El FMI insta a alcanzar un acuerdo global para gravar a las multinacionales
La directora gerente del Fondo, Kristalina Georgieva, se?ala que es urgente encontrar un consenso para evitar ¡°una espiral ca¨®tica de impuestos o guerras comerciales en las que todos pierden¡±
¡°Es una oportunidad ¨²nica¡±. ¡°Tenemos que estar a la altura¡±. La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, se ha referido con estas palabras a la necesidad de aprovechar este momento hist¨®rico, marcado por una pandemia sin precedentes y la peor crisis econ¨®mica en d¨¦cadas, para ¡°repensar y arreglar el sistema tributario internacional y crear un sistema que sea verdaderamente adecuado para el siglo XXI¡±. La economista ha hecho hincapi¨¦ en la fiscalidad de las multinacionales y ha respaldado la reciente propuesta de Estados Unidos de imponer un tipo m¨ªnimo del impuesto de sociedades a nivel global, mostr¨¢ndose confiada en que este mismo a?o pueda alcanzarse un acuerdo internacional en el seno de la Organizaci¨®n para la Cooperaci¨®n y el Desarrollo Econ¨®micos (OCDE), encargada de coordinar las negociaciones para reformar las reglas fiscales mundiales.
¡°Los impuestos son tan antiguos como la civilizaci¨®n... al igual que los esfuerzos por escapar de ellos¡±, ha dicho Georgieva este martes con ocasi¨®n de la presentaci¨®n del informe del Fondo Impuesto de sociedades bajo presi¨®n. Por qu¨¦ una reforma es necesaria y c¨®mo podr¨ªa ser dise?ada. ¡°Pon un impuesto a las ventanas y la gente las tapiar¨¢. Grava demasiado las importaciones y tendr¨¢s contrabandistas. Grava los ingresos corporativos, y las empresas trasladar¨¢n las ganancias, invertir¨¢n o har¨¢n planes para evitar pagar. Pero los impuestos bien dise?ados pueden minimizar este comportamiento¡±, ha ejemplificado.
Con esta premisa clara, queda establecer c¨®mo hacerlo. Las grandes corporaciones, al calor de la digitalizaci¨®n y la globalizaci¨®n, llevan a?os desviando beneficios a territorios de baja tributaci¨®n para rebajar su factura fiscal. Las artima?as que emplean para mover sus ganancias y reducir sus bases imponibles han impulsado una carrera a la baja en el tipo del impuesto de sociedades en todo el mundo, y han mermado la recaudaci¨®n de los Estados por este tributo. Encontrar una soluci¨®n a este desaf¨ªo, que pone de manifiesto la obsolescencia de unas reglas fiscales dise?adas en los a?os veinte del siglo pasado, se ha hecho a¨²n m¨¢s urgente con la actual crisis, que ha tenido una virulencia comparable solo con los conflictos b¨¦licos y ha generado un enorme agujero en las cuentas p¨²blicas.
¡°Mirando hacia atr¨¢s, el mayor impulsor hist¨®rico de la innovaci¨®n de la pol¨ªtica fiscal ha sido la guerra¡±, ha apuntado Georgieva. ¡°El coste de la Primera Guerra Mundial y la reconstrucci¨®n de la posguerra ayudaron a crear impuestos corporativos modernos. Ahora, nos enfrentamos a dos crisis desastrosas y muy costosas: la covid y el cambio clim¨¢tico. Estas necesidades urgentes, combinadas con un esp¨ªritu renovado de multilateralismo, nos brindan una oportunidad ¨²nica para repensar y arreglar el sistema tributario internacional¡±.
Georgieva ha subrayado que encontrar una soluci¨®n a la tributaci¨®n de las grandes corporaciones ¡°es especialmente importante¡± para los pa¨ªses en desarrollo de bajos ingresos, y ha a?adido que el FMI respalda ¡°plenamente las negociaciones de la OCDE¡±, en la que participan 139 pa¨ªses. Estas se congelaron el a?o pasado despu¨¦s de que Donald Trump decidiera abandonarlas. El nuevo inquilino de la Casa Blanca, Joe Biden, ha cambiado radicalmente la postura de Washington, y ha permitido reactivar las conversaciones multilaterales.
Impuesto m¨ªnimo global
A ese giro en la Administraci¨®n de EE UU se ha referido la directora del FMI, al mencionar que la propuesta de establecer un impuesto m¨ªnimo de sociedades a nivel global ¡°ha dinamizado la conversaci¨®n¡± sobre la reforma de las reglas fiscales. ¡°Este tipo de enfoque multilateral es la ¨²nica forma de garantizar que las multinacionales altamente rentables paguen impuestos suficientes, y los paguen en los pa¨ªses en los que tienen una participaci¨®n significativa¡±, ha dicho Georgieva. ¡°Somos particularmente optimistas con respecto a un acuerdo global sobre el impuesto de sociedades en 2021, este a?o. Y se necesita urgentemente para evitar, en el futuro, el riesgo de caer en una espiral ca¨®tica de impuestos o guerras comerciales en las que todos pierden¡±.
La economista jefa del Fondo, Gita Gopinath, ya hab¨ªa afirmado el mes pasado que el FMI est¨¢ a favor de la propuesta estadounidense, en la en¨¦sima se?al de que el organismo pretende alejarse de la imagen de austeridad y recortes que la caracteriz¨® tras la anterior crisis financiera. Al inicio de la pandemia, Georgieva pidi¨® a los Gobiernos abrir al m¨¢ximo el grifo del gasto; despu¨¦s, recomend¨® elevar los impuestos a los m¨¢s ricos y las empresas m¨¢s rentables para costear los servicios p¨²blicos y crear un impuesto temporal a las rentas m¨¢s altas y las multinacionales.
¡°?Qu¨¦ est¨¢ mal en el sistema actual y por qu¨¦?¡±, se ha preguntado Georgieva. ¡°?C¨®mo deber¨ªamos tratar a las empresas digitalizadas que operan a nivel internacional y que est¨¢n entre las m¨¢s valiosas y rentables del mundo? A muchas de ellas les ha ido muy bien durante la pandemia, haciendo negocio en casi todos los pa¨ªses. Pero las reglas [fiscales] centenarias otorgan derechos impositivos solo a los pa¨ªses donde las empresas tienen presencia f¨ªsica. Los gigantes de internet, y muchas otras sociedades, tambi¨¦n eluden impuestos moviendo activos intangibles valiosos y desviando beneficios a territorios con impuestos bajos. ?C¨®mo solucionamos esto?¡±.
El informe publicado este martes por el FMI analiza la estructura fiscal internacional y pone sobre la mesa posibles reformas para gravar a las multinacionales. Entre ellas, modificar el concepto de ¡°establecimiento permanente¡± y las reglas para asignar los beneficios de las grandes corporaciones, elementos que deben combinarse con una mejor cooperaci¨®n internacional y transparencia.
Georgieva ha cerrado su intervenci¨®n con una an¨¦cdota relativa al impuesto sobre las ventanas, instaurado en el siglo XVIII en el Reino Unido. ¡°Se ide¨® como una innovaci¨®n: aumentar la privacidad, al permitir que los inspectores fiscales hicieran su trabajo sin entrar a los hogares. Pero cuando la gente empez¨® a tapiar las ventanas, se distorsion¨®: se transform¨® en un tributo odiado sobre la luz y el aire fresco¡±, ha dicho. ¡°El sistema internacional de impuestos corporativos se ha vuelto igualmente oscuro y distorsionado. Pero tenemos una oportunidad especial este a?o para traerle la luz de la simplicidad y la justicia. Debemos estar a la altura de las circunstancias¡±.
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