Sol ilumina medio mundo

La Puerta del Sol abarrotada, la gente unida y emocionada, los c¨¢nticos contra la banca y los pol¨ªticos, los apretujones, la euforia. El 15-M vivi¨® ayer una nueva jornada hist¨®rica. Y ya van tres en su corta existencia, de apenas cinco meses. El movimiento nacido de la indignaci¨®n en calles de toda Espa?a export¨® su protesta a medio mundo: Tokio, Sidney, Auckland, Kuala Lumpur, Buenos Aires, Santiago de Chile, Los ?ngeles, S?o Paulo. Y, por supuesto, las principales ciudades de Europa. El 15-M consigui¨® que su eco sonara bien lejos. En 951 ciudades de 82 pa¨ªses.

Los indignados espa?oles reclaman un cambio de sistema profundo. Consideran que los pol¨ªticos est¨¢n en manos de los banqueros. Que la democracia actual no funciona. Que precisa de una revisi¨®n urgente.

El movimiento volvi¨® a llenar el centro de Madrid cinco meses despu¨¦s

Los bancos, objetivo de la mayor¨ªa de los gritos de los manifestantes

Madrid y Barcelona fueron las ciudades que lideraron la protesta. El baile de cifras continuaba anoche. Los organizadores aseguraban que se hab¨ªa superado con creces la asistencia al 19-J, que ya fue superior a la del 15-M. En la abarrotada asamblea de la Puerta del Sol se lanz¨® la cifra del medio mill¨®n de asistentes. En Barcelona, las autoridades hablaban de 60.000 mientras los organizadores sosten¨ªan que era 400.000.

Los t¨®tems del sistema financiero no vivieron ajenos a la jornada de protestas. M¨¢s de 5.000 indignados se plantaron frente a la sede del Banco Central Europeo, en Fr¨¢ncfort, en la que fue una de las movilizaciones europeas con m¨¢s asistencia. En Londres, m¨¢s de un millar de manifestantes se dirigieron hacia la Bolsa y acabaron congregados en torno a la catedral de Saint Paul. Entre ellos, el l¨ªder de la plataforma WikiLeaks, Julian Assange, que hizo acto de presencia. En Madrid, los manifestantes, que confluyeron en la madrile?a plaza de Cibeles, dedicaron sonoras pitadas a su paso por el edificio del Banco de Espa?a.

Roma puso la nota fea en una jornada que, en l¨ªneas generales, transcurri¨® tranquila. Los enfrentamientos entre la polic¨ªa y centenares de encapuchados convirtieron las calles de la capital italiana en escenario de una batalla campal de m¨¢s de cuatro horas.

En Bruselas, fueron unos 6.000 los indignados que salieron a la calle. En Berl¨ªn, cerca de 10.000.

El Movimiento 15-M, al que muchos ya daban por muerto, consigui¨® internacionalizar su protesta. Reclut¨® nuevos efectivos m¨¢s all¨¢ de sus fronteras. Una de las claves, sin duda, fue la protesta en Estados Unidos, Occupy Wall Street. Los indignados neoyorquinos han logrado una enorme repercusi¨®n desde el pasado 17 de septiembre. El desalojo frustrado de los activistas anteayer y la violencia policial procur¨® un mayor altavoz a la protesta que se estaba gestando. Miles de personas desbordaban Times Square y sus aleda?os por la tarde (madrugada, hora espa?ola). La polic¨ªa practic¨® al menos 20 detenciones.

Jon Aguirre Such, portavoz de Democracia Real Ya, una de las plataformas clave del 15-M, quiso ser claro en su balance de la jornada: "Las personas que han salido a las calles en todo el mundo hoy, 15 de octubre de 2011, han hecho historia".

En Barcelona, la respuesta a las movilizaciones sorprendi¨® a los propios organizadores. En Valencia se sumaron a la cita unas 35.000 personas.

El ambiente en las calles de Madrid, desde primera hora, fue festivo, una de las se?as de identidad del 15-M. "Hola BBV, Hola Santander, ?pagaste ya la casa?", se cantaba con la m¨²sica de los payasos de la tele en Puerta de Toledo, al confluir dos de las seis columnas de la marcha: las procedentes del templo de Debod y de la zona Sur, de Legan¨¦s.

"El movimiento ha calado de una manera hermos¨ªsima", declaraba entre el bullicio Manolo, prejubilado de 64 a?os, miembro de la Comisi¨®n de Econom¨ªa de Acampada Sol. Por las calles de Madrid se ve¨ªan algunas pancartas con mensajes en franc¨¦s e ingl¨¦s. "Perroflauta peligroso", rezaba una. "De Norte a Sur, de Este a Oeste, la lucha sigue, cueste lo que cueste", proclamaban los manifestantes. Sobre una plataforma m¨®vil, un tipo en ba?ador, con camisa y sombrero de paja, animaba la marcha: "Este 15-0, m¨¢s que ocupar la plaza, ocupa el cerebro", proclamaba, meg¨¢fono en mano.

Al llegar a Atocha, Carlos, uno de los portavoces de Democracia Real Ya, se mostraba exultante: "El 15 de mayo no sab¨ªamos qu¨¦ iba a pasar y descorchamos una botella. Hoy hemos vivido el desparrame de esa botella".

Por la noche, la estatua ecuestre de Carlos III, en plena Puerta del Sol, volvi¨® a verse cubierta de pancartas contra la banca y el aumento del precio de los alimentos. En varias ciudades se manejaba la idea de campar. As¨ª ocurri¨® en Bruselas, en el barrio europeo.

La protesta viaj¨® por todos los husos horarios. Arranc¨® en Tokio con algo m¨¢s de 300 personas. En Sydney fueron 2.000. Seg¨²n avanzaba la madrugada en Espa?a, llegaban noticias de miles de activistas saliendo a la calle en Chile.

"Al 15-M se le ha asignado una tarea excesiva, es un movimiento de voluntarios y, sin embargo, se le han atribuido poderes que no son reales". Lo dec¨ªa Jon Aguirre Such, de Democracia Real Ya, dos d¨ªas antes de la jornada de protestas. Pero lo cierto es que el movimiento ha pasado su tercera prueba con nota. Ese sencillo y eficaz lema que llev¨® a la calle a decenas de miles de espa?oles el pasado mes de mayo, "No somos mercanc¨ªas en manos de pol¨ªticos y banqueros", arrastr¨® a cientos de miles por el mundo en la jornada de ayer.