Los franceses cuadriplican el uso de los cajeros en Nochevieja

El primer ministro franc¨¦s, Lionel Jospin, transform¨® ayer sus euros en ramos de rosas para su esposa, su hermana, su cu?ada y su madre, en cruasanes para su familia y en una botella de borgo?a. Jospin celebr¨® 'pertenecer al Gobierno que ha logrado que Francia entre en el euro', una iniciativa monetaria que atribuy¨® a Fran?ois Mitterrand y a Helmut Kohl: 'Son ellos quienes lanzaron ese objetivo'.

A pesar de su satisfacci¨®n por la entrada de su pa¨ªs en la nueva moneda europea, el primer ministro franc¨¦s tambi¨¦n tuvo un breve recuerdo para el franco, al que ahora se despide.

'Fue un buen compa?ero durante muchos a?os, aunque haya habido que devaluarlo en varias oportunidades', declar¨® Lionel Jospin sin mostrarse excesivamente nost¨¢lgico.

La nueva moneda ha llegado a una Francia con todas sus sucursales bancarias cerradas. 'Los cajeros autom¨¢ticos han conocido cuatro veces m¨¢s de operaciones que el 1 de enero de 2000 o de 2001', constataba un responsable del sector.

Mientras, la amenaza para hoy de una huelga en la banca y en los servicios de aprovisionamiento de billetes parec¨ªa desdibujarse. 'Los dos principales bancos franceses, la BNP-Paribas y el Cr¨¦dit Agricole, han llegado a acuerdos con los sindicatos, con cuatro de los cinco que representan a sus trabajadores', explicaba el director de la F¨¦d¨¦ration Bancaire.

De momento, el euro no parece haber creado especial confusi¨®n, si bien se teme que se formen colas en los comercios hasta el 17 de febrero, fecha l¨ªmite de la circulaci¨®n efectiva del franco franc¨¦s.

Los comercios prev¨¦n mantener el doble etiquetado de los precios durante dos meses, sin que exista obligatoriedad al respecto.

Reducci¨®n del d¨¦ficit

Si Jospin aprovech¨® para demostrar que manejar los euros era sencillo, el presidente Jacques Chirac, por su parte, se present¨® en su discurso televisivo de fin de a?o como impulsor de una pol¨ªtica de 'reducci¨®n de los d¨¦ficit p¨²blicos a la que nos comprometimos para calificarnos para el euro'.

Chirac olvidaba as¨ª que si orden¨® en 1997 unas elecciones anticipadas -en las que perdi¨® su mayor¨ªa- fue porque el Gobierno conservador no ve¨ªa c¨®mo satisfacer los criterios fijados en la cumbre de Maastricht.

La ¨²nica voz que se levant¨® para aguar la fiesta fue la de Jacques Delors, antiguo presidente de la Comisi¨®n Europea, que reproch¨® a los dirigentes actuales su 'incapacidad para coordinar las pol¨ªticas econ¨®micas'.

Delors tambi¨¦n les responsabiliz¨® de 'no haber sabido marcar de manera m¨¢s solemne que, por primera vez en la historia, pa¨ªses soberanos aceptan tener la misma moneda sin que eso suponga el dominio de unos sobre los otros'.