Ahorrar en la reforma
Comprar los materiales puede abaratar el presupuesto hasta un 30%
David M. no ve el momento de colocar, por fin, ese elefante plateado con la trompa hacia arriba que le regalaron sus amigas el d¨ªa de su 29? cumplea?os, hace apenas un mes. Dice que da suerte y que su pr¨®ximo destino ser¨¢ su dormitorio, que piensa pintar de color malva, exactamente del mismo tono que los apliques que ahora luce esa estancia llena de polvo. Igual que el resto de la casa. El alba?il y su equipo acaban de terminar la reforma del piso, situado en el mismo centro de M¨®stoles, tras dos meses de trabajo. Tres d¨¦cadas de antig¨¹edad borradas de un plumazo que dan paso a un piso moderno, con tarima flotante color wengu¨¦ o pav¨¦s en el ba?o. Pero a¨²n no es momento de limpiar. Toca pintar toda la casa. Lo va a hacer David.
Ya tiene las pinturas pl¨¢sticas -de color rojo, malva y gris-, los rodillos, el papel y la cinta de carrocero. "Me voy a ahorrar m¨¢s de 1.000 euros", dice. No es el ¨²nico ahorro. Ha conseguido economizar el presupuesto en unos 3.000 euros demoliendo ¨¦l mismo, comprando y portando los materiales, los apliques y respiraderos, y pintando la casa. No es ¨¦poca de derrochar, ni de hacer grandes reformas. Lo dejan patente las cifras del Ministerio de Fomento. Los visados para reforma o restauraci¨®n de viviendas en Espa?a han alcanzado los 18.441 entre enero y julio, un 11,6% menos que el pasado a?o.
Las reformas importantes, las integrales, esas que parten de los 20.000 euros, est¨¢n sufriendo la bofetada de la crisis. Han ca¨ªdo m¨¢s del 60% con respecto al a?o pasado, dice Pedro Oliver, director general de Uni¨®n de Reformistas Asociados (URA), primera asociaci¨®n creada en Espa?a que agrupa a seis asociados y que pretende profesionalizar el sector de reformas. "Los bancos no conceden ni pr¨¦stamos personales ni ampliaciones de hipoteca para reformas, as¨ª que tenemos peticiones de presupuestos, pero pocas reformas reales".
Recuerda el ¨²ltimo encargo que ha tenido su empresa: "Una se?ora que ha comprado un piso de 250.000 euros en Valencia y ha hecho una reforma de 120.000 euros pagados al contado gracias a la venta de otra vivienda". Ahora, este mercado est¨¢ copado por las reformas parciales, los acondicionamientos y los lavados de cara que cuestan entre 3.000 y 4.000 euros, que se pagan en efectivo y que consisten en pintar, cambiar la cocina o colocar muebles baratos.
"Nuestros clientes suelen optar por reformas parciales en vez de integrales. Van mejorando habitaci¨®n por habitaci¨®n en varios meses", se?ala Luis Sancho, director general de Tenders.es, plataforma online que permite comparar presupuestos de forma gratuita. La est¨¦tica puede esperar. Las reformas de ahora son por necesidad, insalubridad, porque no queda m¨¢s remedio. O porque se trata de lavados de cara para acrecentar el atractivo del piso y poder venderlo cuanto antes. Los incentivos fiscales para alentar las reformas aprobados por el Gobierno ?subir del 10% al 20% la deducci¨®n fiscal en el IRPF, y el IVA reducido, del 18% al 8%, para obras de fontaner¨ªa, pintura, electricidad y carpinter¨ªa que se realicen antes de 2012? animaron al principio, pero se han topado con el problema de la financiaci¨®n, el miedo al despido y la falta de confianza.
Adem¨¢s, no cualquier reforma pueda facturarse con un IVA reducido. Hay que cumplir algunos requisitos. Por ejemplo, el coste de los materiales no puede superar el 33% de la base imponible de la reforma. As¨ª, si la obra cuesta 10.000 euros, la partida de material no debe ser m¨¢s de 3.300 euros. En caso contrario, el IVA es el 18%. Esto suele ocurrir en el caso de parqu¨¦, cerrajer¨ªa o cristaler¨ªa. Aun as¨ª, no es f¨¢cil cuantificar el total de obras que se realizan, ya que el 80% de las peque?as reformas se pagan en B. "Son realizadas por los hombres de negro, como gusta llamarles a Oliver, mano de obra sin cualificaci¨®n suficiente.
