Madrid construye en nueve a?os casi tres veces m¨¢s vivienda protegida que Catalu?a
Un estudio de la Universitat Pompeu Fabra advierte de los problemas de financiaci¨®n de los pisos sociales, cuya construcci¨®n acumula unos datos ¡°rid¨ªculos¡±
La vivienda de protecci¨®n oficial (VPO) de alquiler en Espa?a se halla en una d¨¦cada perdida: las estad¨ªsticas apenas recuerdan menos construcci¨®n de pisos sociales. Pero esos bajos niveles no han impedido grandes diferencias por territorios, como que en la Comunidad de Madrid se hayan construido casi tres veces m¨¢s vivienda con esa calificaci¨®n que en Catalu?a desde 2014, pese a que ambas autonom¨ªas cuentan con un peso de poblaci¨®n similar. Es uno de los datos, procedentes de las estad¨ªsticas del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, que recoge un estudio elaborado por la c¨¢tedra que comparten la Universitat Pompeu Fabra (UPF) y la Asociaci¨®n de Promotores de Catalu?a.
El documento aflora una cuesti¨®n sintom¨¢tica de la salud por la que pasan los pisos sociales: cada a?o hay m¨¢s de diez comunidades que no han acabado ninguna vivienda de protecci¨®n. En 2022 fueron 11, pero en 2018 llegaron a ser 15 las autonom¨ªas que no iniciaron ninguna vivienda social. La raz¨®n, seg¨²n concluyen sus autores, es que ¡°las Administraciones no han sido nada eficientes en articular un sistema adecuado y de confianza para los promotores, p¨²blicos o privados¡±.
Carles Sala, coautor del estudio La promoci¨®n de vivienda en los planes estatales y los fondos Next Generation junto a los profesores de la UPF Jos¨¦ Garc¨ªa Montalvo y Josep Maria Raya, ha calificado este mi¨¦rcoles las cifras de vivienda protegida en Espa?a de ¡°rid¨ªculas¡±. Y acerca del caso espec¨ªfico de Madrid, donde m¨¢s se VPO se ha construido en Espa?a: ¡°Siguen siendo rid¨ªculas¡±.
Los datos que ilustran el estudio muestran como entre 2014 y 2022 en Madrid se construyeron 5.184 pisos protegidos, mientras que la segunda comunidad fue el Pa¨ªs Vasco, con 2.231 viviendas. Catalu?a se situ¨® en las 1.856. El resto de gobiernos regionales quedaron a mucha distancia: el cuarto, el de Navarra, se qued¨® en 766 unidades. En total, en los nueve ¨²ltimos a?os apenas se han construido 11.469 pisos de protecci¨®n en toda Espa?a. Si se tiene en cuenta el parque total de vivienda, los m¨¢s de 5.000 pisos de Madrid suponen un 0,13% del total, mientras que ese porcentaje escala hasta el 0,21% en el caso del Pa¨ªs Vasco. Catalu?a no alcanza la d¨¦cima (0,05%) y Navarra obtiene el dato m¨¢s alto, un 0,25%.
?Por qu¨¦ Madrid construye m¨¢s vivienda de protecci¨®n, en t¨¦rminos absolutos, que el resto de comunidades? Sala lo explica b¨¢sicamente por un hecho: ¡°All¨ª, hasta la aprobaci¨®n de la Ley de la Vivienda (en vigor desde el 26 de mayo), los pisos protegidos no ten¨ªan esa calificaci¨®n de forma permanente, sino que era temporal, de hasta 15 a?os¡±. El efecto es que al poder entrar tras ese periodo en el mercado libre, tanto en el de alquiler como en el de compraventas, su promoci¨®n como VPO era m¨¢s rentable. En otras comunidades, como Catalu?a, esa liberalizaci¨®n de la vivienda se bloque¨® hace casi dos d¨¦cadas.
Otras de las conclusiones a las que llega el estudio es que el 80,2% de la promoci¨®n de pisos de protecci¨®n recae sobre las espaldas del sector privado, una demostraci¨®n de la escasa inversi¨®n que est¨¢n efectuando las administraciones espa?olas pese al creciente problema del d¨¦ficit de vivienda. Los recursos p¨²blicos destinados a vivienda, seg¨²n los autores del estudio, habr¨ªan ca¨ªdo un 61,5% entre 2007 y 2018 pese a las continuas promesas de que se promover¨¢ m¨¢s vivienda para responder a la alta demanda y a la escalada de precios en la que est¨¢ instalada.
De hecho, el estudio denuncia esa falta de recursos y clama por que se recuperen medidas de financiaci¨®n que hab¨ªan sido b¨¢sicas para la promoci¨®n de vivienda p¨²blica: los pr¨¦stamos calificados para promociones (acordados por la Administraci¨®n y los bancos), que se acabaron en 2012, los subsidios a estos para reducir los tipos de inter¨¦s y las ayudas directas destinadas tanto a promotores como a adjudicatarios de las viviendas ya construidas. Sin recuperar esos instrumentos, se?ala el informe, ser¨¢ dif¨ªcil lograr los objetivos marcados por la Ley de la Vivienda, conseguir en 20 a?os que el 20% de todo el parque de alquiler sea protegido en el caso de las denominadas zonas tensionadas: ¡°Este es un reto de dif¨ªcil cumplimiento, especialmente si no se incrementan sustancialmente las partidas presupuestarias destinadas a las pol¨ªticas p¨²blicas de vivienda¡±, reza el informe.
15.000 viviendas de alquiler social al a?o
Carles Sala ha ido m¨¢s all¨¢, demandando que cualquier promesa de construcci¨®n de vivienda vaya acompa?ada de una preasignaci¨®n presupuestaria. Incluso, ha criticado que la Administraci¨®n del Estado se haya ahorrado en torno a 4.000 millones anuales de gasto desde que apost¨® por retirar las ayudas a la compra de vivienda, desaparecidas desde 2013 y al pago del alquiler a determinados colectivos. El profesor de la Universitat Rovira Virgili, exresponsable de Vivienda de la Generalitat de Catalunya, ha considerado que hubiera sido positivo que se derivaran esos recursos ¡°hacia pol¨ªticas directas de vivienda¡±.
De otra forma, no ser¨¢ posible el objetivo que demanda la poblaci¨®n espa?ola. El estudio de la UPF recuerda que seg¨²n la proyecci¨®n de creaci¨®n de nuevos hogares requerir¨¢ una media de 15.000 viviendas por a?o durante los pr¨®ximos tres lustros. Y, como tambi¨¦n recoge el informe, en los ¨²ltimos nueve a?os apenas se han acabado 11.500 viviendas de ese tipo.
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