a, entre otros, que sea aplicable a toda persona perseguida por delitos castigados con m¨¢s de un a?o de c¨¢rcel. Luxemburgo y otros pa¨ªses quieren elevar el list¨®n a cuatro a?os. B¨¦lgica propone ahora dos.

?sas ser¨¢n las principales diferencias que intentar¨¢n lidiar hoy los ministros de Justicia e Interior, con el fin de que los l¨ªderes europeos den su visto bueno definitivo en la cumbre de Laeken-Bruselas, el 14 y 15 de este mes.

Con respecto a la elaboraci¨®n de una lista europea de organizaciones terroristas, las diferencias entre los Quince son tan profundas y variadas que los embajadores aparcaron ayer el problema sin apenas discusi¨®n para debatirlo en los pr¨®ximos d¨ªas. Los representantes ante la UE han llegado a manejar criterios legales incluso para elaborar cuatro tipos de listas. Aunque el mandato de los l¨ªderes europeos del 21 de septiembre se?ala que la lista debe estar elaborada antes de fin de a?o, numerosas fuentes coinciden en asegurar que ser¨¢ muy dif¨ªcil, si no imposible, que se llegue a un m¨ªnimo acuerdo.

En ninguna de las f¨®rmulas legales que se analizan encaja la inclusi¨®n de Batasuna, en contra de las tesis defendidas por el Gobierno espa?ol, que ahora analiza otras opciones, como la de citar en alguna de las listas a personas que hayan sido condenados por delitos relacionados con el terrorismo y que pertenezcan a grupos pr¨®ximos a ETA.

Los ministros de Justicia tambi¨¦n intentar¨¢n hoy cerrar un acuerdo para que el 1 de enero entre en funcionamiento real Eurojust, integrado por magistrados de toda la UE y cuya misi¨®n en el terreno judicial ser¨¢ similar a la que desarrolla Europol en el terreno policial.

Europol y Estados Unidos firmar¨¢n hoy en Bruselas un acuerdo que permita el intercambio permanente de informaci¨®n entre las polic¨ªas europeas y las agencias estadounidenses como el FBI, la CIA o los servicios de aduanas.