Espa?a, algo mejor

"Vamos a entrar en una profunda depresi¨®n", vaticinaba el economista Nouriel Roubini en la cumbre de oto?o del FMI de hace ahora cuatro a?os. Nadie le crey¨®. All¨¢ por 2006 el FMI alertaba de riesgos inflacionistas, de una ligera desaceleraci¨®n del crecimiento mundial, de un posible enfriamiento del sector inmobiliario en Estados Unidos. No vio -ni de lejos- nada parecido a lo que se ven¨ªa encima. El jueves 9 de agosto de 2007, BNP Paribas suspend¨ªa el reembolso de dos de sus fondos y daba el pistoletazo de salida de una crisis que ha sido bautizada como la Gran Recesi¨®n.

M¨¢s de mil d¨ªas despu¨¦s, el FMI se cura en salud: la recuperaci¨®n va m¨¢s o menos como se esperaba -es decir, a toda velocidad en los emergentes y a trancas y barrancas en los pa¨ªses ricos-, pero los riesgos son elevados. La narrativa del informe de perspectivas del Fondo apenas da indicios de por d¨®nde van a ir los tiros. Si acaso, una idea fuerza sombr¨ªa: la crisis fiscal -por ahora, europea- puede acabar arrastrando al sector financiero y provocar una crisis sist¨¦mica. Los datos dejan una foto algo m¨¢s clara: el Fondo espera problemas para finales de este a?o y principios de 2011, seguidos de una aceleraci¨®n moderada. El mundo crecer¨¢ el 4,8% en 2010 y el 4,2% en 2011: m¨¢s de lo que se esperaba este a?o, y menos de lo previsto el pr¨®ximo. ?Y Espa?a? Buenas noticias. Relativas, o muy relativas, pero buenas al fin y al cabo.

El Fondo alerta de que la crisis fiscal pone en peligro la recuperaci¨®n mundial

La econom¨ªa internacional crecer¨¢ el pr¨®ximo a?o menos de lo previsto

El FMI espera que el PIB espa?ol caiga el 0,3% este a?o, para crecer el 0,7% en 2011. En ambos casos, eso supone una mejora de las perspectivas. Pero de apenas una d¨¦cima. El pron¨®stico de 2010 ha ido mejorando hasta coincidir con el del Gobierno, y el de 2011 coincide con el de los analistas: el Gobierno espera un avance muy superior, del 1,3%. Eso puede parecer una sopa de cifras, pero es importante: si el Gobierno acierta -y ha acertado en 2009 y 2010-, Espa?a podr¨¢ cumplir con sus compromisos de rebaja del d¨¦ficit p¨²blico, despu¨¦s del dr¨¢stico ajuste fiscal aprobado. De cumplirse el vaticinio del Fondo y de los analistas en 2011, har¨¢n falta m¨¢s medidas de austeridad para evitar nuevos ataques en los mercados de deuda, cuando Espa?a acaba de salir de una huelga general motivada por el apretado calendario de recortes y reformas.

Para la eurozona, la revisi¨®n al alza ha sido m¨¢s significativa, aunque no exenta de riesgos. Seg¨²n sus nuevos c¨¢lculos, crecer¨¢ un 1,7% en 2010, siete d¨¦cimas m¨¢s que su anterior previsi¨®n, y un 1,5% en 2011 cuando hace unos meses auguraba un repunte del 1,3%. La peor parte se la lleva Estados Unidos, cuyas previsiones han sufrido el mayor correctivo. Al calor de la evoluci¨®n reciente de la primera potencia mundial, el FMI cree que su PIB avanzar¨¢ un 2,6% este ejercicio y un 2,3% el pr¨®ximo, seis d¨¦cimas menos.

Roubini no est¨¢ para alinearse con unos u otros pron¨®sticos. No aparecer¨¢ por Washington hasta el pr¨®ximo viernes, aunque en los ¨²ltimos tiempos no ha sido precisamente optimista con Espa?a. Ni pr¨¢cticamente con nada: por algo le apodan Doctor Cat¨¢strofe.