El FMI alerta del efecto global de una guerra comercial entre EE UU y China
La directora del Fondo, Christine Lagarde, pide a China que ejecute las medidas de apertura prometidas
La directora gerente del FMI, Christine Lagarde, advirti¨® ayer de que una guerra comercial entre Estados Unidos y China afectar¨ªa al crecimiento global, dada la interconexi¨®n actual de las econom¨ªas en el mundo, y llam¨® a Washington a solucionar las disputas sin echar mano de una escalada arancelaria. El br¨ªo del crecimiento global est¨¢ marcando las jornadas de primavera del FMI tanto como el miedo al proteccionismo y el exceso de deuda.
Lagarde suele hablar del tiempo en las jornadas del FMI en Washington, rara vez falla. Vaya como vaya la econom¨ªa, haga sol o llueva, se adapta: ahora est¨¢ luminoso, pero cuidado que vienen nubarrones; hoy llueve, pero casi amaina. Cuando ayer la directora gerente del FMI empez¨® a hablar, llov¨ªa, muy a pesar de que las grandes potencias est¨¢n tirando del carro con br¨ªo. Las ¡°nubes¡± de este a?o, dijo, son las tensiones comerciales, encarnadas sobre todo en una guerra latente entre EE UU y China.
¡°No ser¨ªa algo que afectar¨ªa a dos pa¨ªses porque el mundo est¨¢ tan interconectado que impactar¨ªa a la econom¨ªa global¡±, dijo Lagarde.Echar un vistazo a un tel¨¦fono iPhone ayuda a comprender los m¨²ltiples da?os colaterales a los que se refer¨ªa Lagarde. Solo el 1% del precio de venta del modelo iPhone 7 corresponde a los costes laborales del gigante asi¨¢tico, seg¨²n el estudio de dos profesores universitarios, Jason Dedrick, de Syracusa; y Jason Kraemer, de California, citado por Bloomberg.
Otro estudio de la gestora AllianceBernstein advierte de que las empresas m¨¢s castigadas por los aranceles ser¨¢n, a la postre, las alemanas BMW y Mercedes Benz, que venden autom¨®viles para el mercado chinos desde sus plantas ubicadas en EE UU.En general, seg¨²n unos datos de la OCDE correspondientes a 2011, los materiales y componentes de otros pa¨ªses ¡ªespecialmente Jap¨®n, EE UU o Corea del Sur¡ª representantes un tercio de todas las exportaciones de China. Y toda esa amalgama de proveedores de terceros pa¨ªses hacen n¨²meros a la espera de lo que ocurra. ¡°Cuando los inversores no saben bajo qu¨¦ condiciones van a invertir, son reacios a hacerlo. Una guerra comercial erosionar¨ªa esta confianza¡±, advirti¨® Lagarde.
De momento, las dos potencias ya han oficializado subidas de aranceles por valor de 6.000 millones de d¨®lares. En el caso de EE UU, se trata de tasas del 25% para el acero y el aluminio procedentes de China y, por parte de Pek¨ªn, consiste en el mismo gravamen para carne de cerdo, vino y algunas frutas. Es un montante econ¨®mico menor (el comercio entre ambos pa¨ªses supera los 630.000 millones), pero la escalada sube de voltaje: Washington ha anunciado aranceles para productos chinos por 50.000 millones y Pek¨ªn ha respondido con la misma moneda.La guerra comercial ya ha sido declarada, aunque los disparos apenas han comenzado. Y lo que el FMI espera es que en este tiempo se abra una negociaci¨®n.
La directora gerente del Fondo recalc¨® que las conversaciones deben ser ¡°multilaterales¡± y no englobar ¨²nicamente a China y EE UU.El FMI defiende que los pa¨ªses planteen sus conflictos comerciales, pero rechaza ¡°medidas excepcionales¡± y, sobre todo, la v¨ªa escogida por Trump, un cuerpo a cuerpo en el que ha dejado de lado los organismos multilaterales o los tradicionales mecanismos de resoluci¨®n, como es la Organizaci¨®n Mundial del Comercio.
El informe del Fondo ha sido tan cr¨ªtico con EE UU, primer contribuidor de este organismo, que un periodista le pregunt¨® a Lagarde si consideraba que hubiese algo que Trump ¡°est¨¦ haciendo bien¡±. Ella se?al¨® que celebraba la reforma del impuestos de sociedades, por su simplificaci¨®n, algo que hab¨ªan estado reclamando. Sin embargo, el Fondo critica la reforma fiscal en su conjunto, que supone la mayor rebaja de impuestos en 30 a?os, con las empresas como grandes beneficiadas, porque cree que agudizar¨¢ la desigualdad en el pa¨ªs. La dial¨¦ctica agresiva de Trump, con todo, parece surtir efecto. La semana pasada, el presidente Xi Jinping prometi¨® una ¡°nueva era de apertura comercial" y varias reformas para responder a las quejas de Washington contra el desequilibrio comercial entre ambos pa¨ªses. ¡°Son medidas en la buena direcci¨®n, pero lo importante es lo que ocurra finalmente¡±, opin¨® Lagarde.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.