Un ¨®rgano crucial en tiempos de cambio
El consejo debe ser ¨¢gil en la respuesta y tiene que saber escuchar para garantizar el contraste de pareceres
En un entorno empresarial en continuo debate hay una premisa com¨²n e indiscutible: el rol del consejo es hoy m¨¢s crucial que nunca. Tras guiar a las empresas en uno de los periodos de mayor complejidad e incertidumbre que todos recordamos, es momento de mirar hacia el futuro. En un contexto adem¨¢s que emana optimismo, pero en el que la incertidumbre nos acompa?a en cada paso, y en el que es necesario dar respuesta a las exigencias regulatorias y al mayor escrutinio por parte de los grupos de inter¨¦s.
En su ejercicio de supervisi¨®n y asesoramiento, el consejo requiere de unas habilidades excepcionales, que transitan entre la experiencia y la intuici¨®n. Y que fueron objeto de an¨¢lisis en el IX Foro del Consejero, organizado por KPMG y el IESE en colaboraci¨®n con la Asociaci¨®n Espa?ola de Directivos y For¨¦tica, y que, como cada a?o, permiti¨® reflexionar y compartir experiencias sobre el relevante papel de este ¨®rgano clave para las empresas y del que se extrajeron conclusiones de valor.
En primer lugar, la aceptaci¨®n de que ning¨²n modelo de liderazgo es m¨¢s v¨¢lido que otro. Bajo la premisa de que el consejo debe ser ¨¢gil en su respuesta a un entorno cambiante, el ¨¦xito pasa por disponer de un modelo eficiente y adaptado a la realidad de la compa?¨ªa. Que vele por la compenetraci¨®n entre los miembros del consejo y el comit¨¦ de direcci¨®n. Que garantice la capacidad de escuchar, que permita el contraste de pareceres y la toma de decisiones. Y, sobre todo, que sea diverso en su sentido m¨¢s amplio, para garantizar la riqueza de conocimiento.
No debemos olvidar que, dada la relevancia de la toma de decisiones que afrontan las empresas ¡ªcon impacto en el crecimiento de la econom¨ªa y su competitividad¡ª, ning¨²n consejo puede tener la certeza de saber todo. Es una posici¨®n con una exigencia y relevancia ante la que, tal y como afirm¨® Rodrigo Buenaventura, presidente de la CNMV, quiz¨¢ se est¨¢ creando una ¡°expectativa de superhombres y supermujeres que lideren, controlen, gestionen e inspiren organizaciones que ya son de por s¨ª extremadamente complejas¡±.
Es por ello que el talento es un pilar fundamental en el consejo y se debe revisar de forma continua que se disponen de todas las competencias que demanda el entorno, el sector y la estrategia de la organizaci¨®n. Actualizar los conocimientos, a trav¨¦s de la formaci¨®n continua de cada uno de sus miembros, y contar con diversidad en su composici¨®n es crucial para asegurar una visi¨®n basada no solo en la experiencia, sino en la perspectiva de los directivos y empresarios que constituyen el consejo.
Otra reflexi¨®n sustancial tiene que ver con las tres siglas que ¨²ltimamente resuenan en cada encuentro empresarial: ESG, las letras que enmarcan la sostenibilidad, la responsabilidad y el buen gobierno y que pueden ser percibidas por los m¨¢s esc¨¦pticos como una especie de ¡°burbuja verde¡± que sobredimensione su relevancia. Nada m¨¢s lejos de la realidad, ya que en el IX Foro del Consejero se pudo comprobar, una vez m¨¢s, c¨®mo estos factores realmente son parte de la visi¨®n estrat¨¦gica.
