El Gobierno a¨²n conf¨ªa en recuperar a la patronal para la reforma laboral tras la ruptura en pensiones
Yolanda D¨ªaz: ¡°Es dif¨ªcil, pero trabajamos para el s¨ª¡±
El Gobierno a¨²n conf¨ªa en que la patronal se sume al pacto de la reforma laboral despu¨¦s de haberse descolgado del acuerdo para la reforma de las pensiones. El Ejecutivo admite la dificultad, y m¨¢s despu¨¦s de la ruptura en pensiones tras casi dos a?os de idilio y 12 acuerdos, pero lo va a intentar hasta el final y cree que la patronal puede tener muchos m¨¢s incentivos para estar en este acuerdo porque hay un amplio margen de puntos a negociar y puede ser mucho mejor estar dentro que fuera. ¡°Me quedo con unas palabras de la jurista que representa a la CEOE: dec¨ªa que el reto es complejo, pero no imposible¡±, ha se?alado Yolanda D¨ªaz, vicepresidenta segunda y responsable de la negociaci¨®n como ministra de Trabajo.
La distancia entre la patronal y el Ejecutivo ha quedado en evidencia esta ma?ana en un desayuno en La Moncloa, convocado cuando se cerr¨® el acuerdo, en el que han estado el presidente del Gobierno, Pedro S¨¢nchez, las vicepresidentas Nadia Calvi?o, Yolanda D¨ªaz y Teresa Ribera; as¨ª como por las ministras de Hacienda, Mar¨ªa Jes¨²s Montero; y de Industria, Turismo y Comercio, Reyes Maroto; y del ministro de Seguridad Social, Jos¨¦ Luis Escriv¨¢, con los secretarios generales de UGT, Pepe ?lvarez, y CC OO, Unai Sordo. El encuentro era para celebrar el acuerdo en pensiones, as¨ª que no estaban invitados los representantes de las patronales CEOE y Cepyme, lo que ha evidenciado la tensi¨®n. Sin embargo, fuentes del Ejecutivo se?alan que el encuentro puede tener un efecto disuasorio para la patronal, que ve que el Gobierno est¨¢ dispuesto a seguir adelante en temas trascendentales aunque no est¨¦n ellos. De hecho ha sido el sector socialista, en teor¨ªa el m¨¢s proclive a incluir a la patronal en los acuerdos, el que ha cerrado este pacto ¨Dgestionado sobre todo por Inclusi¨®n y Econom¨ªa sin apenas participaci¨®n de Trabajo¨Dsin los empresarios, mientras en la negociaci¨®n de la reforma laboral que lidera D¨ªaz (de Unidas Podemos) a¨²n se intenta incorporarlos.
Tanto los ministros como los sindicalistas se?alaron en ese desayuno que es importante que est¨¦ la patronal y la mayor¨ªa de las intervenciones se?alaron que es factible, porque se juega mucho en la reforma laboral y tendr¨¢ muchos incentivos para estar, seg¨²n fuentes presentes en la cita. Fuentes de la patronal rechazan adem¨¢s, al contrario de lo que se?alan algunos en el Ejecutivo, que se hayan ca¨ªdo del acuerdo de pensiones por presiones pol¨ªticas de sectores conservadores o directamente del PP. ¡°El acuerdo en la CEOE se ha alcanzado por unanimidad para rechazar el texto y quien ha presionado todo el fin de semana ha sido el Gobierno para que entr¨¢ramos, no ha llamado nadie del PP¡±, se?alan estas fuentes. ¡°Lo importante es que haya dialogo social, que es un proceso que le da legitimaci¨®n a las decisiones del Ejecutivo. Y en la reforma de pensiones lo ha habido. Desconozco si hay presiones pol¨ªticas, les corresponde a la patronal explicarlo. Me consta que ellos trabajan con rigor¡±, ha se?alado D¨ªaz cuando le han preguntado por este asunto.
