La NASA detecta indicios de agua helada bajo la superficie Marte
La Mars Odissey ha localizado hidr¨®geno bajo la superficie del planeta rojo
La nave de la NASA Mars Odissey que desde el a?o pasado est¨¢ en la ¨®rbita de Marte tomando datos e im¨¢genes del planeta rojo, ha enviado a la tierra nuevos indicios de que podr¨ªa haber agua en forma de hielo all¨ª bajo la superficie. Los datos, seg¨²n inform¨® ayer la cadena BBC, apoyar¨ªan anteriores observaciones que algunos cient¨ªficos hab¨ªan se?alado como posibles indicadores de la presencia de agua y dar¨ªan nuevas pistas hacia la soluci¨®n del misterio que intriga a los cient¨ªficos desde hace tiempo: si hubo agua en Marte en el pasado, como parece muy probable, ?d¨®nde ha ido a parar?
La Mars Odyssey lleva a bordo, entre otros instrumentos, un espectr¨®metro de rayos gamma para analizar la composici¨®n del suelo, capaz de identificar la firma del hidr¨®geno superficial, hasta un metro de profundidad. El an¨¢lisis de los datos recibidos, seg¨²n la BBC, induce a los cient¨ªficos a creer que el hidr¨®geno est¨¢ encerrado en cristales de hielo y podr¨ªa tratarse de grandes cantidades. Los cient¨ªficos van a dar conocer los detalles de la investigaci¨®n el pr¨®ximo viernes en la revista Science y se presentar¨¢ en rueda de prensa el jueves, seg¨²n la BBC.
Un instrumento del mismo tipo que el utilizado en esta ocasi¨®n en la Mars Odissey, iba a bordo de la nave Lunar Prospector y proporci¨®n¨® datos similares en 1998 a partir de los cuales los investigadores barajaron la hip¨®tesis de que hubiera agua en los polos de la Luna, aunque no se consiguieran pruebas concluyentes al respecto.
El hielo en Marte podr¨ªa estar bajo la superficie, a poca profundidad -entre 30 y 60 cent¨ªmetros- y en la franja del planeta comprendida entre los casquetes polares y los 60 grados de latitud, y cubierta por una capa fina y seca de materia pobre en hidr¨®geno.
La Mars Odissey hab¨ªa ya registrado indicios de la presencia de hielo en el subsuelo del planeta rojo, tal y como anunciaron los cient¨ªficos el pasado mes de marzo, y ahora la nueva informaci¨®n apoyar¨ªa las primeras hip¨®tesis.
Los espectr¨®metros de la nave registran los neutrones y rayos gamma generados cuando los rayos c¨®smicos bombardean el planeta interaccionando con la materia de la capa m¨¢s superficial y los cient¨ªficos buscan en esa se?al la huella del hidr¨®geno. Este tipo de experimento permite estimar la cantidad de hidr¨®geno en la capa superficial de Marte, que podr¨ªa estar combinado formando agua.
Cuencas fluviales
Ese planeta vecino es ahora un mundo extrem¨¢damente ¨¢rido y barrido por los vientos. Pero los cient¨ªficos, a partir de las im¨¢genes y datos que han ido obteniendo, creen comprender que en el pasado hubo all¨ª grandes cantidades de agua en cuencas fluviales e incluso oc¨¦anos, cuyas huellas podr¨ªan expliar la peculiar orograf¨ªa observada. La cuesti¨®n, si esta hip¨®tesis fuera correcta, es qu¨¦ pas¨® con el agua, con enormes cantidades de agua. Los expertos est¨¢n casi convencidos, de que hay agua encerrada en el casquete polar septentrional, junto con di¨®xido de carbono helado.
Los investigadores siguen calibrando otro instrumento de la Mars Odissey, el Themis, un sistema de detecci¨®n de emisi¨®n t¨¦rmica, que ha enviado unas im¨¢genes en las que podr¨ªa haber rasgos de unas crestas que hab¨ªan sido observadas con anterioridad por otra nave de la NASA, la Mars Global Surveyor, tambi¨¦n en ¨®rbita all¨ª, que algunos cient¨ªficos hab¨ªan interpretado como huellas de flujos de agua, seg¨²n informa Space.com. Otros investigadores han se?alado que podr¨ªa tratarse de otro flu¨ªdo, como di¨®xido de carbono. Incluso podr¨ªa tratarse sencillaemtne de formacines como dunas creadas por los intensos vientos marcianos, como las que se forman en los desiertos terrestres.
Lo cierto es que la NASA tiene en marcha un poderoso programa de exploraci¨®n de Marte a largo plazo con un especial hincapi¨¦ en la b¨²squeda de agua y, en ¨²ltima instancia de alguna forma de vida all¨ª. El ambicioso programa de exploraci¨®n sistem¨¢tica arranc¨® con la llegada, en 1997, de la c¨¦lebre sonda de descenso Pathfinder y la puesta en ¨®rbita all¨ª de la Mars Global Surveyor. Desde entonces, la agencia espacial estadounidense aprovecha cada oportunidad de lanzamiento - aproximadamente cada dos a?os, en que la posici¨®n de los planetas permite un viaje eficaz en tiempo y energ¨ªa- para ir enviando sus flotillas de naves de exploraci¨®n. La segunda oleada de este programa acab¨® en un estrepitoso fracaso al perderse las dos naves antes de empezar a funcionar all¨ª. Sin embargo, la Mars Odissey, est¨¢ funcionando correctamente.
El plan esta estructurado de forma que los conocimientos que se van adquiriendo sirven para afinar y precisar mejor los objetivos de las misiones siguientes. As¨ª, los ¨²ltimos datos deben servir para delimitar mejor el territorio a explorar, identificar regiones y entornos prometedores, as¨ª como las necesidades de investigaci¨®n del futuro pr¨®ximo.
Como el plan de exploraci¨®n contempla naves orbitales y m¨®dulos de descenso, con diferentes instrumentos, poco a poco se van acumulando datos cada vez m¨¢s centrados en la b¨²squeda de agua. De cualquier forma con los instrumentos de las naves que actualmente est¨¢n operando all¨ª, dificilmente pueden obtener los cient¨ªficos pruebas directas, definitivas y concluyentes de la existencia de agua en Marte. El plan de mandar una misi¨®n para recoger muestras del planeta rojo y traerlas a la Tierra para su an¨¢lisis exhaustivo en los laboratorios, ha sido aplazado por la NASA hasta la pr¨®xima d¨¦cada a la vista de las dificultades t¨¦cnicas que encierra.
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