Cela respet¨® en su testamento los derechos de su hijo, pero s¨®lo le dej¨® un 'mir¨®' que ya era suyo
Marina Casta?o queda instituida como heredera y no se descarta un futuro pleito civil
Camilo Jos¨¦ Cela Trulock instituye en su testamento notarial 'leg¨ªtima heredera' a su viuda y segunda esposa, Marina Casta?o. Aunque reconoce los derechos 'legitimarios' de su ¨²nico hijo, Camilo Jos¨¦ Cela Conde, no le deja nada expresamente, al considerarlo 'totalmente pagado' con su mitad del cuadro que el autor de La colmena y su primera mujer, Rosario Conde, le donaron hace a?os. Era un joan mir¨® rasgado de 1972, de 'incalculable valor', tasado entre 600.000 y 800.000 euros. Las ¨²ltimas voluntades del autor abren la puerta a una posible larga lista de pleitos.
El 17 de julio de 1991, en Padr¨®n (A Coru?a), once a?os antes de su muerte, en enero de 2002, el premio Nobel firm¨® sus ¨²ltimas disposiciones testamentarias, en las que consta que cede a la Fundaci¨®n Cela de Iria Flavia, localidad perteneciente al Ayuntamiento de Padr¨®n (A Coru?a), los manuscritos y libros depositados en su domicilio, que entonces se encontraba en El Encinar (Guadalajara), aunque posteriormente el matrimonio Cela traslad¨® su residencia al barrio de Puerta de Hierro, en Madrid.
Cela no deshered¨® jur¨ªdicamente a su hijo -que posee un tercio inevitable, la parte leg¨ªtima, y ser¨¢ marqu¨¦s de Iria Flavia-, pero, al apartarlo t¨¦cnicamente del reparto de hecho del legado, abre la puerta a una larga negociaci¨®n o pleitos y a la evaluaci¨®n de la masa de la herencia final y el control de los derechos de autor e imagen cultural del escritor.
Dominio total
El premio Nobel de Literatura us¨® las f¨®rmulas habituales al 'instituir' a su c¨®nyuge, Marina Casta?o, 'leg¨ªtima heredera' de sus bienes, con dominio total sobre el tercio correspondiente a la libre disposici¨®n y usufructo del resto no atribuible al hijo. La ¨²nica nieta, Camila Cela Marty, de 12 a?os, que ya hab¨ªa nacido al testar su abuelo, no es aludida en el testamento.
El padre considera a su descendiente Cela Conde leg¨ªtimo heredero, pero no le deja nada en este testamento al entender que 'el valor incalculable [del mir¨®] da por totalmente pagada la herencia del testador'. Camilo Jos¨¦ Cela intent¨® en 1995 recuperar su parte de la obra al atribuir al hijo un comportamiento ingrato, tesis rechazada por los jueces. El ¨²nico hijo recibi¨® la obra como regalo de su padre y de su madre, Rosario Conde, al romperse el matrimonio tras 45 a?os de convivencia y despu¨¦s de que se repartieran el patrimonio y la sociedad de gananciales.
El autor de Oficio de tinieblas 5 dispuso ser enterrado en el cementerio anexo a su casa natal de Santa Mar¨ªa de Padr¨®n y orden¨® que sus restos, nunca y bajo ning¨²n motivo, 'fueran tocados o trasladados a otro sitio'. Ayer, EL PA?S tuvo conocimiento de las ¨²ltimas voluntades legales del Nobel a trav¨¦s de los representantes de su hijo, que fueron registradas protocolariamente ante el notario Le¨®n G¨®mez. Cela encabez¨® el documento con una invocaci¨®n respetuosa a los Reyes y nombr¨® tres repartidores contadores, fedatarios u hombres de confianza del testador: Dar¨ªo Villanueva, rector de la Universidad de Santiago de Compostela; Angel Rodr¨ªguez, vinculado al BBV, y Jes¨²s Villamor, alcalde de Padr¨®n, que tienen un papel reglado de funciones y mandato. Villamor se enter¨® ayer por este peri¨®dico de que Cela lo nombra en su testamento. Fue toda una sorpresa para el alcalde de Padr¨®n, a quien el escritor nunca le hab¨ªa adelantado nada. El alcalde confes¨® que no sabe bien en qu¨¦ consiste su papel como depositario-repartidor. 'En todo caso, si tengo que intervenir, tratar¨¦ de que se respete su voluntad', afirm¨® quien dice mantener buenas relaciones tanto con el hijo de Cela como con su segunda esposa, informa Xos¨¦ Hermida.
Tras efectuarse el acto de apertura del ¨²ltimo testamento de Cela, no se ha de descartar, aunque se supone improbable, una hipot¨¦tica exhibici¨®n o hallazgo de un testamento ol¨®grafo, posterior al notarial, y que deber¨ªa ser obra completamente manuscrita por Cela.
Sin comentarios
El hijo del Nobel y su portavoz, el letrado Miquel Capell¨¤, evitaron hacer comentarios o valoraciones sobre el contenido del testamento -y su trascenden-cia-, una copia del cual retir¨® ayer una persona en nombre del legitimario. Cela Conde, que se encuentra fuera de Espa?a, no quiso aventurar tampoco cu¨¢l ser¨¢ la estrategia personal o jur¨ªdica. Su entorno consider¨® el asunto 'previsible', pero valor¨® como moralmente positivo el que no apareciese expl¨ªcitamente desheredado por ingratitud o injuria.
'Ahora comienza un largo proceso para la reconstrucci¨®n de la masa de la herencia', explicaron conocedores de situaciones parejas sobre reparto de herencias y valoraciones de la masa patrimonial y de derechos sujetos a reparto. Unas posibles negociaciones fueron insinuadas -y m¨¢s tarde negadas- por la viuda heredera, Marina Casta?o, al hijo Camilo Jos¨¦ Cela Conde, ante el f¨¦retro del escritor. En adelante, es factible que se abra un pleito civil para 'la reconstrucci¨®n' del legado y el reparto del mismo.
Babelia
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