Muchas horas por delante
D¨ªaz ha explicado la situaci¨®n de la negociaci¨®n, que se est¨¢ acelerando y se tiene que cerrar este mes. ¡°Habr¨¢ mesa ma?ana y el viernes. Y durar¨¢ muchas horas. Todos los agentes se est¨¢n dejando la piel en esta negociaci¨®n. Lo importante es el di¨¢logo social, que existe en este pa¨ªs como casi en ning¨²n otro. Hay acuerdos en una ley como la transparencia retributiva que CEOE no quiso firmar, pero lleva su impronta, en pensiones ha pasado lo mismo aunque no hayan querido firmar. Hemos suspendido todas las agendas para volcarnos en esto¡±.
La vicepresidenta ha admitido que el acuerdo no est¨¢ cerca, pero a¨²n lo ve posible. ¡°Es dif¨ªcil, s¨ª. Y el problema est¨¢ en la temporalidad, y no en otras cosas, porque nunca se ha abordado este asunto en Espa?a. Desde 1988, con la gran huelga general [contra el Gobierno de Felipe Gonz¨¢lez], los planteamientos han sido un¨ªvocos en cuestiones laborales. Vamos a cambiar el paradigma sabiendo que en Espa?a tenemos sectores que son estacionales. Podemos hacerlo. Trabajamos para el s¨ª, vamos a dejar trabajar la mesa¡±, ha rematado.
La ministra portavoz, la socialista Isabel Rodr¨ªguez, ha defendido adem¨¢s el acuerdo con los sindicatos para la reforma de las pensiones, del que se ha descolgado la patronal. ¡°Cumplimos y vamos a cumplir con Europa en materia de pensiones y tambi¨¦n con la ciudadan¨ªa. Se han incrementado las pensiones y ahora vamos a garantizar que los pensionistas de ma?ana tengan seguridad. Vamos a volver a llenar la hucha de las pensiones. El PP se dedic¨® a recortar pensiones. Ya avanzamos en julio que ¨ªbamos a subir las pensiones. Hemos avanzado un paso m¨¢s en el compromiso con un pacto intergeneracional de rentas¡±.
En el seno del empresariado tampoco creen que la contaminaci¨®n de las pensiones vaya a extenderse a la negociaci¨®n de la reforma laboral. ¡°No hay riesgo de que el n¨²cleo de la negociaci¨®n vaya a saltar por los aires¡±, admite una fuente cercana a la CEOE. El ¨²nico peligro, sin embargo, puede alojarse en que no se resuelva a tiempo. ¡°A¨²n con este nuevo ritmo de dos reuniones semanales, puede que no se acuerde antes del 31 de diciembre¡±, opina la misma fuente. De darse este escenario, una de las posibilidades que barajan los empresarios es que el nuevo marco de relaciones laborales se apruebe por medio de un real decreto ley en esa fecha, pero que su convalidaci¨®n se vaya hasta enero.
Sin sorpresas
El resultado de la reuni¨®n del lunes en la que se cristaliz¨® el descuelgue de los empresarios fue de todo menos inesperado, a pesar que desde el Ejecutivo s¨ª ven presiones del PP detr¨¢s de la decisi¨®n final de la patronal. Seg¨²n relatan algunas fuentes presentes en el encuentro, la postura de partida de Antonio Garamendi, presidente de la CEOE, fue la de plantarse ante la ¨²ltima propuesta de Escriv¨¢. Una proposici¨®n que ya repart¨ªa el 0,6% de incremento de las cuotas sociales en un 0,5% para los empresarios, y un 0,1% para los trabajadores. El descuelgue, se?alan, no funcion¨® como detonante para que el reparto fuera a¨²n m¨¢s gravoso para los empresarios.
El no final tampoco se sustent¨® en ning¨²n tipo de presi¨®n interna, sostienen las mismas fuentes. Empresas de sectores como el agroalimentario o los aut¨®nomos (principalmente ATA) rechazaron de plano la propuesta de Escriv¨¢ y se colocaron junto a Garamendi. Organizaciones como la Confederaci¨®n Empresarial de Madrid (CEIM), que en otras materias han mostrado una mayor beligerancia contra el l¨ªder de los empresarios, tampoco pusieron en jaque su postura.
