Sin acuerdo para la uni¨®n

En Galicia, la caja peque?a (Caixanova, de Vigo) esquiva por el momento una fusi¨®n pretendida por la grande, Caixa Galicia, con sede en A Coru?a. El Gobierno regional de Alberto N¨²?ez Feij¨®o (PP), que lleva meses pidiendo tiempo y prudencia para tomar una decisi¨®n, se inclina desde el jueves por la integraci¨®n de ambas y se ha dado 10 d¨ªas de plazo para llegar a un acuerdo consensuado. Teme que con las cajas ocurra algo parecido a la p¨¦rdida de galleguidad de Uni¨®n Fenosa, hoy en manos de Gas Natural.

Ni de lejos lo tendr¨¢ f¨¢cil. El escollo fundamental est¨¢ en la negativa casi visceral del presidente de Caixanova, Julio Fern¨¢ndez Gayoso, que a sus 78 a?os cumplir¨¢ pronto tres en el cargo tras 41 al frente de la direcci¨®n general. La entidad piensa que unir sus destinos con Caixa Galicia es la peor de las soluciones por el solapamiento de oficinas (sumar¨ªan 1.425) y empleados (un total de 8.678). Juntas tendr¨ªan m¨¢s de un tercio de todo el mercado en la comunidad aut¨®noma. En sus planes est¨¢ llegar a un acuerdo mediante el Sistema Institucional de Protecci¨®n (SIP) con Cajastur, aunque sin cerrar puertas con otras como Caja Burgos.

Al norte, Jos¨¦ Luis M¨¦ndez que lleva 28 a?os como director de Caixa Galicia, no da por perdida la batalla. Los tambores de Caja Madrid, que aspira a reforzarse con una fusi¨®n con esta entidad y la CAM, suenan cada vez m¨¢s fuertes en los o¨ªdos del PP gallego, que se resiste a perder, como quiere Crist¨®bal Montoro, su mayor activo.