McLaren, contra la tormenta perfecta
La crisis de la industria del autom¨®vil, el Brexit, el pozo sin fondo de la F¨®rmula 1 y la covid-19 asedian las finanzas del m¨ªtico fabricante brit¨¢nico
McLaren nunca ser¨¢ Ferrari, pero siempre ser¨¢ el icono tecnol¨®gico de la F¨®rmula 1. Naci¨® en los a?os sesenta, en una ¨¦poca dorada del automovilismo brit¨¢nico, junto a marcas como Vanwall, Cooper, BRM, Lotus, Brabham o Tyrrell. Su fundador, Bruce McLaren, solo gan¨® cuatro grandes premios pero su nombre estar¨¢ siempre ligado a la leyenda de las carreras. Nacido en Nueva Zelanda en 1937, a los nueve a?os sufri¨® una grave enfermedad que le dej¨® con una pierna m¨¢s corta que la otra, pero a los 22 a?os se convirti¨® en el piloto m¨¢s joven ganador de un Gran Premio (EE UU, 1959). Su vida fue corta (muri¨® a los 32 a?os probando uno de sus coches en el circuito de Goodwood, en Inglaterra) pero su legado sigue vivo de la mano de la marca McLaren, s¨ªmbolo si no del ¨¦xito deportivo, s¨ª de la innovaci¨®n, herencia gen¨¦tica de su fundador, en parte piloto, en parte ingeniero, en parte mec¨¢nico.
Todo ese romanticismo no se tradujo en gloria hasta que, en 1974, se alz¨® con el t¨ªtulo de constructores de la mano del m¨ªtico Emerson Fittipaldi, aunque los mejores tiempos llegar¨ªan en los a?os 80 con Ron Dennis al frente del tinglado; Alain Prost, Niki Lauda y Ayrton Senna, al volante y Honda en los motores. Ahora es todo muy distinto. McLaren es un constructor peque?o al lado del imperio germ¨¢nico formado por Mercedes y Red Bull. Peque?o y agobiado por lo que parece una tormenta perfecta: a la crisis general del autom¨®vil se unen los problemas espec¨ªficos por los que atraviesa la F¨®rmula 1, el Brexit y, por si faltaba algo, la dram¨¢tica irrupci¨®n de la covid-19.
Hoy, McLaren ya no es solo un coche de carreras, es una empresa de alta tecnolog¨ªa estructurada en tres divisiones: Racing, que maneja el equipo de F¨®rmula 1; Automotive, el fabricante de coches deportivos de alt¨ªsima gama; y Applied, la divisi¨®n tecnol¨®gica que aporta innovaci¨®n y valor a?adido en sectores que van de la aeron¨¢utica o la medicina a la econom¨ªa de cero emisiones. ¡°McLaren es mucho m¨¢s que un fabricante de autom¨®viles. Es un hub tecnol¨®gico. Es precisamente lo que se supone que deber¨ªa estar haciendo el Reino Unido: no somos buenos compitiendo en la industria masificada, pero s¨ª lo somos en nichos de alta tecnolog¨ªa. Y McLaren simboliza eso¡±, explica el economista David Bailey, profesor de la Universidad de Birmingham y especialista del sector del autom¨®vil.
Los problemas de McLaren se han agudizado con la llegada del coronavirus, pero hab¨ªan empezado antes y ya a principios de a?o tuvo que asegurarse una inyecci¨®n de capital de sus accionistas de 290,7 millones de libras (casi 325 millones de euros). Luego vino la pandemia, que oblig¨® a cerrar la cadena de producci¨®n, pero tambi¨¦n a suspender el campeonato del mundo de F¨®rmula 1, yugulando las dos principales fuentes de ingresos de la compa?¨ªa y provocando una crisis de liquidez. Los ingresos en el primer trimestre del a?o cayeron a 109,4 millones de libras, un 61,5% menos que en el mismo periodo del a?o anterior, y las p¨¦rdidas se elevaron a 13,3 millones de libras, frente a unos beneficios de 73,9 millones en el primer trimestre de 2019. Las ventas de sus supercoches cayeron desde las 953 unidades del primer trimestre del a?o pasado a tan solo 307 este a?o.
¡°Nuestra prioridad es nuestra gente¡±, dijo McLaren al dar cuenta de las medidas que tom¨® y que incluyen el despido de 1.200 de sus 4.000 trabajadores, la inclusi¨®n de varios miles m¨¢s en el llamado furlough (equivalente al ERTE espa?ol) y el recorte de salarios de los pocos que siguen trabajando.
