El virus embiste a los toros

Nada ha quedado al margen de este virus pat¨®geno y demoledor que embiste todo lo que se pone en su camino. La fiesta de los toros, que solo hab¨ªa cesado su actividad durante la epidemia de gripe de 1918, no es una excepci¨®n.

Un espect¨¢culo que reivindica ayudas como una actividad cultural m¨¢s. ¡°La tauromaquia est¨¢ amparada como espect¨¢culo por el Ministerio de Cultura. Queremos un tratamiento igual que los dem¨¢s sectores culturales y pedimos las mismas consideraciones que tienen el resto de las manifestaciones culturales ante esta situaci¨®n. No queremos parecer v¨ªctimas¡±, explica de forma directa y casi vehemente Sim¨®n Casas, presidente de ANOET (Asociaci¨®n Nacional de Organizadores de Espect¨¢culos Taurinos) y gestor de plazas emblem¨¢ticas Madrid o Valencia. ¡°La econom¨ªa de la tauromaquia est¨¢ muy afectada, como el resto de los sectores del pa¨ªs. No somos diferentes. Para muchas ciudades esta actividad representa una industria. La cifra de negocio de producci¨®n alcanza los 1.500 millones de euros, pero el impacto directo suma 4.500 millones¡±, afirma Casas.

Seg¨²n cifras de la asociaci¨®n, el n¨²mero de espect¨¢culos taurinos de todo tipo (corridas, novilladas, ferias en peque?os pueblos¡­) cancelados entre marzo, abril y mayo alcanza los 1.900, que se eleva hasta 3.400 si se incluyen los previstos para el mes de junio.

¡°Nuestra actividad es estacional. Discurre de marzo a octubre y durante el oto?o y el invierno est¨¢ parada. La crisis nos ha pillado en plena temporada taurina. Tambi¨¦n es dif¨ªcil aplazar las corridas o los festejos porque van parejos a las fiestas populares y porque en octubre el tiempo lo pone complicado¡±, explica el presidente de la patronal de los empresarios taurinos.

La tauromaquia es una actividad concentrada en el tiempo, pero diseminada en un sinf¨ªn de sectores que han visto c¨®mo su labor iba cesando en un constante efecto domin¨®. En Espa?a existen m¨¢s de 900 ganader¨ªas de lidia, de las que 248 est¨¢n en Andaluc¨ªa. Entre el 40% y el 70% de los becerros macho nacidos en ellas se destinan a espect¨¢culos taurinos. Para la UCTL (Uni¨®n de Criadores de Toros de Lidia), las p¨¦rdidas estimadas para los ganaderos en un escenario sin temporada taurina superan los 77 millones de euros. ¡°Cada animal que se cr¨ªa para toro bravo tiene un coste de producci¨®n de entre 4.000 y 5.000 euros y tarda entre cuatro y siete a?os. Este a?o en mi ganader¨ªa hab¨ªa 100 toros destinados a estos espect¨¢culos. As¨ª que, si no hay fiesta, solo tengo gastos y cero ingresos. Con 20 empleados en la finca, las p¨¦rdidas se aproximan al medio mill¨®n de euros¡±, expone Victorino Mart¨ªn, presidente de la FTL (Fundaci¨®n Toro de Lidia) y ganadero de largo recorrido.

Efecto domin¨®

Unas p¨¦rdidas que no pal¨ªa la alternativa de vender la carne de toro en el matadero. ¡°El valor de esta carne representa ¨²nicamente el 10% del total, por tanto, la salida para carne no cubre los costes de la ganader¨ªa. El toro cuyo destino es el matadero muchas veces no llega a los 500 euros. Adem¨¢s, el cierre del canal de hosteler¨ªa, unido a la supresi¨®n de actividades taurinas, est¨¢ generando un gran stock y devaluando el precio en origen de la carne¡±, explica Luc¨ªa Mart¨ªn, directora de comunicaci¨®n de UCTL.

