Una pol¨ªtica alternativa
Gobiernos y Parlamentos de todo el mundo estudian medidas de apoyo al 'software' abierto
"El uso de c¨®digos abiertos podr¨ªa fomentar la competencia. No habr¨¢ otro contrato con Microsoft Noruega". El Gobierno n¨®rdico ha dejado de comprar a Microsoft. Otros, como China o Francia, lo han hecho en determinadas ¨¢reas, y al menos seis comunidades aut¨®nomas espa?olas est¨¢n estudi¨¢ndolo. Las empresas de este sector piden algo m¨¢s simple: que no se discrimine el software libre en la Administraci¨®n, donde en ocasiones se exigen sistemas Windows. Microsoft pide lo mismo, pero al rev¨¦s: elegir el mejor software, aunque sea comercial.
Las administraciones buscan ahorrar costes, intercambiar datos y programas y 'alimentar' una industria nacional de 'software'
Seis comunidades aut¨®nomas espa?olas est¨¢n, en este momento, estudiando las implantaciones de soluciones 'abiertas'
La apuesta pol¨ªtica por los sistemas abiertos est¨¢ siendo debatida en todo el mundo, desde China a Estados Unidos, pasando por la UE o Am¨¦rica Latina. "La Administraci¨®n es el sector que m¨¢s dispuesto est¨¢ a escuchar cuando hablamos de Linux", explica C¨¦cile Eguiz¨¢bal, de Sun Ib¨¦rica. ?Por qu¨¦ ese inter¨¦s?
Hay un lado pr¨¢ctico: el dinero que se ahorrar¨ªa el erario p¨²blico si no compra software comercial. La asociaci¨®n Hispalinux asegura que el Estado espa?ol "podr¨ªa ahorrar m¨¢s de 300 millones de euros", una cifra "inflada", seg¨²n Microsoft, que asegura que s¨®lo factura 30 millones de euros a la Administraci¨®n espa?ola -His-palinux aclara que sus cifras incluyen las licencias de todas las empresas-. El Ministerio de Administraciones P¨²blicas o el Consejo de Seguridad Nuclear han optado ya por estas soluciones. Seis comunidades aut¨®nomas, explican diversas fuentes, est¨¢n estudiando hacerlo.
No es s¨®lo una cuesti¨®n de ahorro. "En los a?os ochenta, el CSI [Consejo Superior de Infor-m¨¢tica] formul¨® una pol¨ªtica basada en est¨¢ndares abiertos", explica V¨ªctor Izquierdo, subdirector general de Empresas de la Sociedad de la Informaci¨®n. "Entonces s¨®lo se pensaba en el hardware [equipos]. El pr¨®ximo paso es el software", explica. Se trata de que los Estados no dependan de la tecnolog¨ªa de determinadas empresas que trabajan con c¨®digos cerrados, algo que preocupa especialmente a departamentos relacionados con la seguridad. Se trata, adem¨¢s, de que las administraciones puedan compartir datos, servicios y programas. Seg¨²n un estudio del Ministerio de Ciencia y Tecnolog¨ªa, las dos principales razones para utilizar software abierto en las administraciones de la UE son interoperabilidad y seguridad. Microsoft destaca que, en todo caso, el c¨®digo de sus programas est¨¢ disponible para los Gobiernos que quieran acceder a ¨¦l.
Una tercera pata del inter¨¦s de las administraciones se centra en la posibilidad de crear una industria del software. Mientras el mercado comercial est¨¢ abrumadoramente en manos de empresas de EE UU, algunas de la mayores iniciativas del software libre han salido de pa¨ªses como Checoslovaquia o M¨¦xico.
Las compa?¨ªas de software libre est¨¢n m¨¢s preocupadas, en todo caso, por un problema pr¨¢ctico. Los concursos de la Administraci¨®n exigen a menudo productos Windows, y las web de algunos servicios p¨²blicos son inaccesibles desde navegadores distintos al Explorer de Microsoft. "Nuestra aspiraci¨®n es que en las compras p¨²blicas no se discrimine el software libre", explica V¨ªctor Izquierdo.
Parlamentos de todo el mundo han dado un paso m¨¢s, estudiando iniciativas de apoyo al software libre que, en el caso de Espa?a fueron rechazadas. Las asociaciones de software libre y Microsoft siguen reuni¨¦ndose con los partidos espa?oles para tratar de convencerles, unos, de que deben "discriminar positivamente" el software libre, y de que las administraciones tienen que ser "neutrales" a la tecnolog¨ªa, los otros.
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