La OMC advierte de que el atasco global tardar¨¢ meses en resolverse

El atasco global que tiene atenazadas las cadenas de suministro a¨²n tardar¨¢ en disolverse. La directora general de la Organizaci¨®n Mundial del Comercio (OMC), Ngozi Okonjo-Iweala, no cree que los problemas de oferta que han causado problemas de desabastecimiento en varias industrias y que est¨¢n presionando a la baja las perspectivas de crecimiento econ¨®mico sean permanentes, aunque seguir¨¢n causando estragos hasta bien entrado 2022.

¡°Es un asunto transitorio, no estructural, pero a¨²n tardar¨¢ meses en resolverse¡±, ha subrayado Okonjo-Iweala en un encuentro virtual con medios internacionales, entre ellos EL PA?S. ¡°?Cu¨¢ntos meses? No puedo decir con exactitud si ser¨¢n seis o diez, pero se solventar¨¢. Insisto: no estamos hablando de algo estructural¡±, a?ade.

La economista nigeriana, que est¨¢ al frente de la organizaci¨®n que regula las relaciones comerciales entre pa¨ªses desde el pasado mes marzo y tiene por delante el reto de recuperar la utilidad de un organismo al que la Administraci¨®n de Donald Trump conden¨® al ostracismo, reconoce que el problema causado por el cortocircuito de la cadena de suministros ¡ªespecialmente visible en sectores como el de los semiconductores¡ª es ¡°importante y est¨¢ llevando a presiones inflacionarias en varias zonas del mundo¡±.

En un tono m¨¢s pesimista que la jefa de la OMC se expresaba la semana pasada la nueva directora de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (Unctad, por sus siglas en ingl¨¦s), Rebeca Grynspan. ¡°No veo que [las tensiones de oferta] vayan a resolverse a corto plazo. ?2022? Ojal¨¢, pero creo que puede tardar m¨¢s, sobre todo en los pa¨ªses en desarrollo¡±, remarcaba en una entrevista con este diario, en la que ped¨ªa a los bancos centrales cautela a la hora de subir los tipos de inter¨¦s: ¡°No solo no ayudar¨ªa, sino que podr¨ªa reproducir los cuellos de botella¡±.

Fallo de c¨¢lculo de las navieras

El origen del desaguisado est¨¢, enfatiza Okonjo-Iweala, en la discordancia entre una demanda que no ha dejado de aumentar despu¨¦s de dejar atr¨¢s lo m¨¢s crudo de la pandemia y una oferta, en el mejor de los casos, estable. Hay, dice, una ¡°constelaci¨®n de factores¡± detr¨¢s. ¡°Del lado de la demanda est¨¢n importantes est¨ªmulos fiscales que han puesto en marcha muchos pa¨ªses, sobre todo Estados Unidos, y que han hecho crecer la demanda¡±, apunta. ¡°Del de la oferta, las navieras y otros calcularon mal el ritmo al que la econom¨ªa global iba a rebotar y no invirtieron durante el confinamiento, pensando que ven¨ªa una recesi¨®n profunda¡±, critica al otro lado de la pantalla.

En las ¨²ltimas semanas, la presi¨®n ha empezado a amainar, invitando a un cierto optimismo. Pero la velocidad a la que est¨¢n bajando los fletes es a todas luces insuficiente como para considerar que la resoluci¨®n del entuerto pueda llegar a corto plazo.

El transporte de mercanc¨ªas por mar empez¨® a encarecerse en el tramo final del a?o pasado y aceler¨® su ritmo de crecimiento la pasada primavera. En lo que va de a?o, los fletes m¨¢s que duplican su precio, que casi se sextuplica desde el peor momento de la crisis sanitaria y econ¨®mica. En algunos casos, el aumento es a¨²n mayor: hoy, llevar un contenedor est¨¢ndar, de 40 pies, de Shangh¨¢i (China) a R¨®terdam (Pa¨ªses Bajos) ¡ªuna de las rutas m¨¢s utilizadas entre Asia y Europa¡ª cuesta casi 13.500 d¨®lares (12.000 euros), frente a los poco m¨¢s de 2.000 de hace solo doce meses. En ese mismo periodo, el coste de trasladar el citado contenedor de Shangh¨¢i a Los ?ngeles (EE UU) ha pasado de 4.000 a 10.000 d¨®lares.