Bruselas quiere poner l¨ªmite a las emisiones de los camiones para bajarlas hasta un 30%

La excepci¨®n europea llega a su fin. Estados Unidos, China, Jap¨®n o Canad¨¢ ya fijan objetivos de reducci¨®n de emisiones a los camiones. Europa, el continente que presume de viajar a la vanguardia de las leyes medioambientales, pero tambi¨¦n un vasto mercado para este tipo de transporte, con potentes fabricantes y un lobby del motor a su altura, carec¨ªa hasta ahora de mecanismos para acotar la contaminaci¨®n de los veh¨ªculos pesados. Bruselas quiere acabar con esa anomal¨ªa, y tras una ronda de conversaciones de cuatro meses con la industria del motor y organizaciones ecologistas, puso n¨²meros este jueves al nuevo escenario legislativo. Los camiones deber¨¢n llegar a un 30% de reducci¨®n de emisiones en 2030, con un objetivo previo del 15% de descenso en 2025. Los datos se tomar¨¢n en relaci¨®n a los niveles de 2019.

Como suele ocurrir, las cifras no han contentado a casi nadie. Los ambientalistas estiman que hab¨ªa margen para exigir una bajada m¨¢s pronunciada. Mientras, la patronal automovil¨ªstica europea pujaba por que la meta fuera menos ambiciosa y se quedara en el 16% en 2030 con un objetivo intermedio del 7% en 2025. La Comisi¨®n Europea ha tirado por la calle de enmedio, azuzada por las obligaciones adquiridas en el Acuerdo de Par¨ªs contra el calentamiento global. ¡°Todos los sectores deben contribuir a la consecuci¨®n de nuestros compromisos clim¨¢ticos¡±, record¨® el comisario de Energ¨ªa, Miguel Arias Ca?ete.

La Asociaci¨®n Europea de Fabricantes de Autom¨®vil (ACEA), que representa a las siete mayores compa?¨ªas que comercializan camiones en el continente, cree que la propuesta es ¡°demasiado agresiva¡±. Y estima que Bruselas ignora la naturaleza del sector del cami¨®n, menos ¨¢gil en su capacidad de adaptaci¨®n a nuevas tecnolog¨ªas por la mayor complejidad de su producto frente a los turismos. ¡°Los veh¨ªculos pesados que se vender¨¢n en 2025 se est¨¢n fabricando en estos momentos. El nivel de ambici¨®n es demasiado estricto para un periodo tan corto¡±, critic¨® en un comunicado. En un principio, la medida afectar¨¢ ¨²nicamente a los camiones de gran tonelaje, pero desde 2022 tambi¨¦n se extender¨¢ a autobuses, remolques y camiones menos pesados.

El contexto rema a favor de la propuesta de la Comisi¨®n. El barril de petr¨®leo Brent toc¨® este jueves los 80 d¨®lares, m¨¢ximos de tres a?os y medio. Los analistas auguran nuevas cotas en los pr¨®ximos meses ¡ªGoldman Sachs predice un salto hasta los 98 d¨®lares¡ª. Y su contagio a la econom¨ªa real es ya un hecho: el precio del combustible acumula en Espa?a ocho semanas consecutivas al alza.

5.000 euros de ahorro

En medio de ese panorama, los c¨¢lculos de Bruselas hablan de ahorro a largo plazo: prev¨¦n que las empresas de transporte dejen de gastar 5.000 euros anuales debido al menor consumo de camiones m¨¢s eficientes. Para conseguir ese ahorro energ¨¦tico, la Comisi¨®n instar¨¢ tambi¨¦n a las compa?¨ªas a introducir cambios en la aerodin¨¢mica y los neum¨¢ticos de los veh¨ªculos.

Pero por encima del factor econ¨®mico, el gran desaf¨ªo para Europa es clim¨¢tico. Los camiones representan solo un 5% de los veh¨ªculos que circulan en las carreteras europeas, pero son responsables de un 22% del total de emisiones procedentes de este tipo de transporte.

Sobre el papel, la nueva norma acortar¨¢ en parte ese abismo eliminando del aire que respiran los europeos una buena raci¨®n de part¨ªculas contaminantes: Bruselas habla de una reducci¨®n de emisiones de di¨®xido de carbono de 54 millones de toneladas entre 2020 y 2030, el equivalente a todas las que lanza en un a?o Suecia, un pa¨ªs de 10 millones de habitantes.