La Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n investiga el entramado de Nueva Rumasa

Nueva Rumasa es un complejo entramado de unas 160 sociedades que se prestan entre s¨ª cientos de millones de euros, provocando que sea muy dif¨ªcil seguir la pista del dinero. Para que el enredo sea mayor, algunas sociedades que controlan a empresas afincadas en Espa?a (como Clesa o Dhul) est¨¢n radicadas en para¨ªsos fiscales o en Holanda. Adem¨¢s, el grupo no consolida sus balances en un holding que aglutine todas las sociedades, lo que dificulta m¨¢s conocer su salud financiera. Nueva Rumasa pidi¨® dinero -puede que hasta 140 millones- a peque?os ahorradores con el viejo gancho de rentabilidades que iban desde el 8% al 12%.

La inquietud entre los inversores crece y la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n ha decidido tomar cartas en el asunto y ha pedido a la polic¨ªa que trate de esclarecer si entre los factores que han llevado a las principales sociedades de Nueva Rumasa a acogerse a la ley concursal puede haber hechos que sean constitutivos de delito, seg¨²n fuentes conocedoras de la investigaci¨®n.

Sociedades del grupo est¨¢n controladas desde para¨ªsos fiscales

Ruiz-Mateos admite que tienen un dise?o para evitar otra expropiaci¨®n

La iniciativa se encuentra a¨²n en una fase muy preliminar, en la que se est¨¢n analizando la estrategia y las posibles l¨ªneas de investigaci¨®n a seguir, as¨ª como los tipos delictivos en que podr¨ªan encajar los hechos, en especial en vista de las denuncias presentadas por entidades financieras y particulares.

En funci¨®n de los hechos denunciados y de la informaci¨®n disponible, el ministerio p¨²blico y las fuerzas de seguridad del Estado tratar¨¢n de esclarecer si se han cometido delitos como blanqueo y evasi¨®n de capitales, as¨ª como fraude fiscal, que suele estar asociado a los anteriores. Tambi¨¦n analiza si ha podido existir alg¨²n delito contra la Seguridad Social, falsedad en documento mercantil y perjuicio a los accionistas minoritarios por las operaciones intragrupo.

Otra de las v¨ªas abiertas es la posible estafa a los inversores en pagar¨¦s -cuyo valor de emisi¨®n era de 50.000 euros-, ya que se dijo que el dinero estaba destinado a la compra de empresas y parte se dedic¨® a pagar deuda con entidades financieras. Tambi¨¦n est¨¢ en an¨¢lisis si la informaci¨®n que se ofreci¨® en un documento denominado Memoria 2010, pero que carece de los m¨ªnimos datos e informes auditados, puede contener falsedades sobre la valoraci¨®n de los activos, fijada en casi 6.000 millones de euros.

Jos¨¦ Mar¨ªa Ruiz-Mateos hijo, consejero delegado de Nueva Rumasa, admit¨ªa esta situaci¨®n con naturalidad en una entrevista con EL PA?S. "Es cierto que tenemos sociedades en para¨ªsos fiscales. No hay que olvidar que este grupo fue expropiado por el Gobierno hace 28 a?os. Ahora hemos tomado precauciones para que eso no vuelva a suceder, pero todos los impuestos se pagan en Espa?a y los puestos de trabajo tambi¨¦n se crean aqu¨ª, no fuera de las fronteras".

Preguntado por la escasa informaci¨®n que pone a disposici¨®n del p¨²blico en general, el mismo al que ha estado pidiendo sus ahorros sin m¨¢s respaldo que la confianza, Ruiz-Mateos respondi¨®: "No queremos ofrecer tanta informaci¨®n como se pide desde aqu¨ª. No hay que dar m¨¢s de la debida... pero estamos estudiando cambiar nuestra pol¨ªtica en este asunto y quiz¨¢ demos m¨¢s datos en el futuro, aunque entregamos todo al Registro Mercantil".

Otra de las cuestiones abordadas fue la raz¨®n por la que el grupo no tiene un holding que consolide a todas las sociedades. La respuesta, una vez m¨¢s, remit¨ªa a la historia: es una manera de que no se repita el pasado, esto es, que se produzca una expropiaci¨®n. Pese a que hab¨ªa dicho que destinar¨ªa los fondos captados de los inversores a realizar compras, Nueva Rumasa us¨® parte del dinero que capt¨® de los inversores para emprender una huida hacia adelante mientras la crisis golpeaba sus negocios y los bancos le cortaban el cr¨¦dito debido a sus impagados y a la situaci¨®n de riesgo que ten¨ªan con las sociedades controladas por Jos¨¦ Mar¨ªa Ruiz-Mateos.

Hasta principios de febrero, Nueva Rumasa acumulaba 76 millones no devueltos a bancos y cajas de ahorros, as¨ª como activos impagados (letras, pagar¨¦s de empresa, etc¨¦tera) por 1,32 millones m¨¢s, seg¨²n diferentes datos de los registros de morosos. Este agujero supone casi el 11% del total de pr¨¦stamos acumulados con la banca. Al d¨ªa siguiente de publicarse esta noticia, que gener¨® gran nerviosismo entre las entidades, Nueva Rumasa present¨® en distintos juzgados la petici¨®n de acogerse al art¨ªculo 5.3 de la Ley Concursal. Incluy¨® sus 10 principales firmas: Clesa, Grupo Garvey, Grupo Hotasa, Dhul, Elgorriaga, Hibramer, Trapa, Carcesa, Queser¨ªa Menorquina y el Rayo Vallecano. Este art¨ªculo les concede un plazo de tres meses para negociar con sus acreedores. Se trata pues de una situaci¨®n preconcursal, un paso que evita que los acreedores insten en ese plazo el concurso de acreedores (antigua suspensi¨®n de pagos), aunque se llegar¨¢ a esa situaci¨®n si no hay un acuerdo.

Las cuentas de Carcesa, la sociedad del grupo que realiz¨® la primera emisi¨®n, muestran que a cierre de 2009 la empresa ten¨ªa 70 millones en pagar¨¦s, pero que la ¨²nica adquisici¨®n hab¨ªa sido la de Queser¨ªas Menorquinas, que figuraba con un valor contable de 1,7 millones. Carcesa destin¨® parte del dinero a reducir su deuda con las entidades financieras, sobre todo a corto plazo. La mayor¨ªa del dinero fue a parar a pr¨¦stamos a otras empresas del grupo Nueva Rumasa. Ah¨ª se pierde la pista del dinero. Una pista que ahoraquiere seguir la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n.