El Villarreal obtiene su recompensa

Fue mejor que el Madrid. Mejor que el Depor. Y mejor que el Bar?a. Pero el Villarreal s¨®lo ha ganado uno de estos tres partidos. El de ayer. Es el precio que paga por su falta de contundencia. Pero ayer obtuvo una merecida recompensa ante un Bar?a chiquito, muy desinflado, que hizo aguas en defensa y en ataque, con esa falta de personalidad que le caracteriz¨® durante gran parte del campeonato. Fue la primera derrota desde la llegada de Radomir Antic al club azulgrana. Muy merecida, eso s¨ª. El Villarreal fabric¨® media docena de ocasiones clar¨ªsimas de gol. El Bar?a fue un colador por su banda izquierda y s¨®lo la vigorosa entrada de Gerard acerc¨® al Barcelona al empate. Bien es cierto que Reina estuvo magistral durante la primera parte en sendas paradas a Riquelme y a Saviola.

Benito Floro junt¨® a dos de sus balines por el extremo derecho (Belletti y Guayre) y les mand¨® correr. Lo m¨¢s r¨¢pido posible. Hasta la l¨ªnea de fondo. Sin mirar atr¨¢s. Sab¨ªa Floro que ambos eran much¨ªsimo m¨¢s veloces que los dos hombres que Antic hab¨ªa colocado en ese lado (Sor¨ªn y Riquelme). Y as¨ª fue c¨®mo el Villarreal puso en evidencia la costura izquierda del Bar?a, que se romp¨ªa en mil pedazos. Bastaba que Guayre o Belletti se lanzaran la pelota 15 metros por delante para decirles adi¨®s a sus marcadores: ciaio, ciao, terreno despejado. Sus centros atr¨¢s, sin embargo, no hallaron rematador.

Y ah¨ª reside el grand¨ªsimo problema del Villarreal: le falta gol. Juega de sobra para merecerlo. Triangula de cine. Sobre todo cuando entran V¨ªctor y Jorge L¨®pez en contacto. Jugador grande este Jorge L¨®pez al que el Villarreal se le queda evidentemente peque?o. Pero llegan al ¨¢rea y nada. Ni Palermo, ayer de reserva, ni el mexicano De Nigris cumplen su cometido. Mientras De Nigris perd¨ªa en todos los saltos de cabeza con sus marcadores respectivos, Palermo, con los cabellos recortados al estilo romano, com¨ªa pipas en el banquillo. Triste destino para el que fuera el ¨ªdolo de la hinchada del equipo de Boca Juniors, y que en Espa?a ha estado muy lejos del nivel goleador y de juego que se esperaba de ¨¦l cuando el equipo castellonense le contrat¨®.

A pesar de estar mal acompa?ado por Mendieta, Xavi supo lanzar convenientemente a sus dos puntas: Kluivert y Saviola. Fue una media hora aceptable del equipo de Antic. Se top¨®, sin embargo, con un portero en vena. El portero ex barcelonista Reina impidi¨® el gol de Riquelme con una estirada enorme, sacando con la manopla una pelota rasa y potente junto a las astillas de su palo derecho. El mismo hijo del que fuera portero barcelonista en los a?os setenta volvi¨® a ser decisivo poco despu¨¦s, cuando salv¨® con el pecho un tiro en el mano a mano mantenido con el rapid¨ªsimo Saviola, lanzado a su vez por la visi¨®n de juego de Riquelme.

Para tratar de tapar el agujero de la primera parte, Antic rectific¨® tras el descanso. Desplaz¨® a la izquierda a Mendieta y a Riquelme al centro, ah¨ª donde le gusta al argentino. Pero lejos de mejorar, jug¨® mucho peor y fue sustituido por Gerard.

La defensa azulgrana segu¨ªa sin dar muestras de seguridad. Belletti continu¨® alcanzado la l¨ªnea de fondo y el restablecido Andersson acus¨® la l¨®gica falta de ritmo. De modo que Puyol, con esa m¨¢scara en la cara para protegerse los p¨®mulos da?ados que recuerda al hombre elefante de la pel¨ªcula de Peter Bogdanovic, hubo de multiplicarse. Estuvo plet¨®rico, como de costumbre. Y acudi¨® al rescate para limpiar un bal¨®n en la l¨ªnea de gol despu¨¦s de que De Nigris hubiera regateado ya a Bonano. El portero argentino salvar¨ªa despu¨¦s dos goles cantados de V¨ªctor, un uno contra uno y un cabezazo junto al palo.

Entre los ol¨¦s el p¨²blico, el duro central Ballesteros driblaba adversarios ante la incredulidad de Antic, espantado ante la superioridad local. Despu¨¦s s¨ª, despu¨¦s Ballesteros le atiz¨® una patada a Saviola para conservar, se supone, su reputaci¨®n. La entrada en el campo de Farin¨®s no hizo sino darle energ¨ªa y pase al centro del campo del Villarreal, que tambi¨¦n se impuso en este terreno.

Fruto de la impotencia azulgrana lleg¨® ese empuj¨®n de Sor¨ªn a De Nigris, que propici¨® la ¨²nica manera por la que pod¨ªa marcar el conjunto de Floro: de penalti. Jorge L¨®pez anot¨® su cuarto penalti de la temporada y su quinto gol. Nada pone nervioso a L¨®pez, por mucho que Bonano lo intentara march¨¢ndose a la luna del ¨¢rea antes del lanzamiento o tocando el bal¨®n al volver a su porter¨ªa.

Antic recurri¨® a Gerard para tratar de recuperar el ¨¢nimo tan deca¨ªdo. Y s¨ª, con Gerard fue otra cosa. El centrocampista catal¨¢n le dio m¨¢s llegada y profundidad. Sirvi¨® un excelente pase a Overmars que ¨¦ste, de l¨¢nguido disparo, como de costumbre, permiti¨® la lucidez de Reina. La expulsi¨®n de Sor¨ªn, entrando por detr¨¢s a Belletti a pesar de tener ya una amarilla anterior, no acab¨® de cerrar el encuentro. El Villarreal hizo mal el fuera de juego tras una falta de Xavi y Puyol, rodeado de media docena de sus compa?eros, sin ning¨²n rival a la vista m¨¢s que Reina, cabece¨® mal con la coronilla. Ah¨ª se termin¨® el Bar?a, que ya vio como el contraataque del Villarreal le llegaba por oleadas. En una de ellas, Belletti, que fue una pesadilla durante toda la noche, volvi¨® a penetrar y Rochemback le hizo el segundopenalti del partido. Calleja, que acababa de salir y que hab¨ªa perdido recientemente a su madre, decidi¨® lanzarlo para homenajear a su madre. Y marc¨®.