Seis a?os de internamiento para el parricida de Tortosa
El menor mat¨® a cuchilladas a su madre y a su padrastro
El Juzgado de Menores de Tarragona ha condenado a seis a?os de internamiento y a otros tres de libertad vigilada a un joven de 16 a?os por asesinar a su madre y a su padrastro en su domicilio de Tortosa (Baix Ebre). La relaci¨®n tormentosa del menor con la pareja de su madre, del que detestaba que ejerciera de padrastro, propici¨® el doble crimen, subraya la sentencia. "Ese hombre no es mi padre, pero siempre me insultaba y me menospreciaba", justific¨® el acusado.
El menor, de nacionalidad china, se arm¨® con un cuchillo de cocina y cometi¨® el asesinato tras una refriega que culmin¨® con las 31 pu?aladas que le propin¨® al padrastro, de 34 a?os. La mujer, de 42, se interpuso entre ambos para frenar la agresi¨®n y recibi¨® una sola cuchillada que result¨® mortal, seg¨²n el escrito del juez.
El joven, de 16 a?os, asest¨® 31 pu?aladas al hombre, con quien se llevaba mal
La madre recibi¨® una herida mortal al tratar de defender a su pareja
La fiscal¨ªa y la acusaci¨®n particular, que hab¨ªan solicitado una pena de ocho a?os de internamiento y cuatro de libertad vigilada, apelar¨¢n la sentencia ante la Audiencia Provincial dada la gravedad de los delitos y el "convulso" estado psicol¨®gico del joven.
Los hechos ocurrieron a finales del pasado octubre en el reducido domicilio de Tortosa donde resid¨ªan el parricida, las v¨ªctimas y, al menos, otras dos personas, todos ellos de origen chino. La llegada del joven a Espa?a, que tom¨® el comedor del inmueble como habitaci¨®n por falta de espacio, gener¨® conflictos desde el primer d¨ªa, seg¨²n relataron los testigos durante la vista. Las broncas, golpes y portazos se sucedieron diariamente hasta que en la noche del doble parricidio se a?adieron gritos "m¨¢s fuertes de lo normal y discusiones entre el joven y el padrastro", explicaron los testigos a la polic¨ªa.
El menor, de hecho, se hab¨ªa negado a vivir en Espa?a para evitar convivir con la pareja de su madre, pero esta se empe?¨® en ir a recogerle personalmente al pa¨ªs asi¨¢tico en marzo del a?o pasado. Siete meses despu¨¦s, la tensi¨®n acumulada precipit¨® la tragedia. "Si no le hago nada, alg¨²n d¨ªa me matar¨¢ ¨¦l a m¨ª", asegur¨® el menor el d¨ªa en que cometi¨® el asesinato, seg¨²n testific¨® un vecino.
El juez considera probado que el joven asesin¨® a su padrastro: durante la en¨¦sima discusi¨®n entre su madre y la pareja de esta, el menor se arm¨® con un cuchillo y aguard¨® en el comedor -de hecho, su habitaci¨®n- a que apareciera la v¨ªctima para sorprenderla y darle muerte, sin contar con la actitud mediadora de su madre, a la que mat¨® de forma involuntaria. El condenado, por su parte, defendi¨® otra versi¨®n del suceso: asegur¨® que el padrastro quiso acuchillarle y asesin¨® a la madre cuando esta se interpuso para salvar a su hijo. El joven, seg¨²n su versi¨®n, forceje¨® entonces con su padrastro hasta que logr¨® desarmarlo y le clav¨® varias decenas de cuchilladas, seg¨²n la declaraci¨®n del menor a la que el magistrado no dio credibilidad.
El informe policial destaca que, tras el crimen, los agentes hallaron al joven en actitud tranquila, tumbado en el suelo y abrazado a las faldas de la madre, ya sin vida, destaca el informe policial. Luego, sin mediar palabra, alz¨® los brazos para que los agentes lo esposaran.
Los fallecidos trabajaban desde hace a?os en una empresa c¨¢rnica de la zona junto a los otros adultos que conviv¨ªan en el domicilio. Pero su integraci¨®n en la ciudad era m¨ªnima y ni hablaban ni entend¨ªan el castellano ni el catal¨¢n, precisan fuentes municipales. Los agentes consideraron que el crimen podr¨ªa haber sido motivado por posibles malos tratos del asesinado hacia el menor, pero esa v¨ªa de investigaci¨®n qued¨® descartada por la inexistencia de denuncias previas en ese sentido, dato de escasa significaci¨®n en una familia que los vecinos calificaron de "herm¨¦tica".
Estos insistieron en que los golpes y las discusiones provenientes del inmueble de los fallecidos se repet¨ªan "constantemente", pero no pudieron precisar m¨¢s porque apenas hablaban con la familia ni con el resto de los inquilinos de la casa.
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