Hezbol¨¢ asesta el golpe m¨¢s duro a Israel desde el comienzo de los enfrentamientos

Israel sufri¨® ayer el varapalo m¨¢s severo desde que comenz¨® la guerra con Hezbol¨¢ el 12 de julio. El Ej¨¦rcito confirm¨® la muerte en Bint Yebel, basti¨®n de la milicia chi¨ª en el sur de L¨ªbano, de ocho soldados, que dos cadenas de televisi¨®n ¨¢rabes elevan a 13. Otro soldado muri¨® en la cercana Marun al Ras. La pretensi¨®n de las Fuerzas Armadas de crear una zona de seguridad de dos kil¨®metros a lo largo de la frontera topa con una feroz resistencia de la guerrilla islamista. El Ej¨¦rcito ha anunciado la toma de dos poblaciones, pero desde esas mismas localidades no dejan de llegar soldados heridos, 27 ayer.

La batalla de Bint Yebel es la m¨¢s cruenta desde que comenz¨® la guerra. Los milicianos de Hezbol¨¢ tendieron una emboscada a los uniformados jud¨ªos apareciendo desde t¨²neles y b¨²nkeres excavados durante los seis a?os en que han gozado de libertad de movimientos en la regi¨®n fronteriza. Los soldados debieron emplearse a fondo durante cinco horas para rescatar a decenas de heridos, que llegaron por la tarde en helic¨®pteros al Hospital Ramban de Haifa. El Ej¨¦rcito calcula en 15 los milicianos de Hezbol¨¢ que murieron en los choques, seg¨²n el diario Haaretz. Muchos expertos israel¨ªes comienzan a criticar el modo en que las Fuerzas Armadas desarrollan unas operaciones que no van a detenerse -sigue el llamamiento de reservistas- y lamentan fallos en la informaci¨®n sobre las t¨¢cticas que est¨¢ empleando Hezbol¨¢. Desde que se desataron las hostilidades, 51 israel¨ªes, civiles y militares, han fallecido, por 430 libaneses.

En Kiryat Shmona y en Metula, en el extremo norte de Israel, a pocos kil¨®metros del campo de batalla, la artiller¨ªa se empleaba a fondo. Dispararon cientos de proyectiles sobre el sur de L¨ªbano, pr¨¢cticamente desierto de civiles. La aviaci¨®n tambi¨¦n atac¨® la sede central en Beirut de Amal, el partido chi¨ª cuyo l¨ªder, Nabih Berri, a su vez presidente del Parlamento liban¨¦s, se entrevist¨® con la secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, el lunes. Todo apunta, a tenor del fracaso de los diplom¨¢ticos, que la situaci¨®n va a empantanarse. As¨ª lo afirm¨® un general israel¨ª: "La ofensiva durar¨¢ varias semanas".

El objetivo de Israel se fija cada vez con mayor precisi¨®n. El primer ministro, Ehud Olmert, asegur¨® en el Parlamento que el Ej¨¦rcito crear¨¢ una "zona de seguridad de dos kil¨®metros al norte de la frontera". "Ese espacio", a?adi¨®, "impedir¨¢ el contacto con las patrullas militares". Se evitar¨ªa as¨ª que m¨¢s soldados israel¨ªes sean capturados por la guerrilla libanesa. Aniquilar a Hezbol¨¢ parece una meta ya olvidada. Si acaso, persiguen matar a Hasan Nasral¨¢, l¨ªder de la milicia chi¨ª. Sin acabar con su vida, dif¨ªcilmente podr¨¢n cantar victoria. Tambi¨¦n Hezbol¨¢, que ha admitido su sorpresa por la contundencia de la respuesta israel¨ª tras la captura de dos soldados jud¨ªos a mediados de mes, aumenta el grado de sus amenazas. Si ayer la milicia lanz¨® m¨¢s de 130 Katiusha sobre el norte de Israel, causando docenas de heridos, Nasral¨¢ asegur¨® que se ha marcado nuevos objetivos: "Lanzar sus cohetes sobre ciudades al sur de Haifa".