El responsable de URA se queja de que ahora hay mucho m¨¢s intrusismo que antes. De hecho, la crisis ha obligado a esta empresa a integrarse en el grupo Main y ampliar el negocio a terminaciones de viviendas en manos de la banca, segregaciones, cambios de usos o venta de parcelas. Las reformas en la sombra se pagan al contado, sin factura, sin IVA, sin licencia municipal ni permiso de escombros y, lo que es peor, sin garant¨ªas. Un punto importante que el propietario suele pasar por alto. No solo encarece e impide reclamar, sino que ante cualquier accidente o da?o personal el propietario ser¨¢ el ¨²nico responsable.
Los chapuzas carecen de seguro de responsabilidad civil. La compa?¨ªa Reparalia pone un ejemplo. "La renovaci¨®n de una cisterna, que no supera los 115 euros, podr¨ªa suponer un sobrecoste de m¨¢s de 185 euros por da?os en la pintura del techo del ba?o del piso inferior o en el suelo del ba?o y el parqu¨¦ del pasillo", explica Agust¨ªn Dom¨ªnguez, director de operaciones de Reparalia, especialistas en asistencia en el hogar. Una reforma integral cuesta unos 600 euros por metro cuadrados. Para un piso de 100 metros sale por unos 60.000 euros.
Un acondicionamiento se sit¨²a entre 3.000 y 4.000 euros. Pero hay f¨®rmulas para ahorrar. Se lleva el decantarse por materiales y soluciones econ¨®micas. Por ejemplo, los almacenes est¨¢n aplicando a los particulares que compran los materiales directamente los mismos descuentos que al profesional, entre el 20% y el 30%. Otra opci¨®n es inclinarse por materiales m¨¢s econ¨®micos. Un parqu¨¦ sencillo cuesta 35 euros por metro cuadrado y uno de lujo sale por 110. Un gres sencillo son 15 euros; uno medio, el doble; y uno de gama alta sale por 50 euros, seg¨²n RR de Acu?a & Asociados. Adem¨¢s, grandes firmas se han apuntado a la moda de los outlets en los que se ofrecen productos a precios m¨¢s rebajados.
Un paso m¨¢s all¨¢. "Pintar los azulejos en lugar de cambiarlos o construir muros de pladur en vez de ladrillo", dice Sancho. Pero antes de nada hay que comparar varios presupuestos. Entre cinco y seis. "Y a cada empresa hay que pedirle dos: uno solo de mano de obra y otro que incluya mano de obra y materiales para comparar cu¨¢nto ahorramos", dice Antonio L¨®pez, director de comunicaci¨®n de CECU Madrid. Planificar evitar¨¢ sorpresas inc¨®modas y adem¨¢s puede suponer un ahorro de hasta un 30%, seg¨²n Tenders.es.
De cara al invierno, "es frecuente el cambio de cerramientos de aluminio por otros m¨¢s eficientes", seg¨²n Crear Hogar, el estudio de reformas y decoraci¨®n integral de El Corte Ingl¨¦s. Otras reformas habituales: se cambian ba?eras por platos de ducha, se elimina el gotel¨¦ de paredes y se acuchilla y barniza el parqu¨¦. En la cocina suelen ser obras integrales, con alicatados e instalaci¨®n de muebles y electrodom¨¦sticos.
De contratos y licencias
-Hay que asegurarse de que los presupuestos sean vinculantes.
-Aparte del presupuesto, hay que firmar un contrato que recoja: el tiempo de terminaci¨®n de la reforma con una cl¨¢usula que penalice cada d¨ªa que no se cumpla; un seguro que proteja de los posibles desperfectos; y la forma de pago, siendo aconsejable dividirlo en tres o cuatro plazos.
-Si las obras no necesitan proyecto t¨¦cnico (no afectan al exterior o no est¨¢n en edificio protegido), solo es necesario realizar una comunicaci¨®n previa al Ayuntamiento de Madrid. Si no contesta en 15 d¨ªas, se considera favorable.
-Cuando las obras son de consolidaci¨®n, reestructuraci¨®n general o afectan a elementos protegidos necesitan un proyecto de un t¨¦cnico competente y someterse a procedimiento ordinario de tramitaci¨®n de licencia. Se debe pagar una tasa por tramitaci¨®n y el impuesto del ICIO, que se calcula en funci¨®n del tipo de obras (la primera) y del presupuesto (el segundo).
-Si no pide licencia, el propietario puede ser requerido para que legalice la obra por el procedimiento de solicitud de licencia de legalizaci¨®n de obras, sin perjuicio de que le corresponda una sanci¨®n por no tener licencia o por obras no legalizables.
-Para el permiso de escombros (contenedor) deber¨¢n pedir permiso de ocupaci¨®n de v¨ªa p¨²blica, y si la obra genera escombros est¨¢ tambi¨¦n sujeta al aval de residuos urbanos.
Fuente: Ayuntamiento de Madrid y CecuMadrid.
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