Las mujeres, m¨¢s amenazadas que los hombres por el avance de los robots

?Van los robots a destruir trabajo? ?Afectar¨¢ a todos por igual? Que las nuevas tecnolog¨ªas suponen una amenaza para los puestos de trabajo tradicionales no es una sorpresa. Hace a?os que infinidad de estudios tratan de anticipar el futuro del trabajo, o el trabajo del futuro. Pero raramente estas investigaciones abordaban una perspectiva de g¨¦nero. Es lo que ahora hace un trabajo reci¨¦n publicado por el FMI, que adem¨¢s arroja un resultado interesante: la mecanizaci¨®n afecta proporcionalmente m¨¢s a las mujeres que a los hombres. Y, por lo tanto, los trabajos de ellas peligran m¨¢s que los de ellos.

El argumento es claro: las mujeres suelen tener ocupaciones m¨¢s rutinarias, con independencia del sector y el trabajo. Y son precisamente estas tareas las m¨¢s amenazadas por las nuevas tecnolog¨ªas. Es decir: la diferencia de g¨¦nero no se explica tanto porque vayan a desaparecer m¨¢s puestos en f¨¢bricas, en la agricultura o en el comercio, sino que dentro de todos estos sectores el personal que se ocupa de tareas menos especializadas y m¨¢s rutinarias son en mayor proporci¨®n mujeres, por lo que su empleo est¨¢ todav¨ªa m¨¢s en riesgo si la automatizaci¨®n llega.

Por ejemplo, apunta el informe, el comercio minorista es un sector expuesto a un fuerte riesgo de mecanizaci¨®n. Sin embargo, dentro de este sector, las mujeres suelen llevar a cabo menos "tareas abstractas y de gesti¨®n". Ese tipo de puestos de mayor decisi¨®n los ocupan en mayor proporci¨®n los hombres. Son posiciones que est¨¢n m¨¢s protegidas que, por ejemplo, las destinadas a cobrar en una caja registradora, donde ellas est¨¢n m¨¢s presentes.

Es un tema del que ya habl¨® la semana pasada, antes de viajar a la reuni¨®n anual que se celebra en Bali, la jefa del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde. Ya que las mujeres son las m¨¢s perjudicadas por la tecnificaci¨®n, dijo Lagarde, ¡°los Gobiernos deben asumir una mayor responsabilidad por el coste humano de las tensiones, ya sean las derivadas de la tecnolog¨ªa, del comercio o de la reforma econ¨®mica¡±.

El 11% de los empleos ocupados por ellas, amenazados

La novedad es que ahora se publica el trabajo que ha dado lugar a estas reflexiones. Y, seg¨²n el texto que firman seis economistas del FMI, todas ellas mujeres, estiman que en 30 pa¨ªses ¡ªlos 28 de la OCDE y Chipre y Singapur¡ª hay unos 26 millones de mujeres cuyos trabajos estar¨¢n amenazados por la tecnolog¨ªa durante las dos pr¨®ximas d¨¦cadas (son aquellos que se considera que tienen una probabilidad mayor del 70% de ser automatizados). Extrapolando estos datos, las autoras llegan a la conclusi¨®n de que en todo el mundo ser¨¢n 180 millones.

?Y cu¨¢nto m¨¢s expuestas est¨¢n ellas a las inclemencias de las nuevas tecnolog¨ªas respecto a los hombres? Las cuatro investigadoras estiman que el 11% de las trabajadoras corren el riesgo de perder su trabajo por las m¨¢quinas, mientras que en el caso de ellos es el 9%.

¡°Sin embargo¡±, advierten las autoras, ¡°como hay m¨¢s hombres trabajando que mujeres, esto se refleja en que la cifra absoluta de hombres que corren peligro por la automatizaci¨®n es ligeramente mayor que la de mujeres¡±. Adem¨¢s, los peligros no son iguales para todas: el riesgo es m¨¢s grande cuando tiene menos formaci¨®n tengan y son mayores. El peligro afecta sobre todo a las mujeres que trabajan en puestos poco cualificados en puntos de venta, oficinas o servicios.

Menos mujeres en ciencia o ingenier¨ªas

Las seis investigadoras recuerdan que las mujeres est¨¢n infrarrepresentadas en la ciencia, tecnolog¨ªa, ingenier¨ªa y matem¨¢ticas, ¡°sectores en los que el cambio tecnol¨®gico puede ser complementario con las habilidades humanas¡± y, por lo tanto, van a ser cada vez m¨¢s demandados en el mercado. Tambi¨¦n se?alan que en otros donde suele haber sobrerrepresentaci¨®n femenina ¡ªeducaci¨®n, salud...¡ª van a ofrecer posibilidades por su potencial para seguir creciendo.

¡°Creemos que la transformaci¨®n digital va a aportar m¨¢s flexibilidad en el puesto de trabajo, lo que beneficiar¨¢ a las mujeres. Pero romper el techo de cristal ser¨¢ crucial. La infrarrepresentaci¨®n de las mujeres en cargos profesionales y de gesti¨®n las coloca en una situaci¨®n de riesgo de ser desplazadas por la tecnolog¨ªa¡±, concluyen las expertas.