Ana Oramas: ¡°Excepto Solbes, ning¨²n gestor, pol¨ªtico o supervisor ha admitido errores¡±
La presidenta de la Comisi¨®n de investigaci¨®n de la crisis, tras a?o y medio de sesiones, hace balance de las comparecencias
La comisi¨®n de investigaci¨®n de la crisis financiera ha durado 18 meses, 48 sesiones y 215 horas de comparecencias. Ana Oramas, diputada por Coalici¨®n Canaria, ha presidido esta comisi¨®n, una de las m¨¢s significativas de los ¨²ltimos a?os en el Congreso.
La comisi¨®n se marc¨® el ambicioso objetivo de ¡°conocer, analizar y evaluar con profundidad y rigor las causas que originaron la crisis financiera y econ¨®mica, desde su gestaci¨®n hasta el estallido de la burbuja y su impacto en el sector financiero¡±. Oramas cree que en dictamen, que llegar¨¢ al Pleno del Congreso en febrero (tiene 331 p¨¢ginas), ¡°es un relato fiel, completo, no pol¨ªtico y contrastado de lo que pas¨® en la crisis. Ahora toca legislar al parlamento y que las entidades tomen medidas¡±. La presidenta lamenta que "ning¨²n pol¨ªtico, gestor o supervisor, excepto Pedro Solbes, exvicepresidente econ¨®mico con Zapatero, haya admitido los errores. Todos echaron la culpa a otros".
Pregunta. ?Qui¨¦nes fueron los culpables por orden de importancia?
Respuesta. No es tan f¨¢cil decirlo porque hay un c¨²mulo de responsables. Por un lado, el Gobierno del PP que no supo cortar la burbuja inmobiliaria con la Ley del Suelo, la carrera sin fin de las comunidades aut¨®nomas y los ayuntamientos por elevar los ingresos con las licencias urban¨ªsticas. En segundo lugar, el Ejecutivo socialista, que no fren¨® la crisis. Es cierto que nadie, ni en Espa?a ni los organismos internacionales, predijeron la segunda crisis, la de 2011, que agudiz¨® los problemas. Tambi¨¦n los supervisores son responsables porque miraron para otro lado, tuvieron falta de valent¨ªa, y permitieron fusiones que crearon problemas m¨¢s grandes. En cuarto lugar, por supuesto, los consejos de administraci¨®n de las entidades, que no ten¨ªan la cualificaci¨®n necesaria, y dejaron que los directores generales hicieran y deshicieran a su antojo. Mientras, otras cajas, lo hicieron bien, con la misma estructura societaria, y siguieron adelante.
P. ?Qu¨¦ incentivos tuvieron los gestores para volcarse en el negocio inmobiliario?
R. Sus propias retribuciones, que eran variables seg¨²n el volumen de negocio, no por resultados. Adem¨¢s, tambi¨¦n lo trasladaron a los empleados de oficina y as¨ª se lanz¨® la rueda para colocar preferentes, swaps (derivados) o las acciones de Bankia.
P. ?Los gestores no fueron conscientes de d¨®nde se met¨ªan a lo largo de tantos a?os de crisis?
¡°Desahuciaron mientras renovaban altos cr¨¦ditos malos a los promotores¡±
R. Fue una carrera hacia adelante que no la par¨® el Banco de Espa?a¡ en una euforia colectiva nadie se atrevi¨® a pinchar ese globo y pensaban que por qu¨¦ iban a parar ellos si los dem¨¢s no lo hac¨ªan.
P.? El nuevo gobernador, Pablo Hern¨¢ndez de Cos, dijo que espera recuperar la reputaci¨®n perdida siendo m¨¢s independiente y riguroso. ?Qu¨¦ le parece?
R. Son declaraciones valientes e interesantes. A partir de febrero, cuando lleguen las medidas al Pleno, debemos realizar las modificaciones sobre el trabajo de los supervisores, de los inspectores, la ley hipotecaria, la de cooperativas y el C¨®digo Penal para castigar a los gestores.
P. Sebasti¨¢n Albella, presidente de la CNMV, advirti¨® de los posibles problemas con la comercializaci¨®n de productos por parte de fintech o los gigantes tecnol¨®gicos. ?Le preocupa?
R. S¨ª, hay una falta de supervisi¨®n y regulaci¨®n absoluta y crecer¨¢ esta oferta, que deja indefensos a los ciudadanos. Se debe legislar pronto sobre esto.
P. ?El ladrillo fue el camino para la expansi¨®n irracional de algunas cajas?
R. S¨ª, las cajas quisieron convertirse en bancos y ¨¦stos ocupar el terreno de las cajas... esta estrategia unida a una falta de control de los consejos y la segunda recesi¨®n remat¨® la burbuja, convirti¨¦ndola en una situaci¨®n sin salida.
