EE UU decide procesar a Andersen por obstrucci¨®n a la justicia en el 'caso Enron'

Arthur Andersen, la quinta auditora del mundo, se enfrenta a su desaparici¨®n tras haber sido procesada ayer formalmente por el Gobierno de EE UU en el caso Enron. La acusaci¨®n sostiene que la firma obstruy¨® la acci¨®n de la justicia al ordenar a sus empleados la destrucci¨®n de documentos relacionados con las investigaciones sobre la quiebra del gigante energ¨¦tico, uno de sus clientes. El procesamiento, que, seg¨²n Andersen, supone su 'pena de muerte', se produjo horas despu¨¦s de que la firma plantara cara al Departamento de Justicia al no responder al ultim¨¢tum de que admitiera su culpabilidad.

El auto de procesamiento de ocho p¨¢ginas dictado ayer supone el primer avance significativo en las investigaciones iniciadas por las autoridades estadounidenses hace m¨¢s de dos meses sobre la quiebra de Enron. Adem¨¢s, deja en el aire el futuro de Andersen. Ante el riesgo de desaparici¨®n de la firma se suspendieron, aunque antes de conocerse su inculpaci¨®n, las negociaciones para su compra que la firma manten¨ªa con dos auditoras.

Andersen envi¨® a ¨²ltima hora del mi¨¦rcoles una carta a Michael Chertoff, jefe de la secci¨®n de investigaci¨®n criminal de Justicia, en la que manten¨ªa que 'no hay base para que el Gobierno tome la medida sin precedentes de presentar cargos criminales contra Arthur Andersen, cuando las pruebas de actuaci¨®n delictiva por parte de la compa?¨ªa como instituci¨®n son tan d¨¦biles'.

'Creemos firmemente que constituir¨ªa un grave abuso de poder gubernamental presentar una demanda criminal contra la compa?¨ªa en este caso', se?ala la carta, donde se subraya que est¨¢ fuera de duda que tal actuaci¨®n 'pone en grave peligro la supervivencia de Arthur Andersen'.

La auditora y el Departamento de Justicia llevaban semanas negociando infructuosamente ante la negativa de Andersen a reconocer la negligencia delictiva de toda la compa?¨ªa en la destrucci¨®n de documentos emprendida mientras se abr¨ªa una investigaci¨®n oficial sobre lo ocurrido en Enron, empresa que quebr¨® por sorpresa a pesar de Andersen aval¨® en todo momento la buena salud financiera de la compa?¨ªa. 'Esa destrucci¨®n ocurri¨® sin el conocimiento, y mucho menos el consentimiento de los altos responsables de la sociedad', reitera p¨²blicamente la misiva de los abogados de Andersen.

El Departamento de Justicia no est¨¢ de acuerdo. El auto de procesamiento se?ala que fue la auditora la que orden¨® a sus empleados que hicieran desaperecer 'toneladas' de papeles.

Las relaciones entre ambas partes se hab¨ªan agriado en los ¨²ltimos d¨ªas. Andersen alega que los investigadores se han negado a negociar cara a cara y que todas los intercambios han sido por tel¨¦fono, correo electr¨®nico o fax. Chertoff, con amplia experiencia en la lucha contra la mafia, mantiene que Andersen tiene responsabilidad en lo ocurrido.

Acci¨®n letal

Andersen reprocha a los investigadores de Chertoff un celo da?ino en sus pesquisas y ha ofrecido v¨ªa alternativas de sanci¨®n 'que permitir¨ªan al Gobierno alcanzar su objetivo sin da?ar a inocentes'. El procesamiento de Andersen, que la propia auditora considera letal para la compa?¨ªa, obligar¨¢ a intervenir de inmediato a la SEC (organismo supervisor de los mercados burs¨¢tiles estadounidenses), cuya investigaci¨®n qued¨® paralizada a la espera de lo que dicidiera Justicia. Su primera medida deber¨ªa ser privar a Andersen de su derecho a auditar compa?¨ªas que cotizan en Bolsa. La firma de Chicago audita a unas 2.300 de ellas, en torno al 20% de las que cotizan en Wall Street, muchas de las cuales cierran en estas semanas las cuentas correspondientes al ejercicio que concluy¨® el 31 de diciembre.

La descalificaci¨®n de Andersen crear¨ªa una situaci¨®n ca¨®tica, al no poder las compa?¨ªas afectadas presentar su datos en tiempo y forma. La SEC ya est¨¢ negociando un plan de emergencia con las competidoras de Andersen para atender a esos clientes.

La suspensi¨®n de pagos de Enron, la mayor de la historia, es objeto de investigaci¨®n en diez comit¨¦s del Congreso de EE UU, adem¨¢s de pesquisas por parte de Justicia, Trabajo y la SEC. Joseph Berardino, el consejero delegado de Andersen, ha admitido que su compa?¨ªa cometi¨® errores en la auditor¨ªa de la firma tejana, pero atribuye la responsabilidad de lo ocurrido a los gestores de Enron, que ocultaron informaci¨®n cr¨ªtica a los auditores.

El caso Enron ha pasado factura en la imagen de Andersen, que se mueve en un negocio en el que la credibilidad es uno de los elementos m¨¢s importantes. La fuga de clientes era inevitable y en las ¨²ltimas semanas unos 30 clientes, entre ellos Merck y Delta Air Lines, han prescindido de los servicios de Andersen. Ayer se supo que Valero Energy, uno de los mayores 20 clientes de la auditora, rescindi¨® su contrato, al igual que FedEx.