Se busca un mill¨®n de firmas para que la UE cree un impuesto sobre el 1% m¨¢s rico
Un grupo de economistas, activistas y millonarios de siete pa¨ªses del bloque registra una iniciativa ciudadana para que Bruselas grave las grandes fortunas
El 1% m¨¢s rico de Europa acumul¨® entre 2020 y 2021, en plena crisis del coronavirus, casi la mitad de la nueva riqueza generada en el continente. Ahora, un grupo de economistas, activistas, pol¨ªticos y millonarios de siete pa¨ªses europeos ha registrado una iniciativa ciudadana para pedir a Bruselas que se ponga manos a la obra y confeccione un impuesto europeo sobre las mayores fortunas del bloque. En un mes, el Ejecutivo comunitario dar¨¢ una respuesta. Si considera que la propuesta re¨²ne los requisitos b¨¢sicos ¡ªalgo que suele ocurrir¡ª, los impulsores tendr¨¢n un a?o para recoger un mill¨®n de firmas.
La propuesta solicita ¡°a la Uni¨®n Europea que adopte un impuesto anual permanente sobre el patrimonio de las mayores fortunas de Europa para aumentar los ingresos a reducir la pobreza y la desigualdad tanto en casa como en los pa¨ªses m¨¢s pobres, y abordar la crisis clim¨¢tica¡±, se?ala la nota que da a conocer la iniciativa, que ha sido registrada este jueves como iniciativa ciudadana europea. Este instrumento permite a los ciudadanos de la Uni¨®n solicitar al Ejecutivo comunitario que plantee nuevas leyes.
¡°Un impuesto sobre el patrimonio puede ayudar a revertir los niveles insostenibles de desigualdad actuales y desbloquear los miles de millones que necesitan las personas y el planeta. Es lo que necesitamos para una Europa y un mundo m¨¢s justos¡±, ha dicho Lars Koch, director ejecutivo de Oxfam Dinamarca y uno de los impulsores de las propuestas. La ONG calcula que un gravamen anual europeo sobre las grandes fortunas, del 2% para los millonarios con un patrimonio superior a los 5 millones de d¨®lares, del 3% para m¨¢s de 50 millones y del 5% para los multimillonarios, casi 250.000 millones de euros al a?o.
Los dem¨¢s firmantes de la iniciativa son el economista y pol¨ªtico h¨²ngaro L¨¢szl¨® Andor, ex comisario europeo de Empleo y Derechos sociales, la heredera austriaca Marlene Engelhorn ¡ªque renunci¨® a la fortuna que le corresponde, el director ejecutivo de Oxfam Dinamarca Lars Koch, el economista Patrizio Laina (Finlandia), la eurodiputada francesa Aurore Lalucq, del partido de centro-izquierda Place Publique, el pol¨ªtico socialista Paul Magnette (B¨¦lgica), el economista franc¨¦s Thomas Piketty y el coordinador global de la Alianza Progresista, Conny Reuter (Alemania).
El pasado marzo, m¨¢s de 100 eurodiputados, algunos de los economistas m¨¢s destacados del ala de pensamiento progresista, como Gabriel Zucman y Joseph Stiglitz y a la asociaci¨®n Patriotic Millionaires ¡ªuna organizaci¨®n de ricos estadounidenses que pide una reforma fiscal para pagar m¨¢s impuestos¡ª, ya hab¨ªan pedido a la UE que introdujera un impuesto progresivo sobre la riqueza extrema.
El impulso de las crisis
Tambi¨¦n a nivel global los megaricos han inflado sus fortunas en este periodo de turbulencias econ¨®micas y sociales. En los dos primeros a?os de la pandemia, el 1% m¨¢s acaudalado concentr¨® el 63% de toda la nueva riqueza generada ¡ªunos 26.000 millones de d¨®lares¡ª. El 99% restante se qued¨® con el 37%, unos 16.000 millones. En Espa?a, la riqueza de los milmillonarios ha aumentado en casi 3.000 millones de d¨®lares desde 2020.
Pero este periodo convulso tambi¨¦n ha impulsado nuevos movimientos. El estallido de la pandemia, que ha golpeado de manera desigual a los distintos estratos de la poblaci¨®n y se ha cebado con los m¨¢s vulnerables, ha sido, en cierto sentido, un motor para retomar las conversaciones sobre la contribuci¨®n fiscal de los m¨¢s pudientes, tanto empresas como personas f¨ªsicas, ante unas cuentas p¨²blicas depauperadas por la situaci¨®n econ¨®mica. Desde la irrupci¨®n del virus se han multiplicado las voces, tambi¨¦n en ambientes liberales, que exigen a estos contribuyentes aportar m¨¢s a las arcas p¨²blicas. De hecho, fue en 2021 cuando la OCDE, tras ocho a?os de trabajos, alcanz¨® un acuerdo entre m¨¢s de 130 pa¨ªses para imponer un tipo m¨ªnimo del 15% a las multinacionales.
Con la guerra en Ucrania y la explosi¨®n de los precios energ¨¦ticos, estas voces han ganado m¨¢s decibelios y han aumentado los partidarios de pedir un mayor esfuerzo a los m¨¢s ricos y a las empresas que gracias a la crisis han engordado sus n¨²meros. El caso m¨¢s paradigm¨¢tico es el de las energ¨¦ticas, que han disparado sus beneficios con el encarecimiento del gas y la electricidad. Varios pa¨ªses, entre ellos Espa?a, han optado ¡ªaunque con f¨®rmulas muy distintas¡ª por gravar estos beneficios extraordinarias, pero son menos frecuentes los impuestos a las grandes patrimonios. El Gobierno espa?ol ha implementado un nuevo impuesto a las grandes fortunas, de manera temporal durante dos a?os, para recaudar en total unos 3.000 millones. Pero es muy probable que estos n¨²meros no se alcancen: se trata de bases imponibles muy m¨®viles, que pueden irse a otro lugar con fiscalidad m¨¢s ventajosa, como ocurre con el impuesto de sociedades.
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