Toros que no llegan a las plazas y toreros que no lidian. Una situaci¨®n que dibuj¨® la cancelaci¨®n de las corridas de las Fallas de Valencia. ¡°Valencia se anul¨® cuando se hab¨ªan realizado inversiones de m¨¢s de 500.000 euros, m¨¢s otro tanto que se ha dejado de ganar¡±, afirma Casas. Las p¨¦rdidas en Madrid, la plaza m¨¢s emblem¨¢tica para los aficionados a los toros, que acoge m¨¢s de 600.000 espectadores en la Feria de San Isidro y factura unos 20 o 25 millones de euros entre entradas y abonos, llegar¨ªan a los dos millones de euros. Una caja que ahora se plantea el problema de la devoluci¨®n de los abonos o entradas ya compradas (con una media de 35 euros por d¨ªa). ¡°Tendremos que devolver el dinero. Eso es as¨ª, es ¨¦tico. Cu¨¢ndo y c¨®mo hacerlo, estamos a la espera de lo que nos comente el ministerio¡±, subraya el empresario taurino.

Una situaci¨®n sobrevenida, como lamenta Alberto Garc¨ªa, director general de la empresa Tauroemoci¨®n, dedicada a la organizaci¨®n y gesti¨®n de eventos taurinos con m¨¢s de 18 plazas a su cargo, entre las que est¨¢n Burgos, Ja¨¦n y Vista Alegre (Madrid). ¡°El a?o apuntaba bien y se ve¨ªa movimiento, tras un 2019 bueno en el que hab¨ªamos facturado cinco millones de euros entre plazas y apoderamientos de toreros¡±. Un momento negro que ¡°deber¨ªa servir para reestructurar el sector¡±, a?ade el empresario.

Esta reflexi¨®n muestra su lado m¨¢s oscuro en el sistema de contrataci¨®n de las cuadrillas que est¨¢n sujetas a un sistema especial regulado por un ?real decreto de 1986. ¡°Ni son aut¨®nomos ni pueden estar en un ?ERTE. El contrato nace y finaliza el d¨ªa de la actuaci¨®n¡±, aclara Antonio Jos¨¦ Mart¨ªnez, asesor jur¨ªdico de la asociaci¨®n de picadores y banderilleros. La situaci¨®n afecta a casi 750 afiliados entre ambas profesiones, para los que, en muchos casos, la fiesta taurina es su ¨²nica fuente de ingresos.

El sector tiene en el punto m¨¢s alto de la pir¨¢mide a toreros, novilleros o rejoneadores. Profesionales que, como el conocido maestro pacense Miguel ?ngel Perera, indican que, aunque ten¨ªan siete u ocho corridas contratadas, ¡°este a?o va a pasar en blanco, con cero ingresos¡±. Una punta de la pir¨¢mide que tambi¨¦n acoge a profesionales m¨¢s modestos como el torero sevillano Juan Ortega, que ve c¨®mo sus cuatro corridas contratadas en grandes plazas se han esfumado. ¡°Con lo que me hubiera quedado, alrededor de unos 4.000 euros por tarde, hubiera podido invertir en toros para practicar, en comprar trajes para otros d¨ªas¡­ y me habr¨ªa abierto la puerta de otras plazas. A m¨ª y a la cuadrilla¡±, a?ade.

Y si toreros, banderilleros o picadores no se visten de luces, las sastrer¨ªas son un sector m¨¢s que engrosa la lista de afectados. Un traje de torero cuesta habitualmente entre 3.000 y 4.000 euros, y las grandes figuras suelen ¡°gastar¡± unos seis trajes al a?o. ¡°Nosotros solemos hacer unos 100 trajes cada temporada, m¨¢s arreglos y mantenimientos. La crisis nos ha pillado en el momento de las entregas, pruebas¡­ Ahora no s¨¦ si tengo que seguir o parar, depender¨¢ de cada torero. Tampoco s¨¦ si voy a cobrar lo que est¨¢ hecho¡±, cuenta Santos Garc¨ªa, due?o de la sastrer¨ªa que lleva su nombre y que calcula que su facturaci¨®n (unos 100.000 euros en 2019) se reducir¨¢ un 20% solo con la parada del primer trimestre del a?o. ¡°Tengo cinco empleados directos que no est¨¢n en un ERTE y m¨¢s de 50 indirectos. Debo pensar qu¨¦ direcci¨®n tomar y decidir si me reciclo o no en otros sectores de la confecci¨®n¡±, concluye.

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