El dinero que el BCE dio a la banca sirvi¨® para impulsar el cr¨¦dito
Un estudio del Banco de Espa?a concluye que las operaciones de liquidez conocidas como TLTRO ayudaron a bajar los tipos de inter¨¦s en los pr¨¦stamos de bajo riesgo y a rebajar las condiciones para que las grandes empresas accedan a financiaci¨®n
Ahora que el Banco Central Europeo (BCE) ha puesto en marcha una nueva ronda de inyecci¨®n de liquidez para la banca, el Banco de Espa?a publica un estudio sobre el efecto del primer programa anunciado en junio de 2014 y desarrollado trimestralmente entre septiembre de 2014 y junio de 2016. La conclusi¨®n es que las conocidas como TLTRO (en espa?ol operaciones de refinanciaci¨®n a largo plazo con objetivo espec¨ªfico) sirvieron para facilitar el cr¨¦dito en la zona euro, incluso entre las entidades que no participaron debido a la mayor competencia que foment¨®.
Las TLTRO consist¨ªan en financiaci¨®n hasta en cuatro a?os con condiciones ventajosas siempre que se prestasen. Formaron parte del arsenal que el eurobanco puso en pr¨¢ctica para combatir el peligro de la baja inflaci¨®n y la escasa actividad crediticia, incluyendo las compras de deuda, los tipos negativos o la comunicaci¨®n por adelantado de por d¨®nde ir¨¢ la pol¨ªtica monetaria. Todo ello supuso una revoluci¨®n e introdujo a la eurozona en un terreno por el que ya hab¨ªan transitado Jap¨®n o Estados Unidos. El despliegue de tales herramientas se enfrent¨® a cr¨ªticas feroces y representaba un experimento del que todav¨ªa se desconocen todas las consecuencias.
Represi¨®n financiera
A?os despu¨¦s de la crisis de deuda soberana, el consenso de economistas valora estas iniciativas como un ¨¦xito por haber sacado al euro de las turbulencias. Sin embargo, ya hay algunos sectores que se muestran cr¨ªticos, sobre todo entre los pa¨ªses del norte, que consideran que han estado activas demasiado tiempo, que pueden generar nuevas burbujas y que est¨¢n creando una suerte de impuesto oculto al ahorro, dejando de retribuir a los ahorradores para que los deudores soporten tipos de inter¨¦s m¨¢s bajos. Lo que en econom¨ªa se conoce como represi¨®n financiera. Pese a que Draghi quer¨ªa empezar a deshacer estas pol¨ªticas antes de abandonar el cargo en octubre, la incertidumbre le ha obligado a seguir con ellas. En la ¨²ltima reuni¨®n, no solo posterg¨® la subida de tipos hasta al menos la segunda mitad de 2020. Tambi¨¦n avanz¨® las condiciones de una nueva ronda, la tercera, en la que se pagar¨¢ a los bancos un 0,3% por tomar dinero a dos a?os siempre que presten un m¨ªnimo. De no cumplir con unos objetivos, los bancos tendr¨ªan que abonar, en el peor de los casos, un 0,1%. Y estos tipos pueden variar si el BCE cambia sus tipos. En este contexto, el Banco de Espa?a analiza el resultado de la primera inyecci¨®n, utilizando las respuestas confidenciales que 130 bancos de 13 pa¨ªses remiten al BCE en su encuesta de pr¨¦stamos bancarios. Y el balance que hace el supervisor espa?ol se antoja positivo.
Seg¨²n el estudio del Banco de Espa?a, las TLTRO tuvieron efectos directos e indirectos. Entre los directos, se detecta que las entregas de liquidez contribuyeron a relajar las condiciones para que se concediese cr¨¦dito a las grandes empresas y a bajar los tipos de inter¨¦s que se aplican a los pr¨¦stamos considerados seguros.
Facilitar la liquidez?
El simple hecho de que las entidades hayan participado en las TLTRO no parece que por s¨ª haya fomentado m¨¢s el cr¨¦dito, dice el supervisor espa?ol. Sin embargo, s¨ª que percibe que a mayor liquidez recibida, m¨¢s se ha impulsado el cr¨¦dito. Por un incremento de un punto porcentual en la ratio entre el dinero tomado y los activos que tienen, se observa que las probabilidades de que se relajen los criterios de aprobaci¨®n de cr¨¦dito a las grandes empresas aumentan un 7,2%, y que las probabilidades de que se abarate un pr¨¦stamo de bajo riesgo se elevan un 11,6%.
Respecto al impacto indirecto, el Banco de Espa?a observa que las TLTRO "provocaron una relajaci¨®n de los criterios de aprobaci¨®n de pr¨¦stamos tambi¨¦n en los bancos no participantes, principalmente en aquellos expuestos a altas presiones competitivas", se?ala. Y esto sucedi¨® por dos v¨ªas: por un lado, porque se intensific¨® la competencia y los bancos que recibieron la liquidez fueron capaces de competir de manera "m¨¢s agresiva", lo que hizo que los que no participaban reaccionasen para no perder cuota de mercado.
Por otro, al dar la liquidez a mansalva, los bancos tuvieron que pedir menos financiaci¨®n de dep¨®sitos o interbancaria. Y una vez se retir¨® del mercado una parte de esa demanda de liquidez, eso provoc¨® que la financiaci¨®n se abaratase tambi¨¦n para los que no entraron en la TLTRO. En consecuencia, las entidades que no participaron tambi¨¦n se beneficiaron, y relajaron los criterios de concesi¨®n para las grandes empresas y las pymes, si bien no abarataron mucho la financiaci¨®n que ofrecieron. "El mejor acceso a los mercados de financiaci¨®n m¨¢s que compens¨® el efecto vinculado con la p¨¦rdida de posici¨®n competitiva", concluye el estudio.
La banca espa?ola debe 180.000 millones
La primera TLTRO fueron ocho rondas a una por trimestre. En las dos primeras operaciones, los bancos no pod¨ªan tomar prestado m¨¢s del 7% de lo que ten¨ªan en cr¨¦ditos elegibles, esto es, el conjunto del cr¨¦dito privado concedido salvo hipotecas. Con las seis restantes ten¨ªan que haber demostrado un comportamiento crediticio din¨¢mico. Y si no lo hac¨ªan, deb¨ªan devolver el dinero dos a?os antes: en septiembre de 2016. La participaci¨®n fue muy elevada y se repartieron en total unos 432.000 millones de euros que ya se han reintegrado. Una segunda TLTRO fue implementada entre junio de 2016 y marzo de 2017. Esta operaci¨®n sirvi¨® para refinanciar la primera y el total ascendi¨® a unos 715.000 millones. Aunque se articula a trav¨¦s del Banco de Espa?a, ahora mismo la banca espa?ola debe al BCE unos 180.000 millones. El grueso de esta cifra se explica por la segunda ronda de TLTRO.
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