P. ?Lo m¨¢s duro de esta crisis han sido los desahucios?
R. S¨ª, sobre todo porque hemos comprobado la doble vara de medir: mientras se renovaban los cr¨¦ditos malos por miles de millones a los promotores, las mismas entidades subastaban la vivienda a las personas por tres recibos impagados si no pod¨ªan hacer frente a toda la deuda. Eso es terrible sobre todo porque la deuda de los peque?os clientes era el chocolate del loro comparado con los miles de millones de deuda p¨²blica que han puesto los ciudadanos para hacer frente a los agujeros de los promotores inmobiliarios, que se renovaban una y otra vez para ser morosos al final.
P. ?Qui¨¦n fue m¨¢s autocr¨ªtico o admiti¨® m¨¢s responsabilidad?
R. Pedro Solbes, exvicepresidente econ¨®mico con Zapatero, que confes¨® que fue consciente hacia d¨®nde se iba, que lo dijo al Gobierno, que algunos no le hicieron caso y que le falt¨® valent¨ªa para tomar decisiones. Del resto, entre m¨¢s de 80 comparecientes todos intentaron echar las culpas a otros, ni un pol¨ªtico, gestor o supervisor las ha admitido.
P. La intervenci¨®n de Jos¨¦ Antonio Moral Sant¨ªn, exvicepresidente de Caja Madrid, le hizo dejar la presidencia para realizar una cr¨ªtica feroz¡
R. Me pareci¨® la comparecencia m¨¢s gr¨¢fica para saber en manos de qui¨¦n han estado las cajas y por qu¨¦ la crisis ha costado miles de millones. Es la ¨²nica vez que olvid¨¦ mi papel de presidenta y baj¨¦ para hablar como diputada. Me pareci¨® indignante todo: se retras¨® una hora, la exposici¨®n la alarg¨® 40 minutos m¨¢s de lo acordado, luego dio lecciones de integridad como catedr¨¢tico de Econom¨ªa y no respondi¨® a las preguntas.
P. Usted destac¨® que le doli¨® especialmente por ser un diputado de izquierdas...
R. S¨ª, era una persona de ven¨ªa de Izquierda Unida, que estuvo 14 a?os en la c¨²pula de Caja Madrid y que iba dos veces al d¨ªa al cajero con las tarjetas black, con las que sac¨® 365.000 euros, que no declar¨® a Hacienda. Luego dijo que los daba a ONG y otras organizaciones y que si lo hubiera declarado solo habr¨ªa tenido que pagar 2.000 euros m¨¢s a Hacienda¡Y dijo que todo se hizo bien, no fue capaz de pedir perd¨®n.
P. ?Cu¨¢l fue la reacci¨®n posterior de Moral Sant¨ªn tras su intervenci¨®n?
R. Escribir a la presidenta del Congreso descalific¨¢ndome, pidiendo que se me sancionara y que no me sancionaba porque estaba aforada por mi condici¨®n de diputa. No me alegro de que est¨¦ en la c¨¢rcel, pero creo que el tiempo pone a cada uno en su sitio.
P. ?Qui¨¦n se ha negado a declarar en la Comisi¨®n?
R. Solo un inspector del Banco de Espa?a y del BCE, el resto lo hicieron y eso pese a que hay en curso juicios penales y civiles por muchos millones de euros y que ten¨ªan derecho a no declarar.
P. Si pudiera llamar a alguien m¨¢s, ?a qui¨¦n traer¨ªa?
R. A los directores generales de las cajas en lugar de a los presidentes.
P.? Sin embargo, no llamaron a los presidentes de los bancos, como Ana Bot¨ªn o Francisco Gonz¨¢lez, algo que pidi¨® Unidos Podemos y que fue pol¨¦mico. ?Deber¨ªan haberlo hecho?
P. No, creo que las declaraciones de los consejeros delegados fueron muy clarificadoras.
P. ?Cu¨¢l ha sido la mejor intervenci¨®n?
R. La de Jos¨¦ Ignacio Goirigolzarri, presidente de Bankia. Hizo un relato perfecto y libre de la situaci¨®n del banco, con absoluta independencia pese a ser estar en una entidad p¨²blica¡contradijo al exministro Luis de Guindos y a Rodrigo Rato. Hizo una cr¨ªtica valiente contra la banca p¨²blica frente a algunos portavoces.
P. ?Actuar tarde ha salido caro?
R. Sin duda. Si el Gobierno hubiese reaccionado antes no hubiera hecho falta tanto capital p¨²blico para tapar el agujero.