Cr¨¦dito de Bahr¨¦in
La firma de Woping intent¨® negociar ayudas p¨²blicas por valor de 150 millones de libras sin ¨¦xito, aunque ha conseguido suplirlas a trav¨¦s de un cr¨¦dito del Banco Nacional de Bahr¨¦in, vinculado a su principal accionista, el fondo soberano Mumtalakat Holding Co, propietario del 56% de las acciones de McLaren.
El profesor David Bailey opina que ¡°la posici¨®n del Gobierno es un error: en estos momentos me gustar¨ªa ver m¨¢s ayudas a las empresas manufactureras en general y a las de alta tecnolog¨ªa en particular¡±. ¡°El sector se enfrenta a m¨²ltiples problemas: la transici¨®n al coche el¨¦ctrico, los veh¨ªculos aut¨®nomos, el Brexit, recuperarse de la covid-19. La industria del autom¨®vil afronta una amenaza existencial¡±, enfatiza Bailey.
Pero el Gobierno brit¨¢nico, que ha anunciado un nuevo paquete de ayudas econ¨®micas centradas en la hosteler¨ªa, sigue haciendo caso omiso de las demandas del autom¨®vil. ¡°Es amargamente decepcionante que el canciller del Exchequer no haya apoyado el relanzamiento de uno de los sectores que m¨¢s empleo crean y que m¨¢s ayudan al impulso de la econom¨ªa¡±, se lament¨® Mike Hawes, consejero delegado de SMMT, la sociedad que agrupa a la inmensa mayor¨ªa de fabricantes y distribuidores brit¨¢nicos. ¡°Gran Breta?a es la ¨²nica de las cinco grandes econom¨ªas europeas que no est¨¢ dando ninguna ayuda espec¨ªfica a su industria del autom¨®vil¡±, a?adi¨®.
McLaren est¨¢ atrapada entre esa pared contra la que chocan todos (crisis del sector, Brexit, coronavirus) y la espada de sus propios errores, que le han llevado a p¨¦rdidas insostenibles en la divisi¨®n de F¨®rmula 1, un deporte en el que los equipos dependen de tres cosas: el dinero que quieran gastar sus accionistas, el que ganen en funci¨®n de sus resultados deportivos y el que consigan a trav¨¦s de patrocinadores. McLaren flaquea en los tres aspectos. Siempre ha sido peque?a y no tiene acceso a los presupuestos multimillonarios de Mercedes, que se gasta sin problemas m¨¢s de 400 millones anuales en la F¨®rmula 1 porque factura m¨¢s de 93.000 millones de euros al a?o. Una suma que deja en poca cosa los bastante menos de 2.000 millones que ingresa el grupo McLaren en los a?os buenos.
Pero ahora le va peor por su propia culpa. De forma muy sint¨¦tica, sus desgracias empezaron el d¨ªa en que Mercedes, que suministraba a McLaren un gran motor, decidi¨® en 2012 montar su propio equipo de F¨®rmula 1. Ron Dennis pens¨®, quiz¨¢s con raz¨®n, que McLaren nunca volver¨ªa a ganar si depend¨ªa de los motores de un competidor. Y decidi¨® volver al pasado, a Honda, con cuyo motor hab¨ªa logrado grandes ¨¦xitos. Fue un error colosal desde el punto de vista deportivo, aunque comercialmente era una buena operaci¨®n porque Honda aportaba los motores gratis y unos 80 millones anuales en patrocinio. Pero despu¨¦s de varios a?os horribles, McLaren, que ya se hab¨ªa deshecho de Ron Dennis, decidi¨® en 2017 cambiar los motores Honda por Renault. Otro error: deportivamente porque para entonces el motor Honda ya estaba rodado y financieramente porque Renault no aportaba patrocinio.
Todo eso, sin embargo, puede tener ahora soluci¨®n porque McLaren no es el ¨²nico equipo en apuros y la F¨®rmula 1 necesita que haya 10 equipos en la parrilla de salida. Por eso, introducir¨¢ en 2021 un tope de gasto de 140 millones anuales por escuder¨ªa m¨¢s los salarios de los pilotos y los tres salarios m¨¢s altos del equipo. Eso, m¨¢s un nuevo reparto de los ingresos que no favorezca tanto a los equipos ganadores, puede ser la soluci¨®n para McLaren¡ si la covid-19, el Brexit y la crisis del autom¨®vil no acaban antes con la marca.
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