La UE y Jap¨®n rechazan el plan de EE UU para reducir los aranceles agr¨ªcolas al 25%

La UE y Jap¨®n dieron ayer un portazo a la propuesta estadounidense para reducir del 62% al 25% de media los aranceles a los productos agr¨ªcolas en un plazo de cinco a?os. El plan fue presentado por EE UU, con el apoyo de Canad¨¢ y Australia, en la reuni¨®n que mantuvieron ayer los ministros de Agricultura de las cinco potencias en la ciudad japonesa de Nara. Representantes de Bruselas dejaron entrever que, con su jugada, Washington trata de distraer la atenci¨®n sobre las multimillonarias subvenciones que EE UU ha estado dando a sus agricultores.

EE UU ha abierto una dura batalla con su propuesta para hacer una profunda reforma del sector agr¨ªcola, en un periodo de cinco a?os, que incluye la eliminaci¨®n de los subsidios a la exportaci¨®n y una reducci¨®n sustancial de los aranceles y medidas de apoyo interno. El comisario europeo de Agricultura y Pesca, Franz Fischler, reaccion¨® de inmediato y manifest¨® su 'posici¨®n inicial de rechazo', aunque a?adi¨® que Bruselas a¨²n est¨¢ examinando la iniciativa de EE UU con detalle. En el mismo sentido actu¨® el ministro de Agricultura japon¨¦s, Tsutomu Takebe.

Fischler critic¨® que esas propuestas 'exijan mayor esfuerzo al resto de los pa¨ªses que a EE UU' y se manifest¨® extra?ado de que el Gobierno estadounidense haga estas propuestas, 'a la vez que evita cualquier compromiso para reducir en su pa¨ªs los apoyos a la exportaci¨®n, que distorsionan el mercado o para disminuir el abuso de ayudas internas practicado por EEUU'.

Intereses

El comisario a?adi¨® que Washington 'quiere reinventar el c¨¢lculo de las ayudas nacionales para adaptarlas a su inter¨¦s'. 'Es duro comprobar c¨®mo las nuevas propuestas cuadran con la Farm Bill [ley agr¨ªcola estadounidense que aumenta los apoyos a los agricultores de este pa¨ªs], que va hacia una mayor distorsi¨®n del mercado'. La Comisi¨®n Europea asegura que en la propuesta 'hay una falta de preocupaci¨®n de EE UU por los intereses de los pa¨ªses en desarrollo y, adem¨¢s, no refleja los aspectos agr¨ªcolas no comerciales'.

Washington arremeti¨® contra la UE y la acus¨® de haber dedicado m¨¢s de 2.000 millones de d¨®lares a subsidios a las exportaciones agr¨ªcolas en 2000 frente a tan s¨®lo 20 millones que desembols¨® el Gobierno estadounidense. La Casa Blanca se queja de que, aunque los aranceles se han reducido en todo el mundo en los ¨²ltimos a?os, los niveles m¨¢ximos permitidos por la Organizaci¨®n Mundial de Comercio (OMC) siguen siendo muy altos: el arancel mundial medio en agricultura es de un 62%, mientras que en EE UU la media es de un 12%, seg¨²n el Gobierno.

EE UU ha propuesto utilizar una f¨®rmula de reducci¨®n de aranceles -conocida como la f¨®rmula suiza-, que recortar¨¢ m¨¢s los aranceles m¨¢s elevados que los bajos y garantizar¨¢ que ning¨²n arancel sea superior a un 25% al cabo de los cinco a?os. Esas reducciones se efectuar¨ªan sobre los aranceles que realmente se aplican y no sobre los m¨¢ximos autorizados, seg¨²n Washington.

En cuanto al apoyo interno, EE UU propone simplificar el actual sistema de c¨¢lculo utilizando una f¨®rmula que limite el uso de ese tipo de apoyo siempre y cuando sea distorsionante del comercio a un 5% del valor total de la producci¨®n agr¨ªcola. Washington aboga asimismo por eliminar las empresas de comercio estatales porque abusan de su condici¨®n de monopolio y quiere que se eliminen los privilegios financieros de que disfrutan y forzarlas a un r¨¦gimen de transparencia. En concreto, EE UU argumenta que ese tipo de monopolios estatales, como el Canadian Wheat Board (especializado en el comercio de trigo), se benefician de derechos o privilegios especiales en sus ventas al extranjero. Esos privilegios que pueden crear 'incentivos perversos' para los exportadores y productores que resultan en distorsiones del mercado y pueden constituir adem¨¢s 'subsidios ocultos' a la exportaci¨®n.

Los representantes de Bruselas, sin embargo, se preguntan por qu¨¦ Washington exige a esas empresas estatales una transparencia que no trata de imponer a poderosas multinacionales que se dedican al comercio agr¨ªcola, industrial y financiero, como es el caso del gigante Cargill.

EE UU tambi¨¦n ha propuesto prohibir los impuestos a la exportaci¨®n de productos agr¨ªcolas, aunque se exceptuar¨ªa de esa prohibici¨®n a los pa¨ªses en desarrollo siempre y cuando esos grav¨¢menes sirviesen para generar ingresos del fisco. Actualmente, las reglas de la OMC permiten a los pa¨ªses gravar las exportaciones de ciertos productos agr¨ªcolas con pocas restricciones. Washington arguye que esos grav¨¢menes pueden distorsionar el mercado cuando se aplican en periodos de escasez mundial de determinados productos o se utilizan para limitar las exportaciones de productos b¨¢sicos.