P. En 2006 los inspectores advirtieron de los problemas a Solbes y lo volvieron a dejar por escrito m¨¢s adelante¡
R. Fueron los ¨²nicos que lo pusieron por escrito y lo dijeron a sus superiores. Ni en el Banco de Espa?a ni los responsables pol¨ªticos les hicieron caso.
P. En el documento insisten mucho en la reforma de los supervisores. ?Es un tema clave?
R. S¨ª, lo que se pide es que se separan la supervisi¨®n de la solvencia de las entidades, que debe quedar en el Banco de Espa?a, y la vigilancia de la conducta de mercado, centrada en la CNMV. El nuevo organismo de defensa del consumidor podr¨ªa ir dentro de la Comisi¨®n. Tambi¨¦n es clave que los consejeros de estos organismos no sean los mismos porque en esta crisis se ha visto que al final eran cuatro personas las que estaban en todo¡
P. Al final, el dictamen no fue aprobado por unanimidad; Ciudadanos vot¨® en contra y Unidos Podemos se abstuvo¡
R. Pese a la que dijo el portavoz de Econom¨ªa de Ciudadanos, Toni Rold¨¢n, puedo afirmar es que 24 horas antes de la votaci¨®n, el portavoz habitual de Ciudadanos, Francisco de la Torre, y el de Unidos Podemos, Alberto Garz¨®n, dijeron que el relato era equilibrado y lo apoyaron. Adem¨¢s, se han aprobado propuestas de todas las fuerzas pol¨ªticas, desde el PP a Esquerra Republicana, pasando por Unidos Podemos. Creo que es un buen documento para empezar a trabajar gracias al gran trabajo y dedicaci¨®n de todos los portavoces habituales de todos los partidos.
¡°La presidenta de la Junta ?nica despreci¨® a los ciudadanos"
Uno de los momentos m¨¢s tensos de la Comisi¨®n fue su intervenci¨®n tras las declaraciones de Elke K?nig, la presidenta de la Junta ?nica de Resoluci¨®n (JUR), que no respondi¨® a las preguntas de los diputados. ?C¨®mo recuerda aquella comparecencia?
Pregunta. La actitud de K?nig fue intolerable antes, durante y despu¨¦s de su comparecencia. No discuto la intervenci¨®n del Popular, pero fue un hecho que provoc¨® la p¨¦rdida de dinero a miles de ciudadanos y el empleo a muchos trabajadores del banco. En este momento tengo dudas sobre si el Popular cay¨® por un problema de liquidez o de solvencia, si se deb¨ªa haber intervenido antes, pero K?nig ten¨ªa que venir al Parlamento a explicarlo, pero lo que hizo fue un desprecio a los ciudadanos.
Respuesta. ?Qu¨¦ condiciones puso?
P. Todas. Result¨® heroico que viniera. Fij¨® el d¨ªa y la hora. Dijo el avi¨®n en el que llegaba y en el que se marchaba, reclam¨® que se le garantizara su seguridad desde el aeropuerto y hubo que recordarle que aqu¨ª han venido presidentes de Estados Unidos o de China, adem¨¢s del Jefe del Estado¡es decir que somos un pa¨ªs homologado de la Uni¨®n Europea. Lleg¨® acompa?ada de m¨¢s de 10 personas, reclam¨® un receso de hora y media y despu¨¦s no respondi¨® a ninguna pregunta.
R. La JUR aleg¨® problemas de traducci¨®n para justificar la dureza de sus declaraciones. ?Qu¨¦ pas¨®?
P. Quiso examinar a los traductores y nos negamos. Se le entreg¨® la grabaci¨®n en ingl¨¦s y no hizo ninguna correcci¨®n porque los funcionarios tienen el m¨¢ximo nivel profesional.
P. ?Qu¨¦ fue lo que le hizo estallar de aquella intervenci¨®n?
R. Que no facilitara informaci¨®n a los portavoces y les dijera que miraran todos los d¨ªas la p¨¢gina web de la JUR porque alg¨²n d¨ªa colocar¨ªan los datos all¨ª. Despreci¨® al Congreso y nos facilit¨® menos informaci¨®n que a los despachos de abogados.
P. K?nig aleg¨® la confidencialidad de los documentos¡
R. Se le ofreci¨® que compareciera a puerta cerrada y que los documentos quedaran bajo el secreto de la comisi¨®n, como se ha hecho en muchas ocasiones. Adem¨¢s, Luis Linde, exgobernador, y Jaime Ponce, presidente del FROB, dijeron que los documentos no ten¨ªan informaci¨®n secreta. Por cierto, Ponce tuvo un comportamiento ejemplar apoy¨¢ndonos en todo momento a la comisi¨®n.
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