La trascendencia del ESG responde a la confluencia de tres factores: el aumento de la regulaci¨®n, como respuesta al mayor escrutinio por parte de todos los grupos de inter¨¦s sobre el impacto positivo de las empresas en el medio ambiente y en la sociedad; la conciencia de las propias organizaciones, que buscan sumar fuerzas hacia el objetivo conjunto de alcanzar una econom¨ªa m¨¢s sostenible al tiempo que abordan un riesgo cada vez m¨¢s preocupante como es el cambio clim¨¢tico; y la certeza de que la sostenibilidad es sin¨®nimo de crecimiento, algo que los mercados de capitales as¨ª est¨¢n valorando.
Sin embargo, esta transformaci¨®n no est¨¢ exenta de un esfuerzo de adaptaci¨®n, dado el aumento de la exigencia por parte de inversores y proxies, de la sociedad y empleados, y de que la regulaci¨®n acompa?e estas demandas. Los consejeros, en su labor de debida diligencia, dedican cada vez m¨¢s tiempo y atenci¨®n a las cuestiones ESG, unos factores transversales a toda la compa?¨ªa que requieren de experiencia y conocimiento. Prueba de ello es el aumento vertiginoso en los ¨²ltimos a?os de la creaci¨®n de comisiones dedicadas a esta materia, con el objetivo de darle la importancia adecuada y adicionalmente lanzar un mensaje de credibilidad, tanto hacia los stakeholders como a todas las unidades de negocio.
Otra reflexi¨®n relevante vino de la mano del complejo equilibrio entre el corto y largo plazo. El consejo debe ejercer su labor de garante de la supervivencia de la compa?¨ªa en un entorno complejo, pero sin dejar de lado su labor de identificaci¨®n de oportunidades. Especialmente en materia de operaciones corporativas, ya que, pese a la necesaria convivencia con la incertidumbre, lo cierto es que las expectativas son de crecimiento y optimismo.
Para ello es fundamental la diligencia del consejo, disponer de un proceso industrializado que permita asegurar que cada una de las operaciones corporativas que se valoran contribuye a sumar en la estrategia de la compa?¨ªa. Los consejeros han de valorar en cada caso si la operaci¨®n redundar¨¢ en el crecimiento de la organizaci¨®n, teniendo sensibilidad hacia el entorno y analizando en detalle sus implicaciones. Todo un juego de equilibrio que a?ade, si cabe, mayor exigencia al consejo.
Para alcanzar todos sus objetivos, las organizaciones tambi¨¦n deben prestar una especial atenci¨®n a sus comisiones de auditor¨ªa. Este organismo, con un papel fundamental como garante de la supervisi¨®n adecuada de los riesgos, ha visto evolucionar sus funciones desde el an¨¢lisis de los estados financieros hasta una revisi¨®n exhaustiva de todos los riesgos que puedan afectar a los mismos. Un aspecto ante el que, una vez m¨¢s, disponer de un ¨®rgano diverso, con conocimiento y experiencia en diferentes ¨¢mbitos, permitir¨¢ un mayor y mejor an¨¢lisis y control de todos los riesgos que afecten al modelo de negocio.
En este sentido, y como consecuencia del impulso de la digitalizaci¨®n a la que hemos asistido en el ¨²ltimo a?o, la ciberseguridad volvi¨® a ocupar parte importante del an¨¢lisis. Y es que, pese a que la seguridad total no pueda garantizarse, s¨ª se puede disponer de un plan de reacci¨®n adecuado, que garantice en ¨²ltima instancia la continuidad de negocio. Y para el que es necesario contar con la informaci¨®n adecuada, que permita la toma de decisiones precisas.
En definitiva, un a?o m¨¢s, el IX Foro del Consejero supuso un encuentro que puso de manifiesto la relevancia de un ¨®rgano que no solo vela por que las decisiones de las empresas impulsen su crecimiento y competitividad, sino que respondan a las exigencias regulatorias y atiendan a las crecientes demandas de los grupos de inter¨¦s. Una gu¨ªa en medio de la incertidumbre, un garante de la estabilidad en tiempos de cambio.
Hilario Albarrac¨ªn es presidente de KPMG.
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