Sin embargo, la forma en la que se ha querido retratar este descuelgue, con el desayuno de esta ma?ana en La Moncloa tampoco ha gustado a los empresarios. Defienden que el establecimiento del Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI) era una prerrogativa del Gobierno, para la que no requer¨ªa el benepl¨¢cito de los agentes sociales. Los t¨¦rminos en los que se llevar¨ªa a cabo, a?aden, ya estaban predefinidos el Pacto de Toledo, por lo que no entienden que se les sit¨²e en el costado oscuro de la historia.
La justificaci¨®n t¨¦cnica de su rechazo no tiene tanto que ver con la cuant¨ªa del aumento en las cotizaciones ¡ªque supondr¨¢ entre 63 y 244 euros al a?o, en funci¨®n de la base de cotizaci¨®n de cada trabajador¡ª, sino con el bote acumulado que arrastran tras la ¨²ltima subida del salario m¨ªnimo interprofesional (SMI). El incremento dictaminado en septiembre de 15 euros hasta los 965 en 14 pagas mensuales en los que se compone ahora el SMI, junto con la perspectiva de que este vuelva a incrementarse en 2022 y 2023 eleva la cuenta de gastos para los empresarios. No necesariamente porque el colectivo de beneficiarios del salario m¨ªnimo sea muy amplio ¡ªlas estimaciones de Trabajo lo reducen a un mill¨®n y medio de personas¡ª, sino porque este incremento obliga a subir los salarios de aquellos que se queden por debajo de este nuevo m¨ªnimo. A lo que se suma tambi¨¦n las subidas de los salarios por convenio que se producir¨¢n como consecuencia del aumento de la inflaci¨®n.
A pesar de que el acuerdo del MEI se circunscribe al refuerzo de la hucha de las pensiones y al uso del Fondo de Reserva en caso de un desv¨ªo del gasto, a los empresarios les preocupa otra de las ideas que sobrevuelan la reforma laboral como es el destope de las cotizaciones m¨¢ximas, y que esto no lleve aparejado un aumento de las pensiones m¨¢ximas. Actualmente, la base de cotizaci¨®n m¨¢xima de un trabajador es de 4.070,10 euros mensuales (48.841,2 euros anuales), mientras que la pensi¨®n m¨¢xima en 2021 ha pasado a ser tras el aumento del 0,9% decretado por el Gobierno de 2.707,49 euros en 14 entregas, y sin perjuicio de las pagas extraordinarias.
El Ejecutivo, sobre todo el sector socialista, quiere a toda costa incluir a los empresarios en ese cambio trascendental, y no solo a los sindicatos, porque cree que as¨ª la reforma laboral tendr¨¢ mucha m¨¢s solidez y ser¨¢ aceptada mejor en Bruselas. En el Gobierno entienden que Antonio Garamendi, l¨ªder de la patronal, tiene mucha presi¨®n interna con un ambiente pol¨ªtico muy recalentado en la oposici¨®n y sobre todo ve en el horizonte una subida mayor de las cotizaciones que la decidida ahora ¡ªmuy peque?a¡ª cuando se apruebe subir el tope m¨¢ximo, algo que llegar¨¢ probablemente en 2022. En julio, cuando firm¨® el acuerdo de pensiones con gran pompa en La Moncloa con Pedro S¨¢nchez, Garamendi reivindic¨® el ¡°sentido de Estado¡± de la patronal. Entonces sufri¨® fuertes cr¨ªticas internas y en el mundo conservador, acrecentadas despu¨¦s por una pol¨¦mica frase sobre los indultos a los presos del proc¨¦s que despu¨¦s tuvo que matizar. Ahora se ha quedado fuera tras intensas negociaciones y conversaciones al m¨¢ximo nivel.
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